Cristina manda un proyecto de ley al Congreso

Menos impuesto al biodiésel

“Si no los bajamos aumentaría el precio del combustible, y tenemos que equilibrarlo para que las petroleras no lo carguen al consumidor”, dijo la jefa de Estado.

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El gobernador y directivos de Renova. La planta de Timbúes ya trabajaba, pero ayer inauguró formalmente todas sus instalaciones. Foto: Gobierno de la Provincia

 

Corresponsalía Rosario

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Ante una platea que esperaba anuncios para el sector en la planta de Renova en Timbúes, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner adelantó por videoconferencia que enviará al Congreso un proyecto de ley para eximir al biodiésel del pago del impuesto a los combustibles. Ese combustible integra un 10 % del gasoil que se expende en los surtidores del país, pero su industria atraviesa una fuerte crisis.

El anuncio oficial fue durante la inauguración de la planta de procesamiento de soja de Renova, en Timbúes. La fábrica, propiedad de las aceiteras Vicentín y Oleaginosas Moreno (Glencore), tiene una capacidad de procesamiento de 20 mil toneladas diarias y es la más grande del mundo en cuanto a escala desde su concepción. La construcción del demandó una inversión de U$S 480 millones.

En Timbúes, estuvieron el gobernador, Antonio Bonfatti; el secretario de Transporte de la Nación, Alejandro Ramos; el presidente comunal, Amaro Sánchez, y el vicepresidente de Renova, Sergio Gancberg.

El proyecto será remitido a Diputados por ser Cámara iniciadora en temas tributarios. Prevé modificar el impuesto adicional al gasoil (Ley 26.028), de manera que la alícuota del 22 % no sea aplicable al biodiésel destinado a la generación eléctrica.

También plantea eximir de la alícuota del 19 % del impuesto a los combustibles líquidos, retrotrayendo la situación a noviembre de 2011. Esta última medida fue un compromiso que la presidente asumió en su última reunión con la conducción de la Unión Industrial Argentina.

La iniciativa -dijo Cristina- busca responder a “la situación que atraviesan las 33 plantas de biodiésel que emplean a más de 1.600 trabajadores, y que se construyeron casi en su totalidad desde 2003, bajo la Ley de Promoción de Energías Renovables”.

El sector era el principal proveedor de Europa, que interpuso medidas antidumping contra el producto argentino a instancias de España tras la expropiación a Repsol. La Argentina interpuso un recurso ante la Organización Mundial de Comercio; “estas maniobras francamente van en contra de toda normativa comercial internacional”, señaló la jefa de Estado.

La producción local de biodiésel cumple desde sus inicios con todos los requisitos fijados por la Unión Europea, y desde 2009, la Argentina fue el principal país proveedor al mercado europeo. En 2011, las exportaciones a ese mercado totalizaron 1.847 millones de dólares, representando el 13% de las exportaciones argentinas totales al mercado comunitario. De manera que las restricciones impuestas por la UE repercuten directa y negativamente en la balanza comercial argentina, y afectan a productores de toda la cadena.