Crecen las tensiones étnicas

Las bombas ensombrecen el Día Nacional en China

Agencia DPA

El Gobierno chino celebró hoy con llamadas a la unidad étnica el Día Nacional y el 60 aniversario de la fundación de la conflictiva región autónoma de Xinjiang, festividades ensombrecidas por la cadena de explosiones provocadas por paquetes bomba que han sacudido el sur del país causando siete muertos.

Una nueva deflagración sacudió hoy un edificio público de la localidad de Liucheng, en la región meridional de Guangxi, un día después de que otras 17 explosiones afectaran a la sede del gobierno comarcal, la estación de autobuses, un hospital, centros comerciales y una prisión, entre otros objetivos.

Al menos otra persona resultó herida en la explosión de hoy, lo que eleva a 52 las víctimas que tuvieron que ser atendidas en hospitales por el ataque, uno de los más graves de los últimos años en cuanto a número de explosiones y áreas afectadas.

La policía informó anoche de la detención de un presunto autor de los ataques, un vecino de 33 años apellidado Wei, y medios locales indicaron que se interceptaron hasta 60 paquetes sospechosos, mientras quedó suspendido el servicio de correo en la zona y se pidió a los vecinos que extremen las precauciones.

La nueva explosión se produjo cuando Wei se encontraba ya bajo custodia policial, tras lo que las autoridades señalaron que el sospechoso podría haber contado con la ayuda de cómplices.

Por el momento se descarta la posibilidad de que se trate de un ataque terrorista, pese a lo sensible de la fecha de hoy, en la que China conmemora el 66 aniversario del régimen comunista y 60 años de la creación de la región autónoma de Xinjiang, donde hay un conflicto abierto entre el Gobierno y núcleos separatistas.

Este 60 aniversario se recordó hoy en la capital de Xinjiang, Urumqi, con la tradicional ceremonia de izado de la bandera en la que soldados, escolares y líderes estatales y regionales entonaron el himno nacional.

A continuación, los líderes comunistas se dieron cita en la sede de la asamblea regional, donde la viceprimera ministra china Liu Yandong y el presidente de la Conferencia Consultiva Política (equivalente a una Cámara Alta occidental), Yu Zhengsheng, encabezaron los homenajes.

En Pekín, el presidente Xi Jinping, recién llegado de su visita oficial a EEUU, también quiso dar imagen de unidad de todas las etnias del país con una recepción a representantes de minorías como la uigur (una de las principales de Xinjiang), la tibetana o la mongol, en la víspera del Día Nacional.

“Ningún grupo étnico debe ser olvidado en el proceso de construir una sociedad medianamente acomodada”, señaló Xi en esa recepción, citado hoy por la agencia oficial Xinhua.

Yu Zhengsheng, ‘número cuatro‘ en la jerarquía china, ha hecho en la última semana una gira por diversas zonas de Xinjiang para intentar aportar una imagen de estabilidad en la región.

El miércoles, Yu se reunió con oficiales del Ejército chino en la región y subrayó que la lucha contra el separatismo ‘debe ser considerada como una prolongada guerra‘ en la que los militares deben mejorar la comunicación con las distintas etnias para aumentar la estabilidad.

La región autónoma de Xinjiang fue fundada el 1 de octubre de 1955 tras décadas de inestabilidad en las que uigures y otras etnias de esa región llegaron incluso a proclamar su independencia, en los años 30 y 40, en ocasiones con apoyo de la Unión Soviética y bajo el nombre de “República del Turquestán Oriental”.

En los últimos años la región vivió crecientes tensiones étnicas, las peores en julio de 2009, cuando más de 200 personas, en su mayoría chinos de la mayoría étnica han, fallecieron en Urumqi por ataques de arma blanca.

Otros incidentes violentos, desde tiroteos a ataques con explosivos, causaron cientos de muertos en el último lustro, lo que Pekín atribuye a la influencia de redes yihadistas internacionales en Xinjiang. Por el contrario, grupos uigures en el exilio aseguran que se trata de actos desesperados de musulmanes que sufren represión cultural y religiosa, la misma que ha llevado al intelectual de esa etnia Ilham Tohti a ser condenado en 2014 a cadena perpetua por sus críticas al Gobierno.

Hechos como el uso del velo completo, que según Pekín está aumentando en importantes núcleos musulmanes como Kashgar, Aksu o Hotan, enfrentan al régimen comunista con grupos de defensa de los uigures.

La violencia en Xinjiang en ocasiones se ha extendido a otras zonas del país, pero en principio Pekín parece descartar que este conflicto esté detrás de la cadena de explosiones con paquetes bomba ocurridos ayer y hoy en el sur de China.