PRIMER LIBRO DE RAMIRO GENEVOIS

“Lo importante es saber transmitir”

Ayer se presentó en el Cine América “La preproducción: ¿cómo no lo supe antes de grabar?”. Se trata de una especie de manual para músicos, productores y operadores con conocimientos básicos o avanzados en la materia, y de un orientador vocacional para quien quiera entrar al mundo de la música.

Alejandro Moulins

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Ramiro Genevois tiene 37 años y es uno de los referentes regionales en grabación de música. Tiene tanta facilidad de comunicar y tantos conocimientos en la materia, que casi no hace falta interrumpirlo: sabe llevar la charla para que uno nunca deje de prestarle atención. Se define a sí mismo como un “diseñador sonoro”, y es lo que empezó a hacer quince años atrás cuando El Pote, su estudio de grabación en barrio Mariano Comas, comenzó a registrar las primeras tomas de bandas.

Hace algunos años, comenzó a gestarse su libro, que fue encarrilándose hasta ser hoy un manual que apunta a la esencia, el lado humano del músico, productor u operador, o quizás a cualquier persona interesada en el mundillo de la gente ligada a la música.

En una charla de algo más de una hora, con recorrida a su estudio incluida, explicó el principal objetivo del libro: contribuir a la cultura musical para que quede plasmada para las generaciones venideras.

—El libro se refiere a preproducción. ¿Cómo fue en tu caso preproducir este material?

—Fue un proceso largo, que me llevó casi tres años. El libro apunta a la esencia, y todo el tiempo sentía el temor de caer en lo lógico o básico.

—¿Cómo es esto de compartir tus secretos? ¿No te genera temor divulgar alguna “receta” de tu trabajo?

—Al enseñar o explicar, uno crece. Si yo a vos te digo que mezclando tal color con tal otro obtenés este color, no significa que vos vayas a pintar el mismo cuadro que yo. Yo te enseño cómo combinar el color, el cuadro lo pintás vos. Es una falsa ilusión creer que uno gana encerrándose. Es al revés, mientras más das, más te vuelve. Estoy haciendo un esfuerzo por lograr transmitir eso. Me siento bien motivando a la gente. Los discos tienen buen resultado porque intento llevar a los músicos a cantarlos o tocarlos de otra forma.

En todos los detalles

Ramiro es meticuloso, tanto que en medio de la etapa de diseño del libro, tuvo que parar un par de meses para estudiar tipografía: “Yo quiero leer y quiero sentir que soy yo el que está hablando. Estudié también las combinaciones de color, proporciones, y me vino rebién. Y ese mensaje es el que intento transmitir en mi libro: conozcan, busquen herramientas, pero también den un paso más allá y crezcan. Ésa fue la razón por la que fui a un diseñador gráfico a que armara el libro, pero fui con conceptos que pude transmitir interactuando con él casi como un igual. De la misma forma, el músico debe contar con las herramientas para hacer eso con su obra”.

—¿Qué porcentaje tiene la preproducción en el resultado final de un disco?

—La preproducción es todo. Generalmente, nos enfocamos mucho en la calidad del sonido y nos olvidamos un poco del mensaje, de la música. El Hi-Fi (o alta fidelidad) ya se consiguió, ya no es tan importante cómo va a sonar, sino qué es lo que va a transmitir. La preproducción es lo que hace que uno llegue al estudio de grabación con algo resuelto, masticado.

—¿Cuáles son los aspectos fundamentales a tener en cuenta en la preproducción?

—Lo fundamental es que el músico entienda un poco más la parte técnica, y que el técnico entienda más la música. La importancia de ese proceso es fundamental y es un poco el rol del productor, que también está explicado en el libro.

Preproducir, equiparse y prepararse

Ramiro considera que “está buenísimo que las bandas tengan una placa o herramientas para hacer registros de buena calidad. Lo que también está bueno es que eso sea un proceso. En el libro quiero darle entidad al estudio, porque está buenísimo que uno cuente con placas de sonido en la casa, pero hay cosas que se pueden lograr y cosas que no”.

—¿Qué es lo más importante a la hora de plasmar música?

—Lo más importante, sin dudas, es “el toque” del músico, el instrumento, y la toma. Esta última juega un papel fundamental. El secreto del audio que vos logres reside en la preparación que tengas, y en eso juega un rol importantísimo la preproducción. Obviamente que todo va a tener una cadena de responsabilidades hasta que esté el disco, pero es muy difícil que un material bien preparado o preproducido, con músicos que sepan qué expresar y cómo hacerlo, salga mal. Puede salir “menos mejor”, pero si la banda viene y toca tremendo, es casi imposible.

Cultura mejor guardada

Gracias al incentivo que obtuvo con el premio otorgado por Espacio Santafesino, Genevois puedo aportar su granito de arena a la cultura musical: “Para ser sincero, estamos guardando la cultura de una forma bastante precaria. Mi idea es que la transmisión que se haga a próximas generaciones sea un poco más adecuada, no sé si mejor en cuanto a calidad, sino a lo que la música logre transmitir”, afirmó.

Por último, Ramiro se refirió a algunos conceptos de su libro: “Es más Ciencias Sociales que otra cosa. Es entender cómo funciona todo esto de grabar. Habla mucho de la vida del músico y es un orientador vocacional. Si vos querés ser un músico profesional y en algún punto vivir de eso, tenés que saber cómo conseguirlo. Yo no te digo cómo hacerlo: desde mi experiencia, te doy algunas herramientas y conceptos indispensables y cada uno lo hará como mejor crea.

El libro

se puede conseguir en el local de música de 9 de Julio y Suipacha, a través del Facebook: “Cómo no lo supe antes de grabar?” o en la web www.antesdegrabar.com.