Las viviendas de las Madres de Plaza de Mayo

Polémica entre gobierno y AGN por el plan “Sueños compartidos”

Capitanich cuestionó un informe de la Auditoría y defendió lo hecho en el Chaco. Despouy replicó que los datos tienen respaldo judicial y de los miembros oficialistas del organismo.

a_mg_IMG_0263.jpg

Despouy afirma que hay “elementos categóricos” que comprometen a funcionarios, mientras que Capitanich responde que "sólo se busca atacar al gobierno". Foto: Mauricio Garín

 

De la redacción de El Litoral

[email protected]

DyN

El titular de la Auditoría General de la Nación (AGN), Leandro Despouy, defendió hoy el informe que reveló un desvío de fondos millonario por parte de la Fundación Madres de Plaza de Mayo en la construcción de viviendas sociales, al asegurar que contiene “información validada por la Justicia” y por los propios miembros “oficialistas” del organismo.

Además, advirtió que el estudio “tiene elementos muy categóricos no sólo de responsabilidad de quienes administraron el programa Sueños Compartidos, los hermanos (Sergio y Pablo) Schoklender, tesoreros, etc., sino también sobre el comportamiento de funcionarios de gobierno”.

Esta afirmación la realizó luego de que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, cuestionara esta mañana, desde la Casa Rosada, por “inconsistente” el informe, “aprobado por unanimidad con el apoyo de todos los auditores generales, entre ellos los oficialistas”, según destacó Despouy en declaraciones a radio Continental y en su cuenta de la red social Twitter.

“La AGN en manos de la oposición es una herramienta de oposición política con el sentido de atacar el gobierno”, lanzó esta mañana Capitanich.

En una investigación de más de 200 páginas, la Auditoría detectó una faltante de 42 millones de pesos en la construcción de viviendas sociales que manejaba la Fundación Madres de Plaza de Mayo, cuyo ex administrador, Sergio Schoklender, protagonizó una feroz pelea pública con su titular, Hebe de Bonafini.

Un sistema válido

“Yo celebro que el gobierno nacional haya impulsado una iniciativa de esta naturaleza que ha permitido mejorar la calidad de vida de muchos chaqueños y muchos argentinos”, sostuvo Capitanich.

El jefe de Gabinete, gobernador de Chaco en uso de licencia, rechazó las graves irregularidades que el informe de la Auditoría denunció en el programa habitacional instrumentado en el territorio norteño. “Con respecto a la provincia de Chaco puedo asegurar que se han hecho todas las auditorías correspondientes: las viviendas se han construido y los recursos han sido eficazmente empleados”, remarcó e insistió en que la AGN sólo busca “atacar políticamente” al gobierno.

El ministro coordinador sostuvo que en la provincia que gobernó hasta hace tres meses “el programa Sueños Compartidos ha servido para hacer numerosos hospitales y ha sido un sistema constructivo válido que permitió la capacitación de obreros y trabajadores”.

“Las metas son construir cerca de 4 mil viviendas y (hasta hoy) seguramente se habrán superado las 1.300 viviendas, realizadas con un sistema constructivo de alta calidad, que permite satisfacer claramente una demanda”, expresó.

Entre las irregularidades descubiertas por la AGN, figura que la Fundación hizo pagos cercanos a los 150 millones de pesos a personas jurídicas cuya actividad no tiene relación con la construcción de viviendas, como empresas agropecuarias, bursátiles, cooperativas y mutuales.

análisis

POR Walter Schmidt (DyN)

La ausencia del conductor

Una semana atrás, la cara visible de las Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, dejó de lado su diatriba habitual y confesó que, en estos momentos, Néstor Kirchner “hace una falta inmensa” al proyecto político iniciado en 2003.

Al margen de las versiones, rumores, chicanas, picardías o autobombo en torno a una eventual salida anticipada del gobierno, en los últimos días han ocurrido situaciones que no sólo ponen en duda el rumbo del gobierno nacional sino que generan que las palabras de Bonafini retumben como un eco permanente en las paredes de la Casa Rosada.

* Kirchner nunca hubiera permitido que Daniel Scioli convocara a los ministros de Economía de todas las provincias y lograra una convocatoria de 15 distritos para discutir sobre las deudas con la Nación, el financiamiento y las paritarias.

* Menos aún hubiera soportado que el gobernador bonaerense expusiera sobre la economía argentina, las inversiones y las perspectivas, ante el sofisticado auditorio del Consejo de las Américas, en Nueva York. El mismo Scioli que ya envió un claro mensaje hacia el empresariado argentino, al publicitar sus reuniones con Mario Blejer, Miguel Bein o Guillermo Nielsen, como si se tratará de su equipo económico para el 2015.

* De ninguna manera, el santacruceño hubiera soportado que el ex jefe de Gabinete del gobierno de su esposa, Sergio Massa, le robara un intendente clave en el armado bonaerense, como Raúl Othacehé, para sumarlo a las filas del Frente Renovador.

* Kirchner tampoco hubiera dilatado por 24 horas, como ocurrió, una respuesta de duro rechazo a las expresiones del ministro de Economía del Uruguay, Mario Bergara, quien señaló que “no está claro quién está al mando” en la Argentina. Como mínimo, habría ordenado convocar al embajador del país vecino para expresarle su repudio a esas expresiones.

* Nunca hubiera permitido que la situación judicial de Amado Boudou, o bien la convocatoria a indagatoria de su ex jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y de uno de “sus chicos” de La Cámpora, Rodrigo “Rodra” Rodríguez, coparan el escenario mediático a modo de un desfile de funcionarios en los juzgados.

* De ninguna manera, hubiera dejado expuesto al gobierno nacional, con los rumores en el medio de una renuncia de Jorge Capitanich, de convocar a Marcelo Tinelli para hacerse cargo de Fútbol para Todos, para después forzar su salida.

* Menos aún que uno de los ministros de gobierno, como Florencio Randazzo, se cortara solo saliendo a responder sobre los rumores de una salida anticipada de Cristina Fernández o admitiendo el proceso inflacionario en la Argentina.

* ¿Kirchner hubiera retado a su principal aliado, Antonio Caló, en público? ¿O lo hubiera llamado a Olivos y allí, sí, se despachaba por haber sugerido que hay trabajadores que pasan hambre?

Evidentemente el gobierno, el proyecto, el modelo, el Frente para la Victoria está padeciendo la ausencia de un conductor político, que conduzca y tenga la suficiente presencia durante el proceso de los proyectos, que logre alterarlos. Cristina Fernández sólo conserva la última palabra.

Escuchar a la presidenta dando clases de controles de precios a los jóvenes militantes K y a todos los argentinos, es de una precariedad política extrema. En todos los países del mundo, el sector empresarial es ventajista, especulador y busca la hiperrentabilidad sin importarle el consumidor. Es algo que ocurre en la actualidad y desde el siglo pasado.

Sin embargo, el gobierno traslada a la gente la responsabilidad de controlar los precios para que no haya inflación. Ridículo. Si los ciudadanos hacen el trabajo del Ministerio de Economía, entonces habría que pensar seriamente en la disolución de ese cartera, al menos para ahorrarnos los gastos de funcionamiento.