Anoche
Violento robo a un taxista
Los asaltos a taxistas y remiseros se siguen reiterando en distintos puntos de la ciudad. Foto: El Litoral/Archivo
Redacción de El Litoral
Dramáticos momentos atravesó anoche un taxista cuando quedó a merced de dos delincuentes que lo “pasearon” y le robaron.
La secuencia se inició poco antes de la medianoche, en la intersección de Avda. Aristóbulo del Valle y Galicia donde Damián Brazzan, chofer de un Radiotaxi, tomó como pasajeros a un hombre y una mujer.
Ni bien subió al vehículo la pareja pidió ser llevada hasta la zona de Ángel Gallardo.
El viaje transcurrió con absoluta “normalidad”. Incluso la buena conversación de los “pasajeros”, para nada hacía pensar que en verdad se estaba ante unos temibles rufianes
Lo terrible del asunto comenzó una vez que se llegó al destino. Fue en esta parte que el sujeto (un hombre de unos 35 años) sacó un arma de fuego y encañonó al chofer. “¡Quedate tranquilo que si te portas bien no te va a pasar nada!”, informó el malviviente.
Bajo amenazas, el taxista fue llevado hasta la zona de quintas y obligado a internarse en un camino de ripio que comunica dicha jurisdicción con Monte Vera. Una vez allí fue despojado de sus pertenencias, entre las que se cuentan dos teléfonos celulares, y el dinero que tenía encima.
Para esta parte cabe señalar que mientras el ladrón se apoderaba de las cosas, la mujer que lo acompañaba era la que ahora apuntaba con el arma.
Logrado su objetivo, los delincuentes pidieron ser trasladados (con las luces apagadas) hasta el camino que comunica con el paraje “El Chaquito”, donde finalmente se dieron a la fuga de a pie.
Sigue el drama
El drama de asaltos a taxistas y remises parece no tener solución.
Hace unos días dos choferes fueron blanco de sendos robos. Uno de los hechos ocurrió en pleno centro y tuvo ribetes increíbles.
* Por la zona se conducía un móvil de Radiotaxi Santa Fe, el que venía al mando de una mujer.
La trabajadora llevaba como pasajero a un muchacho el que, en un momento dado, comenzó a amenazarla y a ordenarle que le entregue toda la recaudación.
Lejos de aceptar, la mujer se trabó en lucha con el delincuente. Pero la refriega tuvo un abrupto final cuando el ladrón, acorralado por la situación, se arrojó del vehículo y escapó a la carrera.
La mujer comunicó lo acontecido a la radio de la empresa, donde además hizo saber que se encontraba en óptimas condiciones. A punto tal que decidió seguir trabajando.
* El otro hecho ocurrió en Berutti y Edmundo J. Rosas, de barrio Estanislao López, más conocido como “La Gran China”.
Por dicho sector circulaba otro móvil de la Sociedad Taximetristas Unidos cuando el pasajero que iba a bordo sacó a relucir un arma y, bajo amenazas, le sustrajo al chofer la billetera y su teléfono celular.
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