Tribuna política

¿Cambiar o “parchar”?

Por Jorge Horacio Gentile (*)

El presidente Mauricio Macri ha convocado a un amplio acuerdo nacional para hacer grandes cambios, a lo que nadie debería honestamente negarse, aunque algunos deban ceder algunas aspiraciones. Pero como cambiar no es lo mismo que “parchar”, el gobierno debería contestar algunas preguntas referidas a los posibles cambios institucionales, que en el discurso oficial aparecen relegados después de los económicos, tributarios o laborales, pero que parecen prioritarios.

En lo político

¿Se modificará el número de diputados que corresponde a cada uno de los 24 distritos, de acuerdo con el último censo de población, como exige la Constitución (Art. 45)? Para hacer justicia, entre otros, con Córdoba, que sólo elige 18; mucho menos que los 25 de la Capital Federal, y los 19 de Santa Fe, a pesar de que tienen menos habitantes.

¿Se adoptará el voto de preferencia? Por este sistema los que sufragan puede marcar a alguno/s de los candidatos, con el objeto de cambiar el orden de las listas, para que así suban, según la cantidad de preferencias que obtengan, y puedan acceder los mejores al reparto proporcional. Esto se hace en Brasil, está previsto en la Constitución de Córdoba -aunque nunca se reglamentó- y en la Carta Orgánica de la Municipalidad de Córdoba -pero la reglamentación exige un mínimo absurdamente alto de preferencias para cambiar el orden de los candidatos, lo que ha impedido que los ciudadanos lo usen. Esta modalidad le daría más poder a los que votan y se los disminuiría a los que hacen las listas de candidatos, que muchas veces priorizan a sus incondicionales.

¿Se adoptará el voto electrónico, como existe en Brasil, la India y en muchos condados de EE.UU.? ¿Se judicializará el manejo de las elecciones? Con ello se dejaría de privatizar y tercerizar con la empresa Indra el escrutinio provisorio, como ocurre desde 1997; y con MSA, de Sergio Angelini, que implementó la Boleta Única Electrónica en las últimas elecciones en la ciudad de Buenos Aires y de Salta.

¿Se reformará el sistema de elecciones primarias abiertas y obligatorias (Paso) para que dejen de ser una encuesta y participen sólo los partidos o alianzas que postulan más de un precandidato?

En la Justicia

¿Se transferirá al gobierno de la ciudad de Buenos Aires toda la Justicia “nacional” -equivalente a los tribunales provinciales de ese distrito- que son más de la mitad de las magistraturas del Poder Judicial de la Nación, que pagan todos los argentinos? De este modo estos Tribunales serán sostenidos sólo por sus únicos beneficiarios: los porteños.

¿Se cubrirá el tercio de vacantes de jueces que hoy tiene el Poder Judicial de la Nación?

¿Pagarán impuesto a las Ganancias los integrantes del Poder Judicial y del Ministerio público, nacional y de las provincias, como lo hacen los abogados y demás contribuyentes? La excepción debe limitarse a los jueces que juraron antes de 2017, como estableció la Ley 27.346, porque la Constitución (Art.110) prohíbe disminuirle sus haberes.

¿Se reemplazará el recurso de casación en contra de los fallos de los tribunales orales penales federales del interior del país, que resuelve la Cámara Nacional de Casación Penal de Buenos Aires, por otro de apelación ante las Cámaras Federales con sede en las provincias? Con ello se revisarían los fundamentos legales y de hecho, y no sólo los primeros, como ocurre con la casación, porque así lo exige la Corte Suprema desde el caso “Casal” de 2005. Y porque la Constitución dispone que los juicios criminales deben hacerse en las provincias donde se cometió el delito (Art. 118).

En la educación

¿Se implementará un examen a los alumnos que terminan el secundario?, como existe en muchos países actualmente, y evaluar así la calidad y defectos de la educación secundaria, para diagnosticar las causas del alto porcentaje de deserción escolar que hay a nivel segundario y universitario.

Las respuestas a estos interrogantes nos dirán si los cambios resolverán los grandes problemas que nos afectan.

(*) Es profesor emérito de las UNC y la UCC y fue diputado de la Nación.