Una leve mejora

Gabriel Rossini

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Sin mucho para festejar, el sector industrial del centro norte de la provincia mostró el segundo trimestre del año una modesta mejora en su nivel de actividad, mientras sus integrantes aguardan impacientes que las promesas de los funcionarios del gobierno nacional sobre una recuperación de la economía empiecen a reflejarse con más nitidez en los niveles de producción.

De acuerdo al Informe de Actividad Industrial Regional que elabora la Unión Industrial de Santa Fe, en el segundo trimestre de 2017 el crecimiento promedio de la producción fue del 1,2 por ciento respecto al mismo período de 2016 mientras que el nivel de la capacidad instalada alcanzó al 66,1 por ciento, un índice clave porque anticipa la necesidad de nuevas inversiones, mostrando también un leve repunte.

Si bien el nivel de actividad subió, como lo refleja el informe y admiten los industriales de la región, estos recuerdan que la comparación se hace sobre lo que ocurrió en el primer semestre de 2016, uno de los peores períodos de los últimos años o sobre el primer trimestre de 2017 donde la economía estaba casi paralizada y atravesaba uno de los peores momentos de los últimos dos años.

El repunte de la actividad se vio reflejado no sólo en la suba del uso de la capacidad instalada sino que además mostró signos de mejoría en el sector del empleo, que dejó de caer y en el período en cuestión tuvo una suba del 0,8 por ciento respecto al primer trimestre de 2017. El crecimiento del mercado laboral, de acuerdo al informe, se dio porque las empresas grandes incrementaron su personal a diferencia de las medianas y pequeñas que lo redujeron.

De acuerdo al relevamiento del centro de estudios de la UISF, el 14 por ciento de las empresas manifestó haber ampliado su personal contra el 20 por ciento que informó haberlo reducido. En tanto el 21 por ciento de las firmas consultadas trabajó con horas extras contra el 34 por ciento que las disminuyó.

Pese a las esfuerzos de los funcionarios del gobierno nacional para generar expectativas sobre una mejor segunda parte de año, la de los industriales del centro norte provincial no han variado para los próximos meses respecto a las que tenían en el primer trimestre de 2017: el 56 por ciento de las firmas consideró que su actual nivel de producción se mantendrá sin cambios, mientras que el 16 por ciento espera menor actividad. Aquí se redujo el porcentaje de empresas que esperan mejores resultados al 28 por ciento.

Tampoco son mejores las expectativas en cuanto a la incorporación de nuevos recursos humanos: casi dos terceras partes de las empresas no esperan alteraciones de significación y un 14 por ciento prevé pérdidas. Sólo el 21 por ciento de las firmas consultadas pronostica mejoras.

Este deterioro de las expectativas se ven reflejadas en la cartera de pedidos que reciben las empresas de parte de los clientes. Según el informe, durante gran parte del mes de julio de 2017 el 43% de las empresas que participan de la muestra consideraron como “decreciente” su nivel de demanda y un 14 por ciento como “decreciente de manera notoria”. En el otro extremo, el 20 por ciento de las firmas consultadas calificó como “creciente” la demanda de pedidos y el 8 por ciento como “creciente de manera notoria”. La caída de la demanda de productos, concluye el informe, es la principal preocupación de los empresarios del sector.

El repunte de la actividad se vio reflejado no sólo en la suba del uso de la capacidad instalada sino que además mostró signos de mejoría en el sector del empleo, que dejó de caer y en el período en cuestión tuvo una suba del 0,8 por ciento respecto al primer trimestre de 2017.