Primero el trabajo... después la presentación

Arruabarrena está como en su casa

El “Vasco” se puso ayer mismo al frente del equipo y dirigió su primera práctica en el predio de Casa Amarilla, incluso antes de ser presentado oficialmente como el flamante DT de Boca Juniors.

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Manos a la obra.

Llegó y enseguida se puso a trabajar. Arruabarrena tiene que sacar a Boca de esta difícil situación deportiva.

Foto: DyN

Redacción de El Litoral

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El nuevo entrenador de Boca Juniors, Rodolfo Arruabarrena, adelantó ayer que quiere un “equipo compacto que tenga compromiso para atacar y defender”. “Me gustan las cosas claras, quiero un equipo compacto que tenga compromiso para atacar y defender. Me gusta tener la pelota”, definió el director técnico que al frente del plantel xeneize hará su debut oficial mañana ante Vélez Sarsfield, en La Bombonera, por la quinta fecha del Torneo de Primera División.

Arruabarrena habló así al ser presentado por el presidente Daniel Angelici en conferencia de prensa, la que se realizó luego de que dirigiera la primera práctica, en la que, a diferencia de lo que era habitual en Carlos Bianchi durante esta temporada, recurrió a cambio de nombres y dibujo táctico, dado que primero observó un 4-3-1-2 y luego, un 4-2-3-1, el que parece contar con más chances de ser empleado ante los Fortineros.

Al comenzar el ensayo táctico, Arruabarrena puso a Agustín Orion; Leandro Marín, Mariano Echeverría, Daniel Díaz, Nicolás Colazo; César Meli, Fernando Gago, Cristian Erbes; Luciano Acosta; Jonathan Calleri y Andrés Chávez. Después, a la hora del 4-2-3-1, formó con Orion; Marín, Echeverría, Díaz, Colazo; Erbes, Meli; Acosta, Gago, Federico Carrizo; Calleri.

Arruabarrena consideró que tienen “la obligación de ganar los dos partidos” en alusión a los compromisos inmediatos, el del domingo contra Vélez, por la competencia doméstica, y ante Rosario Central, el miércoles, en el Gigante, en juego de ida por la Copa Sudamericana. “Nosotros tenemos la obligación de ganar los dos partidos y vamos a ir a buscar los dos partidos”, se comprometió Arruabarrena, aunque aclaró que primero piensa en el cotejo ante Vélez, porque es el más cercano en el tiempo. El flamante conductor aseguró que su equipo “tiene la obligación de pelear” el Torneo de Primera División y la Copa Sudamericana. “Boca tiene la obligación de pelear los dos torneos, por lo que significa. Necesitamos el apoyo de todos”, puntualizó.

Acerca de cómo encontró a los futbolistas de ánimo, el ex marcador lateral izquierdo, sintetizó su apreciación: “Los jugadores están dolidos, con rabia, pero confío en ellos”. Por supuesto que Arruabarrena, quien fue jugador de Bianchi durante el primer ciclo tan exitoso del Virrey en Boca, lamentó la partida de su maestro. “Me habría gustado que a Carlos le hubiera ido mucho mejor y yo quedarme en casa”, resaltó Arruabarrena.

Y lo que hizo también el flamante conductor de los auriazules en su presentación fue referirse al significado que le atribuye al rol que acaban de otorgarle. “Para mí es una responsabilidad muy grande, un orgullo muy importante estar como entrenador del equipo. Todos saben cuál es el sentimiento, el amor que le tengo al club. Es además la posibilidad de abrirle puertas a ex compañeros que son entrenadores y a otros que están en actividad, pero serán entrenadores en el futuro”, precisó Arruabarrena.

Terminó en escándalo la Asamblea xeneize

  • Con un final que mostró un verdadero escándalo, que incluyó golpes de puño y sillazos, la Asamblea de Representantes de Socios de Boca Juniors aprobó la nueva concesión del Museo de la Pasión Boquense.

Ya desde temprano la Asamblea en La Bombonera estuvo salpicada por incidentes que provocaron los hinchas, que insultaron a los dirigentes y causaron desmanes en el recinto, un día después de la destitución en el cargo del entrenador Carlos Bianchi.

A raíz de los gritos y los insultos, el prosecretario de la institución, Marcelo London, tuvo que abandonar el recinto. “El que no salta es de Huracán”, gritaban los enfervorizados hinchas, con destino al presidente Daniel Angelici, quien no participó de la reunión. Los simpatizantes hicieron sentir su descontento con la conducción, un día después de que le hayan rescindido unilateralmente el contrato a Bianchi, el director técnico más ganador en la historia del club. “Que de la mano de Carlos Bianchi, todos la vuelta vamos a dar”, clamaban los aficionados para reivindicar al Virrey. Además, este semestre se produjo la partida del ídolo Juan Román Riquelme a Argentinos Juniors, debido a que el experimentado armador se consideró víctima de un destrato de la dirigencia encabezada por Angelici y con ese argumentó evitó renovar el vínculo, episodio que también los socios le recordaron ayer a las autoridades xeneizes.

Con este clima, la Asamblea tuvo varias interrupciones, pero los episodios más serios se precipitaron una vez que se consumó la nueva privatización del Museo. Por entonces, el grito de guerra fue “Boca no vende”, hubo revuelo de sillas y tampoco faltaron los golpes de puño.

En la agenda, el tema principal de la noche era la tercerización del Museo de la Pasión Boquense y en la semana, por redes sociales, los socios se habían autoconvocado para repudiar la concesión de ese sector del estadio.

“La decisión fue rápida y pensamos en el ‘Vasco’ porque conoce al club. Es el primer técnico de aquella generación de jugadores que tantas satisfacciones nos dio a los hinchas de Boca”.

Daniel Angelici

Presidente de Boca

“Hay mucha fantasía. No continuemos con eso, la comisión directiva fue la que tomó la decisión. Jamás opiné de las cosas importantes de Boca en estos tiempos”.

Mauricio Macri

Ex presidente de Boca

“No es justo ni respetuoso lo que se hizo. Desde ayer (por el jueves) dijeron que estaba todo cerrado, por lo que es algo impresentable por parte de los directivos de Boca”.

Carlos Ischia

Ex ayudante de Bianchi