llegan cartas

Escrito en homenaje al padre Axel

MIRTA SATTLER

DNI 14.529.877

No me cierra tapar el sol con las manos

A ti, padre Axel (hombre de Paz):

No me cierra dejar en orfandad de contención a cientos de sufrientes que el agua, la pobreza inmunda y las balas les aniquilan sus esperanzas.

No me cierra.

La decadencia moral, la subversión de valores, la amnesia voluntaria, la falta de compromiso y la ausencia de un mea culpa que nos trajo este lugar.

No me cierra.

Privar de la caricia oportuna, de la mirada sincera, la ternura que es cobijo, como espada la palabra y como ejemplo la acción, sin límites y sin barreras.

No me cierra.

En un mundo decadente y corrompido, donde sus instituciones se retuercen por el sino de enfermedades escondidas bajo rojas alfombras y faustos sillones.

No me cierra.

No me cierra callar la voz de los que en grandes pórticos hoy sin rejas claman por lo último que les queda porque ya han perdido todo: ¡Justicia!

No me cierra.

No me cierra la tristeza de tu gente más humilde, la de tu gente más culta o favorecida en la vida, la de tu noble legión de asistentes de la materia y del alma.

No me cierra.

Más, una rosa no hace la primavera, tampoco el verano una golondrina, pero algunos desde adentro y muchos más desde afuera deberían espejarse en tus obras.

No me cierra: tapar el sol con las manos.

Porque nos enseñaste a descubrir en nuestras obras la medida de nuestra Fe.

Como instrumento de Dios en la tarea creadora, no me cierra que te lleven de una ciudad que sangra en las llagas de Cristo.

No me cierra.