Los sabaleros debutan mañana a las 15 en el Brigadier López...

De la Redacción de El Litoral Llegó el momento de la verdad

Colón volverá a jugar en la B Nacional, después de 19 años de militancia en Primera.

Llegó el momento de la verdad. Después de 19 años de militancia en Primera, a Colón le tocó la desgracia del descenso aunque tendrá la posibilidad, en cuatro meses, de volver a Primera en este torneo con “ascensos express” que forma parte de la tan mentada, comentada y aún no totalmente definida reestructuración de los campeonatos.

No es que corran peligro los diez ascensos (esto está totalmente definido), sino que todavía no se ponen de acuerdo los dirgentes respecto de cómo jugar la temporada que se avecina. Pero este será otro “cantar”, ya que el verdadero y gran objetivo de Colón y de los otros 21 equipos que empiezan a jugar este torneo hasta el 6 de diciembre venidero, es estar dentro de los cinco primeros de cada una de las dos zonas para jugar en Primera desde febrero.

Colón incorporó 12 refuerzos. La cifra, a priori, asusta. Sobre todo si se tiene en cuenta que en un torneo corto, no hay tiempo para esperar que el equipo se amalgame y funcione. Las primeras cinco o seis fechas permitirán vislumbrar candidaturas. Es que son 20 partidos que definirán cinco lugares y el objetivo de llegar a los 30 puntos se puede complicar si el arranque no es bueno.

De todos modos, hay que contemplar algo que evidentemente ocurrió en Colón: la “sangría” de jugadores. Por diferentes motivos, Montoya, Alcoba, Graciani, Meli, Videla, Mansilla y Luque, que formaban parte de la estructura titular y estable del equipo, tuvieron que dejaron la institución. Las ventas y los contratos terminados y no renovados, hicieron que siete jugadores que habitualmente integraron el equipo de Osella de los 30 puntos que peleó el título, en el torneo de Primera.

Al menos en el arranque, la idea del técnico es no modificar tanto la estructura que tenía el equipo desde lo táctico (habrá que ver lo estratégico). Jugará con cinco volantes, de los cuáles dos de ellos se transformarán en extremos (Villarruel y Callejo), porque tienen alma de delanteros.

Varios de los que llegaron no jugarán. Entre los “nuevos”, el arquero Broun, un viejo conocido como Franco Lazzaroni, Yamil Garnier y Telechea, que tendrá la oportunidad en virtud de que Lucas Alario está suspendido y, por ende, no podrá jugar el partido de mañana. Si no, el titular parece ser Alario, quien en el torneo pasado hizo un buen trabajo y sólo le faltó la dosis de eficacia. Que si la consigue, sin dudas se transformará en el jugador con mayor futuro —deportivo y económico— de este plantel.

Las buenas actuaciones de Poblete y de Marcos Fernández frente a Lanús por la Copa Argentina, también le dieron la chance de ser tenidos en cuenta por Osella. Ellos dos más Garnier serán los encargados de darle equilibrio al mediocampo, que se parará con cinco volantes a la hora de recuperar y que tendrá tres puntas cuando el equipo deba atacar, algo que ya ocurrió en el encuentro ante Lanús.

Algunos opinan que Lanús no es medida. Es un equipo de Primera y ofensivo. Se cree que en este torneo de ascenso, los equipos no saldrán a plantear un juego tan abierto y vertical como el de los granates. Lanús es uno de los más ofensivos del fútbol argentino. Y las medidas, para Colón, empezarán a verse desde mañana.

Enfrente tendrá a un rival que puede convertirse en protagonista. De hecho que Instituto siempre lo fue en la B Nacional, donde en un par de oportunidades estuvo muy cerca de ascender, sobre todo cuando contó con aquella estrella que rápidamente se le fue: el juvenil Dybala.

Instituto debió afrontar un período con complicaciones e inhibiciones en todo este proceso, al punto tal que hasta el día de hoy todavía no sabía -al menos hasta el cierre de nuestra edición- si finalmente contará con los refuerzos, que igualmente viajaron (ver información aparte).

La cuestión, como se dijo más arriba, es arrancar lo mejor posible y sumar de local. Será clave para lograr tranquilidad y no sufrir sobresaltos en un torneo que parece accesible, pero...

12

Partidos

Jugaron Colón e Instituto en Santa Fe, con 8 victorias sabaleras, tres empates y uno solo triunfo de la Gloria. Ese triunfo de los cordobeses fue en el Reducido 94, por 2 a 1 con goles de González y la Lora Oliva, mientras que Mamani lo hizo para Colón.

Miliki, el equipo y la “desinhibición”

• Daniel Jiménez quedó más conforme con el rendimiento que presentó el primer equipo de Instituto en su última práctica previa al debut de mañana, a las 15, ante Colón.

Luego del entrenamiento del miércoles donde el DT expresó que tenía muchas dudas, se decidió realizar otra práctica de fútbol este jueves.

Con respecto a la formación anterior, sólo se realizó una variante, el ingreso de Adrián Peralta por José Luis García en la banda izquierda del medio campo.

De esta manera el equipo estuvo más equilibrado y, a pesar que no hubo goles en el trabajo, el entrenador quedó más conforme.

Igual, al finalizar aclaró que no está confirmada la alineación para enfrentar al Sabalero. Sobre la salida de ‘Pipi‘ García se debió a una cuestión más táctica que de rendimiento. ‘Ahora jugó de enganche y vieron cómo lo hizo‘, dijo Jiménez sobre el buen rendimiento del ex Almirante Brown.

Además viajaron nueve jugadores, en su mayoría, juveniles. Con Brian Olivera, Emiliano Castro, Emiliano Endrizzi, Juan Carlos Maldonado, Ignacio Antonio, ‘Pipi‘ García, Mateo García, Pablo Soda y Gustavo Gotti completan la delegación que ya está en Santa Fe.

Una vez desinhibido, lo que resta para que jueguen los refuerzos es que lleguen sus habilitaciones desde sus anteriores clubes.

En ese aspecto, Rimoldi y Aguirre parecen ser los más complicados ya que llegan del exterior. Sin embargo, ambos volantes confían en que en las próximas horas se solucionará el asunto.

Tanto el volante central como el enganche hicieron personalmente las gestiones para que el trámite se haga rápido. Es por esto que viajaron 20 jugadores en la delegación.