Un problema para los bonaerenses, con repercusión nacional

Santa Fe, lejos de los absurdos límites a la distribución de boletas

El mínimo en la provincia es de 50 boletas por partido y se permiten hasta 300. En la de Buenos Aires, una polémica resolución pretendía un máximo de 25. Fue revocada por la Cámara Electoral Nacional.

De la redacción de El Litoral

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La Secretaría Electoral Nacional ha dispuesto para la provincia de Santa Fe que -por cada mesa- los partidos políticos puedan entregar hasta 300 boletas como máximo y como mínimo 50. En cambio, en Buenos Aires, la provincia con más peso en los comicios, una cuestionada decisión de la Justicia había puesto un polémico tope de 25, que -tras duras críticas- en cuestión de días fue revocada.

El Litoral consultó al secretario electoral Emilio Rosatti, quien explicó que en Santa Fe el número de fuerzas políticas que intervienen en las Paso se ha duplicado respecto del comicio anterior, y que se mantiene el criterio más amplio posible para facilitar la distribución de las boletas.

Señaló que -tal como ha ocurrido en otros procesos electorales- cada una de las mesas a las que concurrirán los santafesinos a votar (en 5 categorías nacionales) tendrán -como mínimo- en el cuarto obscuro, a las 8 horas del domingo 9 de agosto, 50 boletas por partido y hasta 300. Todo dependerá de la propia fuerza electoral, que además podrá asistir con sus fiscales generales a más de una mesa electoral.

En Santa Fe, habrá 21 opciones (17 se inscribieron en la sede de Urquiza 3046 de nuestra ciudad y otras cuatro provienen de otros distritos electorales).

Para los partidos políticos, sobre todo los más chicos, con menos recursos y fiscales, es clave que sus boletas estén en el cuarto obscuro desde las primeras horas del comicio. Y que su número inicial les permita tener un esquema para reponerlas, a lo largo del día, con fiscales generales.

Menos boletas distribuidas por el Correo significa más problemas para los partidos chicos. Esas fuerzas políticas en Santa Fe no tendrán las dificultades que les presentará la provincia de Buenos Aires.

Hasta 50 en Buenos Aires

El mínimo santafesino es igual al máximo bonaerense. Ésa es la síntesis de las realidades que viven las provincias de Santa Fe y de Buenos Aires, respecto de la distribución de boletas de los partidos políticos con recursos del Estado. Aquí el “piso” es de 50 boletas (y se permiten hasta 300 por mesa y por partido); en la elección bonaerense aquella cifra es el “techo”.

Si bien la polémica resolución judicial del juez federal de La Plata con competencia electoral, Laureano Durán, fue revocada por la Cámara Nacional Electoral y el tribunal dejó sin efecto el máximo de 25 boletas, éste se fijó luego en sólo 50.

Los camaristas aceptaron un reclamo de la alianza Cambiemos, que integran el PRO y el radicalismo, para que se dejara sin efecto el punto sexto de la resolución dictada por el juez Durán el pasado 17 de julio. (Ver aparte).

Si bien la provisión de boletas de sufragio y su eventual reposición durante los comicios es una responsabilidad de los partidos políticos intervinientes, éstas “no son un instrumento al servicio del partido, sino la posibilidad física para que se exprese el ciudadano”.

La Cámara exhortó al Poder Ejecutivo Nacional para que “provea los medios necesarios de orden logístico y material a fin de que el Servicio Electoral del Correo realice la distribución de las boletas suministradas por las agrupaciones políticas, de acuerdo con el cronograma establecido por el juez de primera instancia”.

Un juez subrogante

Laureano Durán, el juez federal con competencia electoral de la ciudad de La Plata, es uno de los magistrados cuestionados por la oposición. Y su pliego no pasó por el Congreso de la Nación.

“No soy militante político”, se defendió Durán esta mañana, en radio Vorterix, y aseguró: “Tomé bien la decisión de la Cámara (que dejó sin efecto su polémica resolución): puso luz sobre un tema complicado. Nosotros hicimos lo que pudimos”, expresó.

“Yo sabía -confesó- que quizás iba a tomar una decisión poco feliz para la mayoría de los partidos, pero era lo que podía hacer”, se defendió Durán esta mañana, tras las críticas de la oposición y -en las últimas horas- del oficialismo. “Acá, no hay intereses políticos, hay que ajustarse a la realidad”, dijo.

Sobre su relación personal con el ministro de Justicia, Julio Alak, expresó: “Mi cercanía con el gobierno es infundada. La relación con Alak, a la que todo el mundo se refiere, era una relación laboral entre mi papá y él”. Durán es hijo del juez federal Alberto Durán, un ex funcionario de Alak.

En diciembre de 2014, hubo fuertes cruces entre el oficialismo y la oposición, porque el año pasado el Consejo de la Magistratura (con mayoría del oficialismo kirchnerista) lo nombró como magistrado subrogante del Juzgado Federal 1 de la capital provincial bonaerense.

Durán era secretario de la Cámara Federal de la Plata y fue elegido con los siete votos del oficialismo en el Consejo y los sufragios en contra de los seis miembros de la oposición, quienes denunciaron que se violó el proceso de designación.

“Los partidos políticos tienen un gran temor de parcialidad. De este juez, sale el gobernador de la provincia de Buenos Aires”, criticó por entonces Gustavo Valdés, diputado nacional de la UCR.

Por su parte, el senador radical Ángel Rozas había apuntado que Durán “fue elegido por la mayoría oficialista y no reúne los requisitos para ser juez. Estamos ante un hecho de gravedad institucional”, advirtió.

El dato

El 37% del padrón

Las polémicas sobre las Paso bonaerense van mucho más allá de los límites de la provincia de Buenos Aires. Lo que ocurra en esa elección tendrá una repercusión nacional, ya que allí vota el 37,01% de los electores de todo el país. Su padrón es de 11,8 millones.