El jueves, en el CCP

Juampi González se pone “Soltero”

El humorista vuelve para presentar su nuevo unipersonal de stand up, basado en las alternativas de la soltería, con la participación de su personaje furor en Instagram, “Alessandra Teapoya”.

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“Soy de agarrar un tema y profundizarlo. Generalmente se basan en tres cosas: lo que pienso, lo que me pasó y lo que siento con respecto a algo”, dice Juampi. Foto: Gentileza Producción

 

De la redacción de El Litoral

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Luego de colmar el Centro Cultural Provincial Paco Urondo, en julio pasado, Juampi González trae su nuevo show a Santa Fe. El comediante que es furor en Instagram presenta su nuevo show “Soltero”, una hora y media de humor en el que la gente es parte del mismo y no para de reír. Será este jueves desde las 21.30 en la misma sala (Junín 2457). Las anticipadas desde 180 pesos se consiguen en la boletería del CCP (de 14 a 21) y a través de www.comedia.com.ar.

De a uno

Realizando funciones que superan los 1.000 espectadores, “Soltero” es el segundo unipersonal de stand up de Juampi, donde cuenta con humor todo lo que involucra esa etapa de la vida. Desde cómo es vivir solo, los problemas diarios del hogar, hasta cómo es su relación con las mujeres, el sexo, y lo bueno y lo malo de la soltería. Además, cuenta con la participación especial de su personaje que es furor en Instagram, “Alessandra Teapoya”.

Juampi trabaja activamente con redes sociales y se ha convertido en uno de los que más engagement ha logrado con sus seguidores, especialmente en Instagram y Snapchat, en donde crece a un ritmo de entre mil y dos mil seguidores diarios a través de videos autorreferenciales, de la vida cotidiana y de sus personajes como “Alessandra Teapoya”, “Martín Gigosilly” y “Walter”.

Humor realista

En la previa, Juampi habló sobre su quehacer y sus proyectos venideros.

—¿Cómo llegaste a incursionar en el stand up?

—Fue de curioso. Me vine a Buenos Aires a estudiar Ingeniería Industrial, pero a la par siempre hacía cursos extracurriculares. Guitarra, batería, locución. Siempre me gustó hacer reír, pero nunca me lo había imaginado como profesión. Aunque cada vez que podía, en el colegio, me subía al escenario. No le tenía miedo. Y en 2009 arranqué un curso de stand up, pensando que iba a hacer otro curso al cual iba a empezar y abandonar como todo el resto, pero no.

—¿Cómo fue la experiencia de participar en la Primera Edición del Festival de la Palabra?

—Fue increíble. No me lo esperaba. Me sorprendió. Es un festival hiper importante, y en esa primera edición estaban todos los que yo más admiro de este género, y compartir grilla con ellos fue un orgullo y un placer enorme. Además de que en ese momento no eran tan seguidas las oportunidades para actuar frente a 400 personas.

—¿Incorporás todo lo que estudiaste en el escenario?

—Sí. La idea de estudiar distintas técnicas respecto al humor es poder aprenderlas a la perfección, para luego poder romperlas y crear tu propio estilo. Es por eso que cuando uno recién comienza, se pega más a esas estructuras y a medida que pasa el tiempo, ya se ven menos los hilos.

—¿Cómo haces la elección de los chistes, en qué te basas?

—Más que la elección de los chistes, diría, la elección de los temas. Soy de agarrar un tema y profundizarlo. Generalmente se basan en tres cosas: lo que pienso, lo que me pasó y lo que siento con respecto a algo. Soy un comediante que se basa 100 por ciento en cosas reales. Y a partir de ahí genero el humor. Todavía no pude aprender a manejar otros tipos de humor, como el absurdo. Me siento más cómodo con esto.

El show

—Llegaste a conocer a Alessandra Rampolla ¿Cómo fue esa experiencia?

—Sí, la conocí. Fue genial. La había conocido una vuelta previo a armar el personaje de Ale Teapoya. Porque tenía un monólogo que hablaba de ella. Y siempre fue muy generosa. Y hace poco, ya con el personaje popularizado, vino a verme a un show y dijo que se reía mucho con mis videos. Definitivamente entendió todo. Una genia.

—¿Por qué el show se llama “Soltero”?

—Escribí todos los monólogos y, cuando me di cuenta, todo giraba en torno a esa temática. Vivir solo. Los boliches, las primeras citas, Tinder, Happn, los telos y demás. Y de paso para ver si pica algo (risas).

—¿Cómo te recibió la gente en Santa Fe?

—Últimamente cada función es única e irrepetible. Trato de generar algo particular con el público en cada espectáculo. Siempre hay algún personaje raro, o alguna situación de la que saco provecho. Por ejemplo, en el último show de Santa Fe, devolví una billetera que se le había perdido a un chico e hice humor con eso.

—¿Qué cosas te sucedieron arriba del escenario que te llamaron la atención?

—Fue el primer show grande que hice en mi carrera con mi unipersonal. Para más de 700 personas. Ojalá se repita. Pero salió un gran show esa vez.

Lo que viene

—¿Qué sensaciones te genera la presentación en el Maipo el 5 de noviembre?

—Es una mezcla, entre alegría, por seguir cumpliendo sueños y poder pisar un escenario de un teatro tan especial, y tristeza por despedir un show que me dio tantas satisfacciones. Además de los nervios correspondientes, por querer sorprender a la gente con cosas nuevas y especiales para ese show.

—¿Cómo te preparas para la gira por la Costa en el verano?

—Ansioso. Ya hice temporada de verano dos años seguidos, pero en Brasil y como parte de una compañía. En este caso, va a ser con mi show. Pero con mucha expectativa, y sabiendo que vamos a tener que trabajar duro, y que las vacaciones quedarán para más adelante.