El campo teme que lo obliguen a vender

Tensión por la soja y los dólares

El gobierno necesita las divisas por la venta de la oleaginosa. Las entidades agropecuarias rechazan la decisión de la Afip que los intima para informar en detalle dónde están “ensilados” los granos.

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Sin crédito y con pocas reservas, la Casa Rosada mira de reojo a las bolsas con soja. Foto: Archivo El Litoral

 

De la redacción de El Litoral

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Sin financiamiento externo, con obligaciones de pago que superan las divisas que entran por el superávit comercial y con fuga del sistema bancario, el camino más corto que tiene la Casa Rosada para el ingreso de dólares es la venta de 27 millones de toneladas de soja “embolsadas”.

Pero con la cotización oficial menos retenciones, los propietarios de la soja venderían hoy a un dólar de 5,40. Todo cuando el precio de la soja baja a menos de U$S 370 la t en Chicago para noviembre, casi 170 dólares menos que en abril pasado, y en un escenario donde la devaluación argentina vuelve a ser una posibilidad más allá de la promesa oficial.

Los productores suponen que el gobierno va a devaluar y la Casa Rosada está urgida por las divisas. “No es por voracidad, no es por una intención devaluacionista; el productor retuvo la cosecha en defensa propia porque la economía es un desastre. No se puede invertir, no se sabe qué va a pasar con la inflación ni con el dólar”, dijo Eduardo Buzzi.

El titular de Federación Agraria teme que el gobierno declare la soja de interés publico y, con la nueva Ley de Abastecimiento, obligue a los productores a venderla. “Se trata de ver dónde están las reservas para manotearlas en cualquier momento”.

Ya ayer el presidente de la Sociedad Rural, Miguel Etchevehere, apuntó en ese sentido contra la Resolución General 2750 de la Afip que busca determinar las “existencias de granos al 31 de agosto de 2014” y requiere la ubicación exacta de silos bolsa con los granos.

Confederaciones Rurales Argentinas, la entidad presidida por Rubén Ferrero, manifestó “su rechazo al mecanismo de control y persecución impuesto por el gobierno nacional, en este caso a través de la Afip, hacia los productores agropecuarios, imponiendo la obligatoriedad de declarar de manera georreferenciada la posición de los silos de su producción agropecuaria”.

“En este mismo sentido, también se solicita información con respecto a la adquisición de silos bolsa para uso propio durante la campaña 2013/2014”, expresó la entidad.

Al respecto, CRA indicó que “el campo no resiste más presiones del Ejecutivo, tampoco intimidaciones, sanciones ni persecuciones a los productores, no teniendo en cuenta en absoluto las necesidades de la producción agropecuaria”.

También la Federación Agraria expresó su “preocupación por el avance del gobierno sobre los productores” y consideró que “alarman todas las señales que está dando el kirchnerismo en esta etapa.

“Por un lado, por este nuevo requisito que implica dar a conocer la geolocalización de los granos y la compra de silos bolsas; y por otro, por la inminente aprobación en el Congreso de la Ley de Abastecimiento, que le otorga al Ejecutivo un poder discrecional para avanzar sobre quienes considere, cuando quiera”, refirió la FAA.

2.230

millones de dólares es lo que perdió el valor de la soja almacenada en dos meses

si los cálculos de la Afip sobre lo que hay en existencia sin vender, son reales.

Un seductor en Manhattan

Mientras la Casa Rosada apura estrategias para buscar los dólares que le faltan, el secretario de Finanzas, Pablo López, viajó a Nueva York en el marco de la estrategia para eludir el pago de deuda en Nueva York.

Pero según los cables que llegan desde Manhattan el funcionario argentino no logró convencer a inversores sobre las bondades de la Ley de Pago Soberano, que Diputados aún debe sancionar. A dos días del viaje, el Ministerio de Economía confirmó la presencia de López en la Gran Manzana, acompañado por la embajadora Cecilia Nahon. El funcionario seguirá viaje a Beijing, China, con similar propósito.

Las agencias internacionales citan a inversores no identificados como poco afectos a la propuesta de la Casa Rosada, que a su vez no adelantó detalles del resultado de las gestiones. El juez Thomas Griesa advirtió a las entidades financieras de los Estados Unidos que podrían ser “sancionadas” si ayudan a la Argentina a “eludir sus fallos”.