Cuatro palabras
Los tamberos santafesinos pierden $1.50 por cada litro de leche que producen. Al desfinanciamiento se le suma una fatal desesperanza, que tienta a muchos a “bajar la persiana”. La política prometió soluciones de corto y mediano plazo. ¿Llegarán a tiempo?
Federico Aguer
Previsibilidad, confianza, transparencia y equidad. Los cuatro conceptos que más se escucharon en la charla mantenida esta semana entre los integrantes de la Sociedad Rural de Rafaela y Alejandro Sammartino, subsecretario de lechería de la Nación. El funcionario recorrió la cuenca provincial a lo largo de la semana y compartió reuniones con productores, industriales y cooperativas, demostrando mostró mucho feeling con todos los eslabones.
A favor, los presentes destacaron la actitud de Sammartino para venir al territorio a escuchar de boca de dirigentes y productores en vivo y en directo la situación, la que no se puede apreciar desde un despacho en Buenos Aires.
“Sabemos que en 50 días no se pueden resolver problemas de más de 10 años; incluso la idea de sacar el excedente de leche en polvo para descomprimir el mercado y sincerar la oferta y la demanda de leche cruda es interesante”, disparó Pedro Rostagno, titular de la rural rafaelina.
También remarcaron la sinergia con el gobierno provincial a través de la presencia del ministro y su referente en materia lechera, además de los legisladores que estuvieron para aportar soluciones conjuntas.
En contra, que las tres medidas anunciadas en Venado Tuerto todavía no se materializaron: los subsidios, el compromiso de la industria para mejorar el precio y los créditos a tasa blanda siguen siendo una intención mas que una realidad.
“Sabemos que hay tambos que están por cerrar”, finalizó Rostagno. El número de establecimientos se guarda bajo siete llaves, y si bien no trascendió la cantidad, se sabe que si no se implementa un paquete de shock en lo inmediato, habrá un efecto dominó con efectos nefastos a nivel económico y social, con un costo político muy alto.
Las cuatro palabras configuran un nuevo marco de diálogo con el sector que ilusiona. Ojalá que lleguen a tiempo para revertir la crisis.
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