Con prisión preventiva

Acusan de jefe de asociación ilícita a detenido por secuestros virtuales

Se trata de un hombre de 45 años oriundo de Buenos Aires, al que detuvieron la semana pasada cuando intentaba cobrar un falso secuestro. Por otra parte, recuperó la libertad el policía acusado por otro hecho al acreditarse su inocencia.

De la Redacción de El Litoral

[email protected]

Cuatro hechos se le atribuyeron ayer a Roque Daniel López, un bonaerense de 45 años detenido desde la semana pasada por su activa participación como miembro de un banda dedicada al cobro de secuestros virtuales en la capital provincial. Como resultado, el juez penal Sergio Carraro le impuso prisión preventiva; mientras que el fiscal Roberto Apullán trabaja para tratar de establecer las identidades de otros dos cómplices prófugos.

Este lunes, el representante del Ministerio Público de la Acusación le imputó a López los delitos de “extorsión” en grado de autor y de “asociación ilícita” en calidad de “jefe de banda”, dado que hasta el momento es el único detenido.

La defensa del reo estuvo a cargo del abogado particular Ignacio Alfonso Garrone, quien postuló al tribunal la aplicación de la figura penal de “estafa”, la cual fue rechazada por el magistrado.

“Se discutió si era extorsión o estafa”, indicaron fuentes del caso. “La defensa planteó que era estafa, pero el fiscal sostuvo que hubo extorsión y primó la segunda opción”, señalaron.

Última aventura

López, quien sería del partido de Lomas de Zamora, Buenos Aires, se presentó ante el juez como “vendedor ambulante” y a pesar de no acreditarse antecedentes en su contra, no pudo dar cuenta de qué hacía con un auto repleto de dinero, alhajas y demás objetos de valor que nada tenían que ver con su supuesta ocupación.

Según pudo determinar el MPA, López se encontraba alojado en el hotel Conquistador bajo la identidad de “Ruiz”, acompañado por otras dos personas, las cuales pudieron darse a la fuga al momento de su captura. Al parecer la banda se registró en el hotel el 29 de marzo y desde entonces a la fecha de su captura -ocurrida el jueves pasado- se produjeron numerosos casos de secuestros virtuales, varios de los cuales lograron consumarse.

Si bien restan tareas investigativas, a López se le atribuyeron cuatro hechos, el último de los cuales dio lugar a su aprehensión el 9 de abril pasado. Esa mañana, la banda había dado un golpe en una casa de barrio Constituyentes, precisamente en Suipacha al 3100, donde la víctima entregó dinero y joyas en horas tempranas de la madrugada.

Pero no conformes con ello los falsos secuestradores, que fingían tener en su poder a un miembro de la familia, le pidieron a la mujer que aguardara la hora de apertura de bancos para buscar otra suma complementaria. Una vez en el banco, el cajero notó que algo anormal ocurría con la clienta y decidió informar al gerente, que rápidamente comunicó lo acontecido a la policía.

Entrega controlada

Lo cierto es que se orquestó una entrega controlada y la mujer salió del banco con una bolsa en la que aparentaba llevar el dinero prometido. Se subió a un taxi y se dirigió hacia el punto de encuentro para dejar la bolsa, volvió a subir al coche de alquiler y partió.

Cuando el hombre ahora detenido se acercó a recoger el dinero la policía se abalanzó sobre él dejándolo inmóvil, claro que sin advertir que sus laderos escapaban en un auto Volkswagen Golf radicado en Corriente.

Al momento de la requisa se le secuestró una llave de otro auto, un VW Gol Trend, que luego se supo que estaba estacionado en la cochera del hotel en el que se alojaban. Una vez allí la policía allanó la habitación y abrió el auto donde guardaban un jugoso botín en dinero en efectivo y joyas.

Gracias a lo secuestrado se le pudo ampliar la imputación por otros hechos ocurridos este mes en distintos puntos de la ciudad, dado que en el auto encontraron joyas fácilmente reconocibles por las otras víctimas. Por su parte, López se abstuvo de declarar y su defensa evaluaba apelar el dictado de prisión preventiva.

Policía liberado

• Tras la reciente detención in fraganti de un miembro de la banda de secuestradores virtuales y el hallazgo de elementos de prueba fundamentales, los investigadores determinaron la inocencia de un policía de 31 años, detenido el lunes de la semana pasada, sospechado de participar de un caso de extorsión a una vecina de barrio Sargento Cabral.

Se trata de Julio César Acosta, numerario de la 7ma. Zona de Inspección, en Santo Tomé, en disponibilidad desde el lunes 6 de abril tras su detención en Aristóbulo del Valle y Ayacucho, a bordo de un Chevrolet Vectra negro con vidrios polarizados, en el que transportaba $ 80.000.

La semana pasada se realizó la audiencia imputativa y el fiscal Daniel Filipi adelantó que pediría la prisión preventiva. No obstante, el viernes en la audiencia en cuestión, expresó ante el juez Sergio Carraro que el MPA no iba a pedir la prisión preventiva. “Se le dio la libertad porque a los pocos días de la detención se apresó a otra persona (López) en un secuestro virtual”, expresó su abogado particular, el Dr. Claudio Torres del Sel. “Lo persiguieron a la salida del banco y se encontraron las alhajas reconocidas por la víctima del hecho que le imputaban a Acosta”, completó el letrado.

Por otra parte, el abogado penalista denunció que “es grave que se lo haya detenido en un Chevrolet cuando la propia víctima denunció que iban en un Volkswagen Gol”, tal como los vehículos utilizados por los verdaderos secuestradores.

“Vamos a pedir el archivo de la causa” y “estamos solicitando la devolución del dinero”, agregó Torres del Sel, ya que “la mujer que fue víctima dejó 20 mil pesos y nuestro cliente tenía 80 mil que eran de la venda de un auto”, según pudieron acreditar en los últimos días.