Análisis de la Fundación Mediterránea

La mira en el segundo semestre

Las metas de menos déficit e inflación ceden ante la gestión de un mayor nivel de actividad. El gobierno retoma la iniciativa, pero asume riesgos con el dólar y con la reacción de los inversores tantas veces prometidos.

 

De la redacción de El Litoral

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DyN

El gobierno “ha pasado a preocuparse más por el nivel de actividad que por la marcha de la inflación”, según un análisis dado a conocer por la Fundación Mediterránea, en el que se advirtió por la “dificultad” que genera el megaproyecto oficial de pago de juicios a jubilados y blanqueo de capitales “para llevar adelante la meta descendente del déficit fiscal”.

“El gobierno había perdido la iniciativa política cuando la oposición y los sindicatos avanzaron con la llamada ley antidespidos y, para peor, el dato de nivel de actividad de abril fue mucho más negativo de lo esperado”, señaló. Así, el estudio evaluó que esta combinación de factores “posiblemente llevó al gobierno a adelantar la presentación de la propuesta de reparación a unos 2,2 millones de jubilados”, en el megaproyecto que incluye la creación de una pensión universal, el blanqueo de capitales y la restitución a las provincias del 15 por ciento que venía reteniendo la Anses de la masa coparticipable.

Según el análisis elaborado por el economista Jorge Vasconcelos, “la consigna es evitar la frustración del segundo semestre”. “Si a esto se suma la anunciada decisión de recuperar terreno perdido en materia de obra pública, se percibe que las autoridades han optado por no esperar a la inversión privada para asegurarse un segundo semestre de recuperación”.

Vasconcelos previno “sobre la dificultad que estos anuncios introducen para llevar adelante la meta descendente del déficit fiscal. Un blanqueo extremadamente exitoso ayudaría a disimular estos inconvenientes, pero se trata de ingresos por única vez”, cuya magnitud, a su vez, “no está asegurada”, destacó.

Por eso, consideró que “es relevante monitorear lo que ocurra con la tasa de riesgo país, porque si ésta subiera por incertidumbre fiscal” podría haber “un efecto negativo sobre la inversión privada, que anularía parte del intento oficial”. Asimismo, planteó que “la fórmula del segundo semestre por la que ha optado el gobierno también tendrá efectos colaterales sobre la trayectoria del precio del dólar”.

En este sentido, explicó que “si ingresan capitales en forma masiva por el blanqueo, el tipo de cambio que hoy luce insatisfactorio para un número amplio de empresas industriales no tendrá margen para acercarse a lo que éstas consideran de equilibrio”.

Construcción

  • Apunta Vasconcelos que “donde sí puede haber alivio en términos de actividad y empleos es en el sector construcciones. Si bien esta vertiente es independiente del paquete que se discute en el Congreso, hay numerosas señales respecto a la decisión oficial de intentar recuperar ‘tiempo perdido’ en esta dimensión”.

Expone que “este objetivo puede significar para los siete meses que restan del año un incremento superior a 50 % interanual en pesos corrientes de las partidas de obra pública. Este guarismo surge de considerar un presupuesto estimativo para 2016 del orden de los 220 mil millones de pesos, de los cuales sólo se habría ejecutado el 33 % en los primeros cinco meses del año.

“En términos de metros cuadrados de obras, de empleo y de consumo de materiales el incremento debería ser muy significativo, partiendo de la base que hasta fin de 2015 los pesos aplicados a este sector tuvieron demasiadas filtraciones”.