Tres días sin rastros del avión

Desesperada búsqueda del Boeing de Malaysia Airlines

  • Las autoridades desmintieron que se hayan encontrado restos de la nave, cuya desaparición califican de “misterio”, mientras la investigación sigue sin descartar ninguna posibilidad.
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Equipos de varios países del mundo buscan intensamente algún indicio del avión desaparecido.

Foto: Agencia EFE

 

Redacción de El Litoral

Agencias EFE/DPA

Las autoridades de Malasia desmintieron hoy que se hayan encontrado restos del avión de Malaysia Airlines cuya desaparición el sábado califican de “misterio” mientras la investigación sigue sin descartar ninguna posibilidad.

El director general del departamento de Aviación Civil, Azharudin Abdul Rahman, indicó que no hay confirmación de que las presuntas partes del fuselaje avistadas por un hidroavión vietnamita la jornada de ayer pertenezcan al avión desaparecido.

“Lamentablemente, no hemos encontrado nada que parezca ser del avión”, dijo Azharuddin en rueda de prensa.

Cuatro aeronaves del Ejército de Vietnam se trasladaron este lunes a unos 93 kilómetros al sur de la isla de Tho Chu para tratar de verificar lo que parecían desde el aire un fragmento de cola y una puerta interior de un avión.

“Estas informaciones no han sido verificadas hoy oficialmente por las autoridades de Vietnam”, dijo el dirigente de Aviación Civil malasio, sin descartar ninguna posibilidad.

Más tarde, fue enviado un helicóptero para examinar un “objeto amarillo” avistado en el mar y al final se comprobó que no se trataba de un bote salvavidas del aparato, sino de la funda mohosa de un carrete de cables.

Los análisis de laboratorio también han determinado que las muestras de carburante recogidas el fin de semana en el mar de dos grandes manchas tampoco pertenecen al vuelo desaparecido, sino a actividad naviera.

Un veterano piloto de aviones comerciales y militares, con 40 años de experiencia, declaró al diario ‘Malaisakini‘ que de haber estallado el avión los radares deberían haber registrado la explosión.

“Es poco probable que el avión diera la vuelta hacia el estrecho de Malaca sin que los radares lo detectaran”, apuntó el piloto, quien no descartó la posibilidad de que se desintegrara en el aire, como sucedió con un avión de la Pan AM que explotó cuando sobrevolaba la localidad escocesa de Lockerbie el 21 de diciembre de 1988 o la de un avión de TWA en el océano Atlántico el 17 de julio de 1996.

Una flota internacional de 40 barcos y 24 aviones rastrea las zonas del golfo de Tailandia donde se presume que podría haberse estrellado el Boeing 777-200 sino cambió de rumbo, según datos de las autoridades de Malasia.

Mientras, agencias de inteligencia de varios países participan en una investigación que se centra en aclarar el posible cambio de rumbo que la nave pudo realizar sin que el piloto lo comunicara ni enviara un mensaje de alerta y en la presencia de pasajeros con pasaportes falsos.

El ministro de Defensa malasio y titular interino de Transportes, Hishamudin Husein, señaló en rueda de prensa que “no hay que dar nada por sentado” en la investigación.

“La información está en manos de las agencias relevantes y hasta que esta no haya sido analizada no daré más detalles para no interferir en las investigaciones”, señaló el ministro malasio.

Hishamudin comentó también que las autoridades ya han estudiado a conciencia la lista de pasajeros y poseen las fotografías de las dos personas que embarcaron con pasaportes robados.

El avión transporta 239 personas: 227 pasajeros, entre ellos dos menores, y 12 tripulantes todos ellos malasios.

La seguridad aérea en jaque

  • La noticia de que dos de los pasajeros del desaparecido vuelo MH370 pudieron embarcar en Kuala Lumpur usando pasaportes robados despertó suspicacias sobre la seguridad aérea en Asia. Según fuentes policiales tailandesas, los mercados negros de documentos robados suelen estar manejados por redes sudasiáticas conectadas con bandas establecidas en Europa, sobre todo en España.

Malasyan Airlines, la compañía que operaba el vuelo, asegura que no encontró discrepancias entre los nombres de los pasaportes y los 227 pasajeros, asegurando que no es responsable de autenticidad de los documentos.

Sin embargo, la organización policial internacional Interporl asegura que el robo de los pasaportes estaba registrado en sus bases de datos y criticó a las autoridades malasias por no haberlas consultado.

El ministro de Interior malasio, Ahmad Zahid Hamidi prometió una investigación al respecto, aunque también señaló que a menudo “es difícil determinar la autenticidad de un pasaporte internacional”, pues no todos los países emplean un sistema biométrico y códigos de barras.

Según expertos en seguridad, es bastante habitual encontrar personas que viajan por Asia con pasaportes robados o falsificados, pues ese tipo de documentos se han utilizado durante décadas para la inmigración ilegal, el tráfico de drogas y otro tipo de crímenes. Los migrantes ilegales de China utilizan a menudo pasaportes robados o falsificados de países más prósperos, como Japón, Singapur, Taiwan y Corea del Sur.

Las redes de falsificación de pasaporte basadas en Tailandia han sido relacionadas en el pasado con ataques terroristas.

Por otro lado, algunas aerolíneas asiáticas han sido multadas por infringir el protocolo de seguridad. A la propia Malaysian Airlines se le impuso en 2012 una multa por alterar el número de un pasaporte para permitir embarcar a un pasajero malasio en un vuelo a Auckland, a pesar de que Nueva Zelanda envió una petición de “no embarque” después de que se realizase en check-in.

Respecto al avión desaparecido el sábado en el trayecto Malasia-Pekín, analistas chinos han puesto la vista en la laxa seguridad de Malasia.