En medio de protestas ciudadanas

México aprueba la reforma energética

  • El texto impulsado por el presidente Enrique Peña Nieto obtuvo 354 votos a favor y 134 en contra. El debate continúa porque se han presentado reservas individuales a los artículos de la iniciativa. Permitirá contratos con particulares en la exploración y extracción del petróleo y demás hidrocarburos.
México aprueba la reforma energética

Polémica. Varios manifestantes se pronunciaron contra los diputados y senadores del PRI y del PAN que votaron a favor de la reforma energética que abre la posibilidad de inversiones extranjeras en la empresa estatal PEMEX

Foto:Agencia EFE

 

Redacción de El Litoral

Agencias EFE/DPA

La Cámara de Diputados de México aprobó hoy en términos generales el proyecto de reforma energética que fue anunciado en agosto pasado, aunque el debate continúa porque se han presentado reservas individuales a los artículos de la iniciativa.

El texto tuvo 354 votos a favor, 134 en contra y 0 abstenciones. Contó con el apoyo del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), del conservador Partido Acción Nacional (PAN) y de otras fuerzas políticas menores.

Votaron en contra los grupos de la izquierda, entre ellos el Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Al incluir el proyecto modificaciones constitucionales, necesitaba los dos tercios de los escaños, que fueron alcanzados en la votación.

Según anunció la presidencia de la Cámara baja, un total de 102 diputados, todos ellos de grupos de izquierda, han presentado mociones particulares a las modificaciones de tres artículos de la Constitución que se ven afectados por esta reforma.

Una vez aprobado en lo general el proyecto de reforma energética, se pasó al debate de esos planteamientos individuales respecto a puntos determinados del proyecto, por lo que las discusiones se puede prolongar por varias horas.

Como todas esas reservas particulares son apoyadas sólo por diputados de la izquierda, lo más probable es que sean rechazadas todas, pero ello no impedirá que sean defendidas en la tribuna por los legisladores que las han presentado.

Un proyecto discutido

La propuesta busca abrir el sector energético de México a la iniciativa privada y terminar con el monopolio del Estado en la explotación del petróleo y del gas, que está vigente desde la expropiación petrolera de 1938.

El análisis de esta propuesta comenzó en la Cámara de Diputados después de más de una hora de debates previos sobre procedimientos porque el proyecto se llevó al pleno sin pasar antes por las comisiones legislativas.

La discusión de la reforma por los diputados se prolongó por casi cuatro horas.

En la tribuna, los legisladores a favor de la propuesta reiteraron la necesidad de reformar el sector energético para impulsar la economía y abrir nuevas oportunidades a fin de explotar mejor los recursos de hidrocarburos.

La izquierda, en cambio, volvió a insistir en que el Estado siga a cargo de la explotación del petróleo y del gas y rechazó la posibilidad de que se cambie la Constitución para que puedan entrar en el sector empresas privadas.

Durante la sesión hubo momentos de tensión, algún forcejeo entre legisladores e insultos como “panda de rufianes” o “traidores“ dirigidos desde la izquierda a los diputados que estaban respaldando la reforma energética.

En un momento de las deliberaciones, el legislador de izquierda Ricardo Monreal se presentó en tribuna con un termo de café asegurando que se trataba de una “cápsula de tiempo” donde se incluirían los nombres de quienes apoyaban la iniciativa. El proceso legislativo se está acelerando porque el período ordinario de sesiones del Parlamento termina el próximo domingo, y el Gobierno confía en que pueda completarse el trámite para entonces.

Como incluye reformas constitucionales, el proyecto, cuando quede totalmente aprobado por la Cámara de Diputados, debe ser ratificado por al menos 17 de los 32 poderes legislativos de los estados.

La iniciativa busca que la empresa pública Petróleos Mexicanos (Pemex) se reserve la explotación de los yacimientos más rentables, y se espera que en el resto puedan operar las empresas privadas mediante contratos de producción o de utilidades compartidas.

Tardará bastante tiempo antes de que el petróleo de México comience a ser explotado por empresas privadas, porque faltan aún las leyes secundarias que precisarán los términos de esta reforma y mayores detalles sobre las condiciones de contratación.

La reforma energética, calificada como “transcendental” por el Gobierno, es la iniciativa legal más importante presentada hasta ahora por el presidente Enrique Peña Nieto, del PRI, que asumió el poder hace un año.

Claves de la reforma

Para comprender mejor el alcance de la reforma, el Centro de Investigación para el Desarrollo de México resumió algunos puntos importantes de la misma.

Pemex y CFE

Pasarán de ser organismos descentralizados a “empresas productivas del Estado”, cuya operación se sustentará en criterios de eficacia, eficiencia, honestidad, productividad y transparencia con base en las mejores prácticas de su sector respectivo.

Hidrocarburos

El petróleo es propiedad de la Nación en carácter de inalienable e imprescriptible, por lo que un esquema de concesiones permanece prohibido. La Nación llevará a cabo la exploración y explotación de los mismos mediante asignaciones a empresas productivas del Estado o a través de contratos de éstas o con particulares.

Se establecen cuatro modelos contractuales básicos: 1) de servicios (con pagos en efectivo); 2) de utilidad compartida (con pagos hechos con un porcentaje de la utilidad aún no establecido formalmente); 3) de producción compartida (con pagos hechos con un porcentaje de la producción aún no establecido formalmente); 4) licencias (con pagos hechos por medio de la transmisión onerosa de los hidrocarburos, una vez extraídos éstos del subsuelo). También es posible una combinación de las cuatro opciones.

Fondo Mexicano del Petróleo (FMP)

Administrará los ingresos petroleros, salvo las contribuciones. El fideicomiso se constituirá en 2014 para comenzar a operar en 2015. Será un fideicomiso público con el Banco de México como fiduciario.

Electricidad

La Nación conservará el control exclusivo del Sistema Eléctrico Nacional, el cual será operado por el órgano correspondiente, así como el servicio público de transmisión y distribución -en estas actividades no se otorgarán concesiones-, sin perjuicio de que pueda celebrar contratos con particulares en los términos que habrá de establecer la legislación secundaria. Se quitan las palabras “generar”, “conducir”, “transformar” y “abastecer” energía eléctrica como potestades exclusivas de la Nación.

La generación y la comercialización de energía eléctrica serán abiertas a la participación de particulares, quienes harán uso de las redes de transmisión y las redes de distribución para comercializar la energía que produzcan.

La SENER establecerá los términos de estricta separación legal en la electricidad para fomentar el acceso abierto del sector, y el Congreso debe ajustar el marco regulatorio en el cual operará la CRE.

Desarrollo sustentable

Se introduce el concepto de “sustentabilidad” para que en el desarrollo económico se tome en cuenta el entorno ecológico. Además, el Congreso deberá crear la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos como órgano administrativo desconcentrado de la SEMARNAT, con autonomía técnica y de gestión.