Sólo lectores

¿Dónde están los asistentes sociales?

GRACIELA

“En la página 27 de Sucesos del día miércoles 16 de abril, en la foto de la escuela Nuestra Señora de Itatí, hay un pequeño vistiendo un pantalón corto de verano, una campera que no abriga, varios talles más grandes, y lo peor de todo, con ojotas, siendo que hubo días de bastante frío. ¿Dónde están los asistentes sociales? Vamos a tener que contactarnos con Lanata para que investigue. ¿Qué hacen?, ¿cuántos son?, ¿cuánto ganan? y ¿qué horarios cumplen? Me gustaría saber la opinión de otros lectores de este diario. La población o los maestros no tienen por qué hacer colectas, porque corresponde al gobierno y a la oposición ocuparse de este tema. Nosotros pagamos nuestros impuestos para que ellos trabajen también por estas situaciones”.

Ruidos insoportables desde un bowling

SILVIA

“Vivo en Calle Rivadavia al 3400. En esa cuadra hay sólo 3 casas y en un local en donde se vendían antes cubiertas instalaron un bowling. Los días viernes, sábados y feriados es imposible dormir por el volumen de la música. Lo que no entiendo es si cuando uno juega gana porque la música esté más fuerte. Si no es un local bailable por qué la música está a tan alto volumen. Lo menos entendible es que a medida que va avanzando la noche, entrando a la madrugada la música es insoportable. No sé a quién le toca controlar estos lugares, porque Ruidos Molestos de la Municipalidad trabaja hasta las 12 de la noche. Llamé al 911 (ya que venimos aguantando los ruidos desde que están arreglando el local y creo que así como ellos tienen el derecho de trabajar nosotros el de descansar) pasaron 5 móviles esa noche y ninguno paró. Me hice presente en el lugar un montón de veces, durante este tiempo, y sólo así cuando uno va bajan la música. Debe haber algún organismo que se encargue de controlar estos boliches y el volumen de la música, o lo que se espera es que uno se canse de tener paciencia y buenos modales”.

El Litoral mal impreso

ALBERTO

“Nuevamente recibí el ejemplar del diario con varias páginas que no se pueden leer por falta de color en la impresión. Desde hace más de 50 años que recibo el diario todos los días, en la actualidad y desde hace 20 años, a través de Ramón Candia. Espero subsanen el problema. Saludos”.

N. de R.: Gracias por advertirlo, tomaremos las medidas necesarias para controlar una mejor impresión.

Cambio de recorrido por inseguridad

MARCELO DEL Bº CENTENARIO

“A pesar de los allanamientos en las zonas aledañas al Fonavi del barrio Centenario, el tema de la inseguridad sigue latente. Días pasados un colectivo de la Línea 5, cuando caía la tarde, fue apedreado por un grupo de inadaptados. El colectivo sufrió daños y personas que viajaban en el micro resultaron lesionadas. Debido a los asaltos la empresa de la Línea 8 decidió que los colectivos, desde de las 20 y hasta la 8, tomaran por O'Higgins hasta Vera Mujica y no hasta Malvinas Argentinas como lo venía haciendo. Como siempre, los usuarios son los que pagan las consecuencias”.

De nuevo, los trapitos

BEATRIZ

“Somos varios vecinos de calle 25 de Mayo 3200, que estamos siendo asolados por un grupo de trapitos que están borrachos, drogados y no dejan al vecindario en paz. No sé si esto puede ser para que lo lea el señor intendente, ya que hemos hecho muchos reclamos y no nos escuchan”.

A oscuras

CARMEN DE RECOLETA

“Hace por lo menos dos meses que calle San Martín entre bulevar y Suipacha es una boca de lobo. ¡Estamos hablando de plena Recoleta santafesina! No prenden las luminarias de la calle. Realmente da miedo caminar por esas cuadras tan oscuras, más teniendo en cuenta que vecinos de la zona hemos sufrido varios asaltos en plena oscuridad”.

En Colastiné hay lagunas en las calles

CARLOS, DE COLASTINÉ NORTE

“Los vecinos de calle Los Urunday, entre el 5000 y el 5300, en el barrio Colastiné Norte, pedimos al municipio que las máquinas que nivelan las calles de arena lleguen hasta este sector del barrio porque se forman enormes lagunas en los pozos luego de las lluvias. También pedimos que se analice la situación hídrica del sector porque se inunda toda la calle, durante varios días, luego de lluvias intensas”.

Pasión sabalera desmedida

UN LECTOR

“Ya no se pueden oír los comentarios sobre fútbol por radio. Pido a un periodista habitual en una radio local que se saque la camiseta de Unión y transmita los comentarios de los partidos del club Colón, sin resentimientos, cuando éste gana como lo hizo frente a Newell's Old Boys. A él se lo contrata para hacer un periodismo serio y no para atacar siempre a la institución sabalera. Los equipos siempre necesitan aliento para seguir adelante, ya sea para no descender como para ascender... Además solicito se me explique qué significa el título de la sección Deportes de fecha 14-04 que dice ‘El oro y el barro'. Me parece muy agresivo hacia Colón”.

Inseguridad y yuyos

VECINOS DE CALLEJÓN FUNES

“En Callejón Funes entre Rivadavia y Las Heras, los yuyos nos tapan y eso genera inseguridad. Hace mucho tiempo que esa zona está totalmente abandonada”.

Aguas servidas frente a la escuela Nils Eber

CARINA FERNÁNDEZ

“Por este medio quiero expresar mi descontento por la situación que deben vivir los vecinos de Gorriti al 4600, por la acumulación de agua que se produce en el asfalto, en la mano norte, luego de la radicación de una firma que arroja el agua a la calle. Esto dificulta el acceso de los alumnos y docentes de la escuela Nils Eber, que deben pisar el agua y el barro que se produce allí, para poder ingresar al establecimiento. Por favor que alguien controle esto”.

Piden respetar el silencio religioso

NORMA DE SGTO. CABRAL

“Señor intendente: fue increíble y doloroso lo que pasó en el Parque Federal este Viernes Santo. ¿No tenían otro día para hacer semejante espectáculo? Para los católicos esa jornada es de silencio y oración, y estuvimos dos días escuchando semejante volumen y de no poder concentrarnos en nuestro diario vivir. Me dolió el corazón por lo ocurrido, no se entiende más nada. Sólo se pide respeto, ante todo”.

El hombre que vuela

MARTÍN DE Bº 7 JEFES

“Si algo le faltaba al infierno sonoro que sufrimos quienes vivimos cerca de la Costanera, con las picadas de motos, todas las noches, y los decibeles de las discotecas de la otra costa, era esto: el hombre que vuela. Se trata de uno (o varios) señores deportistas que se divierten dando vueltas por el barrio con unas alas y sobre todo con un motor bastante estruendoso. El domingo de Pascua, el hombre que vuela estuvo jorobando toda la tarde, de aquí para allá, dando volteretas sin cansarse. Lo único que nos falta, ahora que se fue la draga que nos impidió dormir durante meses, es que inventen algo subterráneo, así podremos estar rodeados de ruidos por todos lados”.