En el centro norte santafesino

• Se cierra la siembra de trigo a nivel nacional con caídas drásticas y poca incorporación de tecnología. Se estima una caída del 22 % en el área girasolera santafesina.

Para atrás. La escasa rentabilidad del cultivo explica el retroceso del área a sembrar con girasol en el centro norte santafesino. Foto:Archivo

Campolitoral

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En el centro norte provincial, los porcentajes de humedad se mantuvieron elevados durante la semana, a la vez que los valores de mercado del grano comercial no alientan a acelerar un proceso de cosecha que continuó siendo lento, con una variación intersemanal de 8 puntos, obteniéndose hasta la fecha en toda el área un progreso total del 80 %, lo que representa aproximadamente unas 84.000 has. El informe semanal SEA refleja que los cultivares reflejaron buen estado y se mantienen erguidos sin riesgo de vuelco o caída. Se estima para la campaña 2014/2015 un rendimiento promedio de 72 qq/ha.

La superficie sembrada con trigo en el centro-norte provincial fue de unas 199.850 has. aproximadamente, lo que representa una disminución del 35,5% respecto a la campaña 2014/2015. Los cultivares se desarrollan sin inconvenientes. La refertilización es muy baja, solo en pocos lotes que no llegan al 5 % hubo fertilización con nitrógeno porque no se realizó al comienzo de la siembra. En diversos lotes se observó presencia de pulgones pero en pequeños sectores, sin incidencia y/o perjuicios para los mismos.

A días del inicio de una nueva campaña para el girasol, las primeras estimaciones sobre la intención de siembra expresan una disminución del orden del 22 % con respecto a la intención de siembra de la campaña pasada, representando aproximadamente unas 22.000 has. menos. Estas cifras indican unas 78.000 has. de intención de siembra para esta campaña, siendo la rentabilidad que presenta el cultivo una de las claves de mayor peso para explicar dicha disminución.

En la zona núcleo

Los aportes de humedad del Atlántico se manifestaron en la región núcleo con picos en el noroeste bonaerense que superaron los 120 mm. en una semana. Según el informe GEA de la Bolsa rosarina, las áreas bajas comienzan a anegarse y vuelven las dificultades en el tránsito de caminos rurales. Se agravaría esta situación ante pronósticos que anuncian inestabilidad y fuertes tormentas durante los próximos seis días. Si bien hay algunas áreas anegadas, el cultivo de trigo presenta un buen desarrollo y una adecuada sanidad en general. Siguen las pocas ventas de insumos y se enciende una alerta porque, cerca de las fechas tempranas de siembra maíz, caen aún más los lotes planificados con el cereal. La trilla de maíz de diciembre 2014 está finalizando con alta variabilidad de rindes y arrojando una media de 79 qq/ha.

Volvieron los problemas para transitar los caminos, sobre todo en aquellas zonas que todavía contaban con agua sin escurrir de los anteriores eventos pluviométricos. Se pronostica que la región estará bajo la influencia de una masa de aire cálido y húmedo, por lo que la inestabilidad seguirá presente hasta el próximo miércoles. Para el nuevo ciclo de granos gruesos, se teme que la concreción del fenómeno de “El Niño‘ repita los severos problemas hídricos del año pasado. Aun así, si el comienzo del fenómeno coincide con el periodo de llenado de granos de los cultivos de la fina, la calidad se vería severamente afectada.

En los relieves bajos sembrados con trigos más tardíos, comienzan a aparecer manchones por acumulamiento de humedad y en consecuencia podredumbre de plántulas.

Panorama Agrícola Nacional

La disponibilidad de agua útil en los perfiles de suelos fue normal para el desarrollo de los cultivos hasta la fecha. Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, esta última semana las temperaturas fueron superiores en promedio a la semana anterior, con máximas de hasta 32,6 ºC y porcentajes de humedad ambiente medios a altos, y la vuelta de las precipitaciones permitió que el agua útil en los horizontes superficiales esté disponible para lo implantado.

A nivel nacional se da por culminada la siembra nacional de trigo, alcanzando una superficie de 3.700.000 hectáreas, cifra que permite calcular una caída interanual del área implantada próxima al -16 % (Siembra 2014/15: 4,4 MHa). Según resultados del relevamiento de los últimos siete días, un 50 % del área nacional transita etapas de macollaje, mientras que poco más del 43 % de la superficie remanente aún se encuentra diferenciando hojas. En paralelo, una menor proporción de lotes transita etapas críticas de encañazón (4,6 %) y espigazón (0,5 %). La mayor parte de esta última superficie se ubica en las provincias del norte, comprendidas por nuestras regiones NOA y NEA, en donde el déficit hídrico está diezmando el potencial de rinde del cultivo.

Sobre el centro del país, en las provincias de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos gran parte del área implantada se encuentra macollando o aun diferenciando hojas. En Santa Fe la oferta hídrica presenta un claro gradiente negativo hacia el norte, en donde se ubican los pocos cuadros que se encuentran transitando etapas críticas de encañazón. Hacia el centro y sur de la provincia, la oferta hídrica mejora, incluso relevándose excesos en sectores puntuales. Por ahora no se registraron inconvenientes sanitarios de importancia, pero de continuar esta situación de excesiva humedad podrían comenzar a relevarse enfermedades durante las etapas críticas del cultivo (encañazón, espigazón y floración).

Continúan las labores de cobertura con cebada al sur de área agrícola nacional. Con buena humedad superficial sobre los suelos del Sudeste de Buenos Aires, las labores de siembra mantienen el buen ritmo. De esta forma se calculó un avance intersemanal de 12,5 puntos porcentuales, elevando el área implantada al 96,5 % de las 1.050.000 hectáreas proyectadas para el presente ciclo. En comparación con la campaña previa, llevamos un adelanto de 8,6 puntos porcentuales. La superficie implantada a la fecha asciende a las 1.013.000 hectáreas.

 

Se viene el agua

• Al comienzo de la perspectiva predominarán los vientos del norte, provocando temperaturas por encima de lo normal en la mayor parte del área agrícola, e incrementando la nubosidad y la humedad atmosférica. Paralelamente, se producirán precipitaciones de frente caliente, es decir sin que baje la temperatura, sobre gran parte del este del área agrícola, las cuales serán acompañadas por focos de tormentas severas, mientras que la mayor parte del centro de su extensión recibirá valores escasos. Por su parte, las zonas cordilleranas observarán tormentas en gran parte de su área. Hacia mediados de la perspectiva, arribará un frente de Pampero, que producirá precipitaciones y tormentas adicionales, dando como resultado un prolongado lapso nublado, húmedo y lluvioso, que se extenderá a lo largo de la mayor parte de la primera etapa de la perspectiva. Detrás del frente de Pampero arribarán los vientos del sur, provocando un marcado descenso térmico, con riesgo de heladas en todo el oeste y el sudeste del área agrícola, mientras que el nordeste será menos afectado por el proceso.