Anuncio conjunto con El Vaticano

La Iglesia argentina abre sus archivos sobre la dictadura

  • Tras completar la organización y digitalización de los documentos, serán puestos a disposición de “víctimas y familiares directos”.
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José María Arancedo y Mario Poli encabezaron esta mañana la conferencia de prensa de la Comisión Episcopal.

Foto: DyN

 

De la redacción de El Litoral

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DyN/Télam

Con el impulso del Papa Francisco, El Vaticano y la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) anunciaron hoy que se concluyó con el “proceso de organización y digitalización” de sus archivos sobre la última dictadura cívico militar y que próximamente se abrirán a la consulta de las “víctimas y familiares directos de los desaparecidos”, en un gesto que busca convertirse en una contribución para la “reconciliación de los argentinos”.

El anuncio fue hecho esta mañana mediante un comunicado de prensa conjunto entre la Secretaría de Estado de El Vaticano y la CEA, difundido simultáneamente en Roma y Buenos Aires, en el que precisaron que se trata de los documentos relacionados con el período de la última dictadura conservados en los archivos del Episcopado, el Vaticano y la Nunciatura Apostólica en Buenos Aires.

“No le tenemos miedo a los archivos. Siempre la verdad ilumina, aunque duela. Este aporte quiere ser un servicio a nuestra Patria para la reconciliación de los argentinos”, afirmó el vicepresidente primero de la CEA y arzobispo de Buenos Aires, el cardenal Mario Poli, en una conferencia de prensa que las autoridades de la Iglesia argentina ofrecieron para precisar detalles de la decisión, en su sede del barrio porteño de Retiro.

Según se informó en el comunicado difundido esta mañana, “con las decisiones e indicaciones” del Papa Francisco terminó el “proceso de organización y digitalización” de los archivos y, “de acuerdo con un protocolo que se establecerá próximamente, podrán acceder a la consulta de los documentos las víctimas y familiares de los desaparecidos y detenidos y, en el caso de religiosos o eclesiásticos, también sus superiores mayores”.

“El trabajo se ha desarrollado teniendo como premisa el servicio a la verdad, a la justicia y a la paz, continuando con el diálogo abierto a la cultura del encuentro”, precisó la Iglesia en el comunicado conjunto al informar la medida, que rápidamente recibió el acompañamiento de los organismos de derechos humanos que lo consideraron como “una buena noticia” y “un paso importante”.

Sin ocultamiento

Más tarde, en la rueda de prensa, el titular del Episcopado y arzobispo de Santa Fe, monseñor José María Arancedo, destacó que de los documentos desclasificados “van a surgir más luces que sombras” en cuanto a la labor que desarrolló la Iglesia durante la dictadura cívico militar y dijo que, con esta decisión, se busca contribuir a un “camino de justicia y reconciliación” en el país.

“No hubo ocultamiento ni selección de materiales”, precisó Poli sobre la documentación, a la vez que destacó que, desde hace varios años, la Iglesia viene respondiendo requerimientos puntuales de la Justicia en el marco de causas por delitos de lesa humanidad, como por ejemplo actas de bautismo de las distintas diócesis del país.

Los detalles de la tarea que viene realizando la Iglesia sobre estos archivos fueron analizados en una reunión que la comisión ejecutiva del Episcopado argentino mantuvo el sábado 15 en el Vaticano con el secretario de Estado, Pietro Parolin, y otros funcionarios de la Santa Sede para “una valoración de los trabajos de catalogación y digitalización del material de archivo del período de la dictadura militar (1976-1983) conservado en los archivos de la CEA, de la Secretaría de Estado y de la Nunciatura Apostólica en Buenos Aires”.

Al ser consultados sobre si de los documentos desclasificados podría surgir algún elemento sobre el rol que jugó el Episcopado durante la dictadura, Poli dijo que “la Iglesia hizo lo que tenía que hacer” aunque reconoció que “no está ausente el mea culpa y el pedido de perdón por lo que no se hizo”, que se pronunció públicamente por primera vez en el año 2000.

El dato

Apelación

  • El arzobispado de Santa Fe apeló el fallo que lo condena, junto a los herederos del ex obispo Edgardo Storni, a pagar la suma de $ 756.000 por daños y perjuicios al ex seminarista Rubén Scalzo, como derivación de las denuncias por intentos de abuso sexual.
 

"La Iglesia ha hecho muchísimo, aun con el estrecho margen que tenía. Hubo intervenciones concretas de la Iglesia por mucha gente y eso en las cartas se ve”.

José María Arancedo,

presidente CEA

La clave

Contenido

Entre los archivos digitalizados de la CEA, se encuentran referencias a unos 3.000 casos en documentos como telegramas, cartas y notas informales; la mayoría de ellos con pedidos de ayuda de familiares de víctimas de la dictadura, en algunos casos gestiones de la propia Iglesia ante distintos organismos como el Ministerio del Interior y también agradecimientos por las gestiones realizadas, según se precisó.

"Es un paso adelante en cuanto al derecho de las víctimas a conocer la verdad, pero aquí también está el derecho de la sociedad de conocer los archivos de la Iglesia Católica, y dar un debate público sobre lo que estos archivos contienen”.

Gastón Chillier,

director del Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels).