Debuta el equipo de Madelón en Florencio Varela...

Unión quiere levantar vuelo antes que lo haga el Halcón

Mañana a las 17 visitará a Defensa y Justicia. “Vamos a ir a ganar porque entendimos que ya no queremos el punto sino sumar de a tres”. De los “nuevos”, debutan Acevedo y Rodríguez.

De la Redacción de El Litoral

Madelón no oculta su conformismo, es mesurado y sólo se agranda cuando dice que “vamos a ir a ganar a Florencio Varela”. Redobla la apuesta y lo explica: “Antes, el puntito era un buen negocio, queríamos entrar en la Liguilla y sumar para el promedio, pero ese primer año del retorno ya pasó, el equipo demostró competitividad, empezamos el tercer año de trabajo y el objetivo está claro y es el de crecer”.

Con este mensaje, Unión empezará mañana a recorrer este torneo de transición en el cual los objetivos apuntarán a engordar el promedio y a los dos clásicos con Colón como prioridades casi únicas, teniendo en cuenta que no habrá clasificación para copas y sólo el primero de cada zona tendrá la chance luego, en una final, de decretar el campeón de este torneo de apenas cuatro meses (16 partidos) para retornar luego al anterior calendario que igualará al fútbol europeo.

Ya mucho se dijo de lo que pasó el año pasado. El equipo tuvo una primera parte con buena producción ofensiva y algunos desequilibrios en el fondo, pero con una sumatoria de puntos interesantes. La segunda parte del año invirtió los roles. La ida de Triverio no se reemplazó, los goles comenzaron a escasear pero la defensa mejoró mucho. El balance terminó siendo positivo más allá de que la ilusión copera se frustró en el primer partido, con Aldosivi en Santa Fe, ya con un equipo que se le había caído considerablemente en su rendimiento, individual y colectivo. Pero la imagen fue más convincente en esos primeros meses de competencia que en los que llegaron después del receso por la Copa América.

Se fue Leo Sánchez, lo cual no es un detalle menor. El rubio defensor no sólo se convirtió en caudillo, sino que le dio un juego aéreo defensivo y ofensivo que el equipo puede llegar a extrañar, sobre todo atendiendo a la importancia de este aspecto en el fútbol de hoy. Hay mucha confianza en el juvenil Fleita, que están fundadas porque el pibe ha rendido bien cuando se lo utilizó en el torneo pasado. También está la variante de Zurbriggen en la zaga y la llegada de Faccioli, con una visible falta de competencia porque viene de jugar poco, es otro aporte. Pero el gran dilema es saber si la ida de Leo Sánchez se convertirá en algo parecido a lo que pasó con Triverio el año pasado. Obvio que todos en Unión esperan que esto no sea así.

En el medio, Madelón trajo algunos jugadores que refrescarán el sector. Acevedo, Nagüel y Rolle son los refuerzos que han llegado, para sumarse a tres que fueron titulares indiscutidos en el torneo pasado (Villar, Martínez y Malcorra). No tiene en el plantel un “5” de marca neto, aunque también es cierto que en este fútbol de hoy, el que sólo marca pero no juega, tiene poca cabida. El de mayor “fogosidad”, en ese aspecto, es Manuel De Iriondo, quien recién estará disponible dentro algunas semanas, si todo marcha bien en su recuperación. Acevedo no es un jugador con mucha marca y en ese aspecto, el que retrocederá un poco más en el terreno será Martínez. Con Rolle, Madelón tendrá un jugador con las características de un enganche, que puede ser importante para modificar el juego y el esquema. Viajó y mañana irá al banco.

La otra gran incógnita está arriba, porque Gamba y Riaño no le dieron eficacia en el segundo semestre, solamente llegó Julio Rodríguez (Madelón se aventuró a señalar que hará un buen torneo) y después están los más chicos como posibilidad de recambio (Soldano y Bolzicco). Es uno de los aspectos a mejorar. Arrancarán Riaño y Rodríguez como titulares, dos jugadores que van por adentro, que tienen movilidad y que saben jugar de espaldas al arco. Pero uno tendrá que destaparse (o los dos) para que el equipo recupere poder de gol en sus delanteros.

¿Para qué está Unión? es la pregunta que todos los hinchas tatengues se hacen. El torneo lo condiciona mucho por lo ya señalado: no hay clasificación para copas. Se juega por el primer puesto o por engordar el promedio. Los dos clásicos asoman como algo apetecible en el horizonte. Ser competitivo y duro para todos, es el gran objetivo de Madelón y sus muchachos.