Notable e impensado cierre de año de Colón, que deja a todos con la boca abierta...

De villanos a casi héroes 54.400

Los sabaleros volvieron a marcar diferencias a su favor sobre Belgrano, jugaron bien y al final se quedaron injustamente sin copa. El equipo pasó de la absoluta mediocridad a un brillo final sorprendente.

De villanos a casi héroes 54.400

El grito del mejor. Pablo Ledesma jugó un gran partido y fue el autor del gol sabalero que enmudeció a la multitud en el Kempes. El ex Boca le dio mucha importancia al pase de Sperduti. En la foto, festeja con Llama.

Foto: Marcelo Fernández

 

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Córdoba)

Es tan cierto que Colón no mereció lo que le pasó con Belgrano y que en 180 minutos de juego jamás se notaron los 17 puntos de diferencia que hubo entre los dos en el torneo de 30, como que este “sprint” final notable hizo cambiar la imagen que había de este equipo, los conceptos que con sobradas razones se habían esgrimido en algún momento del año, la opinión sobre el técnico y también sobre varios jugadores. Es tan dolorosa la injusticia de haber sido eliminado por un equipo que nunca jugó mejor, como la saludable y elogiable impresión que terminaron dejando Franco y sus jugadores. Y esto último es lo que vale, porque nadie podrá suponer que Colón haya fracasado o que no se hayan cumplido los objetivos; todo lo contrario, esta imagen final modificó los temores, reclamos y cuestionamientos que se fueron haciendo, entre ellos el de una convocatoria a elecciones que, se entendió en su momento, fue muy tardía.

¿Qué cosas cambiaron en estos últimos seis partidos?: 1) la imagen del plantel (pasó de ser un equipo que sufría por su mediocridad y limitaciones, a pegar un salto de calidad tan mayúsculo como impensado); 2) la imagen del técnico (Franco estaba muy cuestionado, los reclamos caían pesadamente sobre sus espaldas, no se confiaba en él ni tampoco en su obstinación por jugar de una determinada manera que, al final, terminó inclinando la balanza netamente a su favor); 3) la imagen de algunos jugadores (se terminaron las “nanas”, las lesiones y todo cambió mágicamente; se ganó en confianza, en continuidad y en seguridad; y varios de ellos cambiaron silbidos e insultos por aplausos).

¿Qué pasó en todo ese trayecto?: 1) el mérito mayor es del técnico (por algo un jugador de tanta trayectoria y ganador de tantos títulos y copas como Ledesma le fue a dar la mano cuando marcó ayer el gol), que convenció a sus jugadores, les mostró un camino, se empecinó en “morir en la suya” y le dio un funcionamiento y un estilo digno del mejor de los elogios, cuando antes se hacía merecedor a la peor de las críticas. 2) Contribuyó muchísimo la llegada al plantel de Mauricio Sperduti, y a él se sumó que Franco le encontró el puesto a Guanca, se terminaron las incontables lesiones de Llama, la “pegó” poniendo a Poblete de “5”, a Garnier de “4” y armó una estructura —en su momento criticable— con jugadores de buen pie pero sin gente de área.

El corolario de todo esto se vio en los dos partidos con Belgrano. Dominador del juego pero sin fineza a la hora de definir, en el primer partido, volvió a asumir la iniciativa en el de ayer y mostró claras diferencias a su favor durante todo el primer tiempo. Asumió riesgos y jugó al fútbol aún cuando las condiciones del terreno eran complicadas porque había mucha agua y barro. Enorme lo de Ledesma, amo y señor en la mitad de la cancha, pero con una idea de juego muy clara y bien llevada a la práctica por casi todos: salida sin pelotazos desde atrás, mucho toque de primera, buena rotación y llegada masiva de los volantes. Se armaron dos tándem (Clemente-Llama por izquierda y Sperduti-Garnier por derecha) que obligaron a los dos volantes laterales de Belgrano (Rigoni y Velázquez) a pensar mucho en el retroceso y a no regalar tanto las espaldas. Colón sometió a Belgrano y si bien no terminó de crear una gran cantidad de situaciones claras (como las del primer partido), justificaba plenamente esa victoria parcial.

Pasaron tres cosas en el complemento que revivieron a Belgrano: 1) ellos apretaron un poco más y ya los volantes y delanteros de Colón no jugaron con soltura y espacios; 2) hubo menos intensidad, después del gran esfuerzo y las claras diferencias que se marcaron en el primer tiempo; 3) la expulsión de Clemente Rodríguez. Obolo ganó una pelota aérea en el área (la única vez) e hizo estallar a 50.000 almas que estaban casi en pena mirando cómo su equipo era desbordado por un rival que en todo momento supo jugar mejor y bien al fútbol.

Habrá que entender esta resurrección futbolística de Colón por aquélla frase que hizo inmortal Dante Panzeri: “el fútbol es la dinámica de lo impensado”. De otra manera, no se puede entender cómo un equipo que paseó mediocridad, flojos resultados y hasta pasajes futbolísticos de mucha incertidumbre en cuanto a qué era lo que se pretendía hacer adentro de la cancha, haya terminado jugando en un nivel que, por

 
De villanos a casi héroes 54.400

Los 11 que cambiaron la imagen

Esta fue la base titular de Colón en los últimos seis partidos.

De pie: Broun, Garnier, Benegas, Alan Ruiz, Conti y Sperduti. Agachados: Ledesma, Poblete, Guanca, Clemente Rodríguez y Llama.

Foto: Marcelo Fernández

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Buen jugador, pero...

Cristian Llama en uno de los tantos desbordes a Saravia, no sólo en el encuentro de ayer sino en toda la serie. Anunció su salida de Colón después de algunos conflictos, varias lesiones y poca continuidad.

Foto: Marcelo Fernández

ejemplo, le permitió marcar diferencias sobre uno de los mejores equipos del torneo (Belgrano, con un técnico que es el Ferguson de la Argentina por su continuidad) y otro que también se convirtió en difícil para cualquiera (Tigre).

Es un punto de partida tan bueno como impensado para la comisión directiva que venga. La mediocridad de 27 partidos hará que Colón apenas tenga, sacando a los que recién ascienden, un margen de sólo cuatro puntos de ventaja sobre los últimos en el promedio. El final tan bueno del equipo, es el cimiento para que se construya algo mucho más sólido y más pretensioso. El fútbol, una vez más, lo hizo. En seis partidos todo cambió, fue la dinámica de lo impensado.

 

Hinchas

De Belgrano le dieron un marco espectacular al estadio Mario Alberto Kempes. Fue la mayor concurrencia de hinchas propios en el año. La recaudación fue de 2.356.510 pesos.

síntesis

Belgrano 1

Colón 1

Cancha: Estadio Mario Alberto Kempes.

Arbitro: Néstor Pitana.

Belgrano: Olave; Saravia, Barrios, Lema y Alvarez; Rigoni, Farré, Prediger, Velázquez; Zelarayán y Márquez. A.S: Heredia. Estuvieron en el banco: Turus, Espíndola y Parodi. D.T.: Ricardo Zielinski.

Colón: Broun; Garnier, Conti, Benegas, Clemente Rodríguez; Guanca, Poblete y Ledesma; Sperduti, Alan Ruiz y Llama. A.S.: Lovera. Estuvieron en el banco: Castillo, Ballini y Vegetti. D.T.: Darío Franco.

Goles: en el primer tiempo, a los 19 m Ledesma (C). En el segundo tiempo, a los 36 m Obolo (B).

Cambios: en el segundo tiempo, al comenzar, Bolatti (B) por Prediger; a los 19 m Obolo (B) por Velázquez; a los 25 m Etevenaux (B) por Rigoni; a los 31 m Saín (C) por Llama; a los 39 m Romero (C) por Guanca y a los 41 m Callejo (C) por Poblete.

Incidencias: en el segundo tiempo, a los 29 m fue expulsado Clemente Rodríguez (C) por doble amarilla.

Amonestados: en Colón, Broun, Clemente, Poblete, Ledesma y Sperduti.

bajo la lupa

BROUN (6).- Un par de buenas atajadas en el segundo tiempo y nada que hacer en el cabezazo de Obolo que terminó en gol.

GARNIER (6).- Mejor en el primer tiempo que en el segundo, mucha confianza para pasar al ataque. Fue clave en la jugada del gol de Ledesma.

CONTI (7).- El único error del Flaco es que Obolo estaba mejor parado que él y pudo meter el cabezazo del gol. Había ganado durante toda la tarde, tanto de arriba como de abajo. Y seguro para salir jugando. Apretó bien arriba y con eficacia.

BENEGAS (6).- Buen partido del paraguayo, sobre todo en el primer tiempo. Sólido, más preciso para salir jugando que en otros partidos y tiempista.

CLEMENTE (5).- Bien en el primer tiempo, en cinco minutos recibió las dos amarillas que deteminaron su salida. Se lo notaba cansado en ese momento.

GUANCA (5).- De mayor a menor, arrancó bien, sumándose al circuito futbolero con Ledesma y los de arriba. Se empezó a caer a medida que pasaron los minutos.

POBLETE (5).- Otro que jugó al compás del equipo, es decir, imponiendo presencia y gravitación en el primer tiempo pero declinando en el segundo. De todos modos, demostró que puede jugar de “5” tapón sin problemas. Mérito de Franco.

LEDESMA (8).- La figura de Colón y del partido. Tuvo un imán para hacerse de la pelota en todo momento, mostró un impecable despliegue físico, marcó el gol y fue el más claro de todos los que entraron a la cancha. Como en sus mejores tiempos en Boca. O más todavía.

SPERDUTI (6).- No tuvo la importancia de otros partidos, pero fue clave en el gol de Ledesma, porque tras armar una buena maniobra con Garnier, le dio el pase casi servido para que su compañero conquiste el tanto.

ALAN RUIZ (5).- Algunas buenas, otras no tanto, tuvo en Pitana a su principal “rival” porque le cometieron varios foules que el juez ignoró. Bien para defender la pelota ante el acoso adversario, pero sin claridad en los últimos metros.

LLAMA (5).- Bien en el primer tiempo, sin final adecuado para las maniobras que supo armar por su sector y languideciendo en el segundo hasta que Franco decidió sustituirlo.

SAÍN, ROMERO, CALLEJO.- En el primero de los casos, entró para rearmar la línea de cuatro; los otros dos no tuvieron mucha participación en el juego. Pocos minutos en la cancha por parte de los tres.