Nicolás Silva, el chiquito que quiere cosas grandes en Colón...

“Tengo que aprender a bajar un cambio”

  • El delantero sabalero estuvo anoche en “Café con Fútbol”, el programa de Cable y Diario. Ésta no fue la primera vez que Colón se fijó en él, ya que vino a probarse en otra ocasión pero no lo aceptaron.
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Poderoso el chiquitín Nicolás Silva en “Café con Fútbol”, en los estudios de Cable y Diario. “Sé que me tengo que tomar un segundo para terminar mejor las jugadas”, señaló el delantero rojinegro. Foto: Mauricio Garín

 

por Enrique Cruz (h)

Nació en Rosario del Tala pero tuvo una carrera futbolística colmada de pruebas, experiencias y hasta algunos sinsabores. Corta edad y muchos sinsabores. “Puedo decir que he jugado en todas las categorías y que no pueden haber rivales o canchas que me sorprendan”, dice con razón. Y lanza su primera frase a manera de autocrítica: “Tengo que aprender a bajar un cambio”, señala. Y cuenta de qué manera intenta solucionarlo: “Hablo mucho con Ortiz y con los otros muchachos. Ellos me dicen qué es lo que puedo hacer para complicar al defensor. Yo sé que tanto vértigo me termina complicando”.

Jugó en varios clubes, incluso de la provincia, hasta que llegó la oportunidad de ir a jugar a Chaco primero y a Boca Unidos después. “Roberto Marioni me había traído a Santa Fe para que me prueben, pero en su momento dijeron que no. Al tiempo, me llevó a Boca Unidos y esas cosas del destino hicieron que volviese a tener la chance de jugar en Colón. Estoy orgulloso de jugar en este club. Y cuando me preguntan de qué me sorprendo, sin dudas digo del fervor y de la pasión de esta gente”, dice el delantero, que tiene contrato hasta junio del año que viene, con una opción a favor de Colón.

—¿Cuál es tu puesto verdadero?

—Jugué en varios lugares. Me gusta mucho jugar de media punta, detrás del delantero de punta y con libertad para moverme por todo el frente de ataque. Si es como volante, que sea arrancando por izquierda. Eso me permite enganchar hacia adentro y que me quede el arco de enfrente.

—¿Te gustaría tener más gol?

—Obviamente. Yo sé que una de las principales funciones del delantero es convertir goles. Lo asumo y entiendo que es así. Pero me sentiría muy bien si puedo abastecer al “Sungui” Blanco. A veces, pienso que el equipo no juega en función de él. Y me pasa a mí, en particular, porque asumo que soy el que debe estar más cerca, tirarle mejores centros y no entrar tanto en el vértigo. Es difícil también, porque el fútbol argentino no te permite la pausa. Pero todos me dicen que está bien que me lance en velocidad, pero que en algún momento tengo que tomarme un segundo para acomodarme bien y terminar la jugada en forma correcta.

—¿Con qué jugadores te identificás?

—Me gustan Pavón y Centurión, los de Boca. A nivel internacional, me fijo mucho en Ribery.

—¿Qué les pasó con Patronato?

—Creo que hicimos un buen partido y no merecimos la derrota. Con un poco más de calma y si el árbitro nos ayudaba convalidando el gol, que para mí fue legítimo, del “Sungui”, creo que nos quedábamos con un punto, al menos. Hicimos méritos suficientes hasta para ganar, y lo terminamos perdiendo. Una pena.

—¿Pensás que va a ser más complicado el partido del fin de semana con Rafaela?

—Puede ser. No conozco la cancha, pero todos me dicen que es chiquita y que no hay espacios. Se juega mucho a meter la pelota adentro del área y no se puede aspirar a tener mucha claridad en el juego. A propósito de esto, fue una de las cosas que nos faltó en otros partidos. Pero el sábado mejoramos, sobre todo porque levantaron dos jugadores que son clave para nosotros, como Ledesma y Poblete.

—Sos un jugador de físico diminuto, ¿te gusta más enfrentar a defensores grandotes o preferís a los más chicos?

—Los más chicos pueden ser más rápidos y los grandotes tienen una fortaleza física que hay que evitar. Si encaro al grandote, intento pasarlo lo más lejos posible para que no me pueda interceptar. Pero te repito que de nada sirve un desborde si después no me sereno y me tomo un segundo para terminar bien la jugada.

—¿Cómo ves el grupo?

—Muy bien. En mi caso, concentro con Blanco y con Tomás Sandoval. Esto también me ayuda para que hablemos mucho de fútbol y de cómo entendernos en la cancha. “El Sungui” es un gran delantero y no tengo mucho para agregar a lo que todos saben. Y en el caso de “Sando”, tiene unas condiciones extraordinarias. Creo que Colón tiene un jugador con futuro de crack.