Europa respiró aliviada

Macron y Marine Le Pen definirán la presidencia de Francia el 7 de mayo

Con el 96% de los votos escrutados, el ex ministro de Economía de Hollande conseguía el 23,91% de los votos, frente al 21,42% de la candidata de 48 años del xenófobo Frente Nacional.

De la Redacción de El Litoral

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Telam - DPA

El liberal Emmanuel Macron se impuso este domingo en la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Francia, y disputará el balotaje del 7 de mayo con la ultraderechista Marine Le Pen, quien quedó en segundo lugar, con lo que el país europeo vivirá un duelo inédito sin la participación de los partidos tradicionales de derecha e izquierda que dominaron el panorama político en las últimas décadas.

La eliminación de la carrera al Elíseo del conservador Francois Fillon y al izquierdista Jean-Luc Mélenchon, allanó el camino a Macron, al que muchos franceses otorgaron su confianza a último momento porque lo veían con más posibilidades de aglutinar el voto anti Le Pen.

“En un año, hemos cambiado la cara de la política francesa”, celebró Macron, de 38 años, quien con su joven iniciativa ¡En Marcha! se erigió como el candidato del establishment para hacer frente a la decepción y frustración ciudadana con la élite política en el poder.

En su bunker electoral y frente a una multitud de simpatizantes que cantaban victoria, Macron, hasta hace unos meses ministro de Economía del actual gobierno socialista, aseguró que “no existe más que una Francia, la de los patriotas dentro de una Europa que nos protege”.

“El desafío es abrir una nueva página en nuestro país para que todos puedan encontrar su lugar”, añadió el candidato antes de prometer que intentará “unir! a los franceses para vencer en la segunda vuelta la ultraderechista y anti europeísta Le Pen.

En la primera vuelta, con el 96% de los votos escrutados, Macron conseguía el 23,91% de los votos, frente al 21,42% de la candidata de 48 años del xenófobo Frente Nacional (FN) francés. En el tercer y cuarto puesto se ubicaban el conservador Francois Fillon y el izquierdista Jean-Luc Mélenchon, con un 19,94% y 19,54%, respectivamente.

Largó la campaña

Esta mañana, el Partido Socialista francés, uno de los grandes derrotados en las elecciones, llamó a su militancia a votar por Macron e instó a toda la ciudadanía a hacer lo mismo para evitar que Francia “pierda su esencia”, en caso de ganar la ultraderechista Marine Le Pen.

“Está fuera de cuestión dejar que Francia pierda su esencia, porque se trata de eso: del alma de nuestro país!, indicó el primer secretario del partido, Jean-Christophe Cambadélis, tras una reunión de la Dirección en la que se respaldó esa postura “de forma unánime”.

Cambadélis dijo que Le Pen plantea no solo una salida de Francia de la Unión Europea, sino también de su propio modelo de República, y aseguró que su partido luchará estas dos semanas para frenar su avance.

Por su parte, Marine Le Pen cargó contra lo que denominó “ese viejo frente republicano podrido que ya nadie quiere”, en referencia a los partidos políticos tradicionales que llamaron a unirse para votar en su contra el la segunda vuelta electoral.

Entre los que han solicitaron el voto para Macron están el partido conservador Los Republicanos y el Partido Socialista, cuyos candidatos, Francois Fillon y Benoit Hamon, respectivamente quedaron ayer en tercer y quinto lugar.

El izquierdista Jean-Luc Mélenchon no lanzó una consigna de voto, pero su director de campaña, Manuel Bompard, afirmó anoche que era “obvio” que no lo iban a solicitar para Le Pen.

“No hay decepción, créanme”, añadió hoy Le Pen, quien dijo que su agrupación está “llena de esperanza y dinamismo”.

Al erigirse en la “candidata del pueblo” frente a la “globalización salvaje”, intenta atraer al electorado del izquierdista Mélenchon, al tiempo que prometiendo una “alternancia fundamental” busca seducir a los del conservador Fillon.

Aseguró también que los electores tendrán que elegir en la segunda vuelta entre la “desregulación total, sin fronteras y sin protección” y “las fronteras que protegen empleos, poder adquisitivo e identidad nacional”.

Su discurso fue breve y su mensaje, claro: “Lo que está en juego es la supervivencia de Francia”, proclamó.

Polémica por los festejos

Tras conocerse su triunfo en la primera vuelta electoral presidencial francesa y quedar así habilitado a competir en el balotaje del próximo 7 de mayo, el liberal Emmanuel Macron cosechó críticas por su celebración en una “brasserie” rodeado de famosos.

Las fotografías de Macron en actitud triunfal y rodeado de gente conocida no tardaron en ser comparadas con la velada del ex presidente Nicolas Sarkozy en el lujoso restaurante “Fouquet’s” el 6 de mayo de 2007, día de su victoria.

Aunque los precios en el restaurante “La Rotonde”, donde Macron celebró los resultados, son más reducidos y la lista de invitados del ex ministro de Economía también fue menos amplia, las críticas no tardaron en llegar, informó la agencia de noticias EFE.

“Macron de fiesta en La Rotonde. Atención: No nos olvidemos del Fouquet’s”, señaló un internauta en Twitter.

Para Sarkozy, su celebración en ese restaurante cimentó su criticada imagen de nuevo rico, aficionado al lujo y a la exposición pública de su vida privada.

Los reproches a Macron se extendieron además al hecho de estar de fiesta tras unos comicios en los que la extrema derecha, representada por Marine Le Pen, se aseguró también el paso a la segunda vuelta.

“No entendiste nada. (...) No creo que en el ‘Fouquet’s’ hubiera muchas secretarias, agentes de seguridad. Ese entorno parisino no me tiene que dar ninguna lección”, se defendió ayer el candidato.