Acuerdo como en México o ajuste como en Brasil

Toda la responsabilidad a los candidatos

El licenciado en Economía Jorge Vasconcelos analiza dos posibles caminos: el acuerdo azteca o la crisis de Dilma. El próximo presidente argentino no dispondría de más reservas que las necesarias para un mes de importaciones.

7-IMG_3860.jpg
 
 

De la redacción de El Litoral

[email protected]

“...la transición sería más tranquila si los desequilibrios de orden fiscal y externo no tuvieran la magnitud actual, mucho mayor a la de doce meses atrás”. Jorge Vasconcelos -desde la publicación del Ieral/Fundación Mediterránea- ensaya desde su óptica de economista las alternativas del presidente argentino por venir.

“Justamente, la percepción por parte de los candidatos de problemas de compleja reversión hace que, muchos de ellos, eludan precisiones para evitar ser emparentados con un eventual ajuste después del 10 de diciembre. Y esto lleva a un círculo vicioso, porque esa nebulosa alimenta especulaciones e incertidumbre. Las elecciones primarias pueden ordenar el escenario político pero, cada uno de los resultados posibles, conlleva nuevos desafíos”, dice el analista.

“Por un lado -señala- que el poder del gobierno saliente comenzaría rápidamente a eclipsarse y, por el otro, aumentaría proporcionalmente la responsabilidad de los principales candidatos: de ellos dependerá que la transición argentina se parezca al desordenado ajuste brasileño, que afloró luego de una campaña electoral en la que el gobierno de Dilma ignoró los problemas, o que el país se encamine a un escenario mucho más fructífero, como el que comenzó a recorrer México a fin de 2012, cuando un pacto entre los tres principales partidos posibilitó una decena de reformas estructurales, que alcanzaron la educación, la energía y la responsabilidad fiscal, entre otras”.

Advierte que “para evitar un ajuste del tipo que hoy está experimentando Brasil, la economía argentina necesita de múltiples reformas que permitan que, al mismo tiempo que se ordenan algunas variables (la fiscal y la cambiaria, principalmente), aparezcan vectores compensadores que permitan comenzar a remontar la cuesta en términos de inversiones y nivel de actividad”.

Concluye que “si el resultado de las Paso es el que anticipan algunas encuestas, que insinúan que incluso será necesario un balotaje en noviembre, entonces la experiencia del ‘Pacto por México’ marcaría una agenda posible para los principales candidatos, ya que de no avanzar en esa dirección correrían el riesgo de replicar las tribulaciones de Dilma en su segundo mandato”.

Sugerencias

Para Vasconcelos, las “reformas deberían incluir una eliminación de todas las trabas al comercio exterior y un replanteo del Mercosur, la introducción de más competencia en todos los mercados y mejores regulaciones en las actividades como las que prestan servicios públicos, el recorte en los subsidios económicos, el reordenamiento de los subsidios sociales para tender puentes con el mercado de trabajo en el caso de los adultos y con la educación para los más jóvenes”, entre otras.

Asegura que “mientras más reformas profundas puedan hacerse, menos ajuste deberá sufrir la economía, aún en un contexto de reducción significativa del déficit fiscal, que implica un recorte del gasto en términos reales.

“Pero ese escenario requiere de un sólido soporte político, de acuerdos partidarios y legislativos, tal como lo mostró la experiencia de México desde fin de 2012, con un pacto que habilitó reformas impensadas hasta poco tiempo antes, pero imprescindibles para que la economía recupere dinamismo, inversiones y competitividad.

" Dado el deterioro de la situación fiscal y externa, mientras menos podamos acercarnos a la experiencia mexicana, más difícil será poder evitar un ajuste “a la brasileña”.

Joprge Vasconcelos Licenciado en Economía