“Santa Fe en paz”

Nuevos métodos de intervención policial en barrios complicados

• Se aplicaron desde el 19 de marzo en cuatro circunscripciones de Rosario. Con información del terreno y de los grupos violentos, 320 policías patrullan las zonas de riesgo. Desde que comenzaron, no se produjeron homicidios. “El objetivo es pacificar”, remarcaron.

Germán de los Santos

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Corresponsalía Rosario

En una pantalla hay un mapa donde están destacadas las bandas que operan, y un sombreado amarillento que cambia a rojo remarca los hechos delictivos: homicidios, robos, usurpaciones que se produjeron en el lugar. Son manchas, algunas pequeñas y otras más grandes que muestran qué tipo de delitos y dónde deben centrar su trabajo los efectivos en el terreno.

El crecimiento de los hechos violentos y los homicidios obligó a pensar otro tipo de esquema para abordar el problema. La figura del joven en moto disparando y huyendo se expandió, se ramificó por los barrios y se transformó en un método para matar, para saldar deudas o para terminar con una pelea por causas irrelevantes.

Los 320 policías que forman parte de los denominados operativos de “protección social” cuyo rótulo es “Santa Fe en paz”, que desde el 19 de marzo pasado se llevan adelante en cuatro barrios de Rosario, llegan al lugar con información más detallada para focalizar la mirada en determinados lugares por ejemplo, donde se sospecha que hay venta de estupefacientes y también se da aviso a las fuerzas federales.

Cambios sustanciales

Esta nueva metodología de trabajo diseñada desde la Central de Análisis de Procesos (Cenap) plantea cambios sustanciales en la inteligencia criminal a la hora de planificar la persecución del delito. El objetivo central es pacificar estas zonas. Apuntan a una planificación del trabajo más ajustada a las particularidades del lugar. Ya no es el despliegue policial al boleo. “No son operativos tradicionales de saturación policial ni tampoco estrictamente represivos”, aclaran y agregan: “Están diagramados en base al análisis de la información de distintas fuentes oficiales y de los denominados mapas de calor que suministra el Sistema de Emergencias del 911”.

La Cenap fue conformada a partir de la llegada de José Spadaro a la Secretaría de Análisis y Articulación de Procesos Interministeriales. El resultado más notorio, que destacan en la Cenap, es que desde que comenzaron a realizarse estos operativos no hubo homicidios en La Tablada, Empalme Graneros, Ludueña y villa Banana, denominados zonas rojas. También señalan que disminuyeron las denuncias por delitos contra la propiedad. En los operativos en estos cuatro barrios se detuvieron 87 personas, diez de ellas menores de edad por tentativa de robo. Y se secuestraron seis revólveres, once armas de fuego, tumberas y municiones de distinto calibre. Los controles vehiculares dieron como resultado la remisión de 119 motos y cinco autos al corralón municipal.

Caso emblemático

Por ejemplo, en barrio La Tablada, que fue el primer operativo que se puso en marcha, se realizó un estudio del lugar, en base a indicadores de distinto tipo. En los cuatro cuadrantes en que se dividió el plan viven 54.048 personas, que es un tercio del distrito sur. Hay una densidad poblacional de 9.500 habitantes por kilómetro cuadrado, que están asentadas en 261 manzanas. En esa zona se cometieron 14 homicidios en los últimos seis meses, con la particularidad de que ocho fueron con armas 9 milímetros. Allí operan bandas que desde 2011 se enfrentan por distintas cuestiones. Dos homicidios, el de Claudio Colli en septiembre de 2011 y el de Leandro Ojeda en octubre de 2012 activaron un espiral de violencia en la zona de la Tablada. Las dos bandas, la de Ameghino cuyo líder fue Milton Damario, preso por el crimen de Claudio Pájaro Cantero, de los Monos y la de Centeno son las que se enfrentan. Pero en pleno conflicto de intereses también conviven otros grupos como los del Puente, Las Palomas y Alcaraz. Un dato llamativo es que a partir de la llegada de la Gendarmería, en abril de 2014, se sospecha que algunos integrantes de estas bandas comenzaron a utilizar armas con silenciadores.

El operativo incluyó a 320 efectivos de la policia en turnos de 12 horas, que patrullaron a pie de a dos o de a tres con chalecos antibala, con apoyo de 16 móviles y el helicóptero de la Brigada Aérea. El plan está coordinado entre los analistas del Cenap, que están las 24 horas, el Sies, el Ministerio Público de la Acusación y la Municipalidad.