Colastiné Norte
Colastiné Norte
Nuevo homicidio en los bañados y feroz tiroteo
Después del crimen hubo un feroz tiroteo, primero entre bandas y luego con la policía. Foto: Mauricio Garín
De la Redacción de El Litoral
A la muerte de Luis Alberto Pintos, ocurrida ayer antes del mediodía, se le sumó un nuevo crimen, que esta vez le costó la vida a Abel Cejas, un joven de 17 años que vivía en la zona de bañados de Colastiné Norte.
El deceso del menor de edad se produjo a primera hora de la madrugada, cuando tras recibir varios impactos de arma de fuego debió ser trasladado de urgencia en un auto particular y escoltado por un patrullero, en dirección al hospital Cullen.
Por desgracia el chico llegó muerto al centro de salud, donde le detectaron “múltiples heridas de arma de fuego”, según informó hoy la oficina de prensa de la Unidad Regional Uno.
Habían pasado apenas algunos minutos de la medianoche del viernes cuando la central de emergencias 911 comenzó a recibir pedidos de auxilio para el distrito La Costa. Nuevamente los uniformados se internaron por calle René Favaloro, al oeste de la Ruta Provincial Nº 1, a la altura del kilómetro 0,5.
Dos prófugos
Doce horas antes, en el mismo lugar pero a unos metros del terraplén defensivo, falleció de un escopetazo Luis Alberto Pintos, un vecino del lugar de 47 años. Por su muerte eran buscadas dos personas cuyas identidades no fueron suministradas a la prensa.
Aunque no se pudo establecer vínculo entre un crimen y otro, lo cierto es que los bañados de Colastiné vienen siendo un foco de conflicto por el abuso de armas de fuego desde el año pasado.
Además de la muerte de Cejas, una mujer de 51 años, también de apellido Pintos, salvó su vida milagrosamente cuando una bala le rozó la cabeza en medio de las estampidas. Aunque fuera de peligro, la señora fue trasladada al Cullen para hacerle las curaciones correspondientes.
Dos detenidos
Horas más tarde, cuando el fuego cruzado parecía estar controlado, agentes del Grupo de Operaciones Especiales y Comando Radioléctrico de la Costa detuvieron a un muchacho de 27 años que se escapaba del barrio con una escopeta calibre 16 con cartuchos bajo el brazo. Fue aproximadamente a las 4 de la mañana que lo trasladaron desde la Ruta 1 km 0,5 a la sede policial.
En el mismo procedimiento de chequeo fue alcanzado un menor de 14 años de edad que mientras se desarrollaba el operativo comenzó arrojar piedras al móvil de la policía.