Brasil

Designan en la Corte Suprema a ministro de Justicia y amigo del presidente Temer

De la Redacción de El Litoral

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Telam

Un amigo del presidente Michel Temer fue elegido por 55 votos contra 13 en el plenario del Senado brasileño como juez de la corte suprema de Brasil, en una decisión polémica del mandatario ya que el hasta hoy ministro de Justicia deberá analizar nada menos que a sus colegas de gabinete en el escándalo de corrupción Lava Jato.

Alexandre Moraes, dirigente del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), del que cobró 120.000 dólares en 2014 como asesor jurídico del candidato presidencial y senador Aecio Neves, será revisor del caso Lava Jato que contiene la delación de 77 ejecutivos corruptores confesos de la empresa constructora Odebrecht.

Moraes, un constitucionalista de 49 años, fue la carta de Temer para ocupar el lugar de Teori Zavascki, el juez del Supremo Tribunal Federal que falleció en enero al caer la avioneta en la que viajaba dos semanas antes de tener que dar luz verde a las confesiones de Odebrecht.

Moraes ex secretario de seguridad pública, fue también abogado del ex presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, actualmente preso en Curitiba en el marco del “Petrolao”.

Constitucionalista al igual que Temer, de quien leyó sus libros, el nuevo juez de la Corte se considera un amigo personal desde hace 20 años del ex vicepresidente de Dilma Rousseff.

Varios partidos de oposición objetaron la designación al tratarse de un ministro del gabinete de Temer que fue repudiado en las últimas semanas por agrupaciones de jueces y abogados de las universidades de Río de Janeiro y San Pablo.

Moraes, durante su interpelación ayer en la comisión del Senado, dijo que será “absolutamente independiente e imparcial” si tiene que juzgar a Temer y a sus siete compañeros de gabinete involucrados en denuncias de Odebrecht.

Por eso, descartó excusarse como le pidió Lindbergh Farias, del opositor Partido de los Trabajadores (PT).

La candidatura de Moraes fue ratificada en un rápido trámite dirigido por el presidente del Senado, Eunicio Oliveira, del Partido del Movimiento de la Democracia Brasileña (PMDB) de Temer y sospechoso de haber beneficiado a Odebrecht con una ley a cambio de ventajas en la financiación de campañas.

Por las propias normas del tribunal, el nuevo miembro de la Corte Suprema, compuesta por 11 jueces, pasará a actuar como revisor de ese caso, aunque sólo lo hará en la etapa final del proceso, cuando se llegue al juicio oral y sean dictadas sentencias.

Aunque hoy sólo asistieron 68 senadores, entre los 81 miembros del pleno al menos 44 son sospechosos o investigados por supuesta corrupción, en muchos casos asociada directamente al caso Petrobras, que cuando se trata de políticos con fueros tramita en el Supremo.

Desde el Palacio del Planalto, el presidente Temer expresó su “satisfacción” con la elección del jurista recibido en la pública Universidad de Sao Paulo (USP).

“Moraes prestará una contribución relevante a la realización de la justicia en Brasil durante su mandato en la corte, siempre marcado por la independencia, imparcialidad y apego a la Constitución, algo que caracteriza su trayectoria”, dijo Temer, según un comunicado del portavoz presidencial, Alexandre Parola.

El dato

Renunció el canciller

  • El canciller brasileño, José Serra, renunció al cargo por problemas de salud, y volverá a su banca de senador por el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) de la que había pedido licencia para asumir el Ministerio de Relaciones Exteriores en mayo, como parte del gabinete de Temer y tras la suspensión de Dilma Rousseff de la jefatura del Estado. Durante su gestión, Serra enfrentó problemas diplomáticos con países que no reconocen al gobierno de Temer y consideran que la destitución de Rousseff fue un “golpe”, razón por la cual retiraron embajadores y otros diplomáticos los gobiernos de Venezuela, Bolivia, Ecuador, El Salvador, Cuba y Nicaragua. Serra fue el encargado de enfrentar las voces internacionales que hablaban de golpe.