Nubarrones

América Latina crecerá menos

Alfonso Fernández

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EFE

Los vientos económicos han cambiado en Latinoamérica por lo que deberá adaptarse a un nuevo periodo de crecimiento más bajo, tras el boom experimentado en los últimos años, indicaron hoy altos cargos del FMI, el Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

“Los vientos de la economía han cambiado, algunos nos ayudaron mucho, pero ahora ya no soplan a nuestro favor”, aseguró el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, durante la conferencia anual del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), en Washington.

En la mesa redonda titulada “Las perspectivas para América Latina: ¿ha concluido la fiesta?”, funcionarios de las grandes instituciones financieras y de desarrollo internacional analizaron los desafíos del panorama económico.

El director del Hemisferio Occidental del FMI, Alejandro Werner, adelantó que las previsiones de la institución de octubre reflejarán una revisión a la baja de la economía latinoamericana por debajo del 2 % pronosticado en julio.

Gran parte de esta ralentización viene dada por la debilidad mostrada por las economías sudamericanas, con Brasil y Argentina a la cabeza; mientras que México y Centroamérica, gracias a su mayor vinculación con Estados Unidos, aprovecharán mejor el repunte de la primera economía mundial, agregó el funcionario del FMI.

“Las exportaciones han descendido, el ciclo de gran demanda de materias primas ha finalizado. La nueva tendencia será un crecimiento más lento, ya no se registrarán tasas del 4 % o el 5 % como hemos visto en los años recientes”, afirmó Werner.

En este sentido, apuntó que China, el gran comprador de productos latinoamericanos, se encuentra inmerso en un proceso de reequilibrio económico en el que se prevé que el crecimiento sea de alrededor del 7,5 %, algo por debajo de las espectaculares cifras de años atrás.

Moreno insistió en que el crecimiento del 2 % no es “suficiente” para la región y que el gran reto es ver los efectos de esta ralentización en uno de los grandes logros latinoamericanos de la última década, como es la incorporación de gran cantidad de ciudadanos a la clase media.

Por ello, subrayó el presidente del BID, las autoridades deberán trabajar en aumentar “la productividad”, algo indispensable si se quiere conseguir un crecimiento sostenible.

Inflación, corrupción y trabas cambiarias

  • La inflación, la corrupción, las barreras cambiarias y la dificultad en el acceso al financiamiento son los principales obstáculos que encuentran los empresarios para desarrollar negocios en la Argentina, de acuerdo con el ranking de competitividad que publicó el Foro Económico Mundial (WEF).

En ese escalafón, la Argentina fue calificada en el puesto 104 sobre un total de 144 países evaluados para hacer negocios en todo el mundo.

En el aspecto institucional, el WEF pone de relieve que “el desvío de fondos públicos, el despilfarro del gasto del gobierno, la confianza pública en los políticos, el favoritismo en las decisiones de gobierno y los pagos irregulares y las coimas” encabezan las principales de preocupaciones de los hombres de negocios.

En cuanto al ambiente macroeconómico, la inflación se constituye en la principal materia pendiente, mientras que en referencia a la infraestructura, la escasa oferta energética lidera las demandas empresarias.

En el capítulo educativo, los empresarios colocaron a la Argentina en el puesto 113 de 144 por la calidad del sistema educativo y la enseñanza de ciencias y matemáticas.

La Argentina ocupa el último puesto por el efecto que tienen los impuestos sobre los incentivos de inversión y los dos últimos puestos debido a las dificultades en “los trámites aduaneros, las barreras comerciales y las trabas para la inversión extranjera directa”.

También ocupa el último puesto en el efecto que provocan los impuestos sobre el mercado laboral, así como la flexibilidad en la determinación de los salarios y los pagos por productividad.

Para el WEF, el acceso al financiamiento, la transferencia de tecnología y las trabas a la inversión extranjera directa representan otro obstáculo importante.