Labor legislativa y políticas sustentables

Santo Tomé: quieren que el municipio proponga el uso racional del agua

El bloque de la UCR reclama una campaña de concientización y difusión que haga hincapié en la optimización de este recurso natural no renovable. Se espera que la llegada del Acueducto Desvío Arijón contribuya a un control más efectivo del consumo del vital elemento.

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Tanque central. La Municipalidad de Santo Tomé sigue acondicionando la red local de agua potable y todas las instalaciones existentes en la actualidad, a la espera de la habilitación del sistema de acueducto. Foto: Archivo El Litoral

 

Sergio Ferrer

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“Agua que no has de beber, déjala correr”. Así reza un antiguo refrán español. Daría la impresión de que en la ciudad de Santo Tomé, a los fines prácticos y racionales de los tiempos que se avecinan, la vieja sentencia, al margen de su real significado, podría sufrir un cambio sustancial. Y es que, más que dejar correr el agua, será imperioso saber administrarla de la mejor manera posible y controlar al máximo su distribución, sin “fugas” ni pérdidas excesivas. Así lo destacan los ediles radicales Mónica Zocco y Martín Giménez en una de sus iniciativas, donde resaltan la necesidad de preservar los recursos naturales no renovables, como el agua, porque es un elemento vital “que debemos cuidar entre todos”.

En su proyecto, los concejales solicitan al municipio santotomesino que proponga una campaña de concientización y difusión, que haga hincapié en las técnicas y los modos más adecuados para la optimización de su uso. Es importante, resaltan, generar conciencia en la comunidad y brindarles las herramientas necesarias para que incorporen con naturalidad y habitualidad algunas de las medidas que sirven para eficientizar el uso del vital recurso. Y remarcan la existencia de las “técnicas de uso eficiente del agua potable”, que son las medidas que sirven para extender por mucho más tiempo la disponibilidad de este recurso (el que, dado los costos de captación y potabilización, es limitado y debe preservarse), evitando la contaminación y el mal uso.

Entre las medidas que sirven para conservar y administrar mejor el agua, los legisladores mencionan la reutilización, la regulación, las campañas de educación y concientización, el mantenimiento de las redes de conducción, la correcta medición y la aplicación de tarifas o sistemas tarifarios acordes. También recuerdan que para que el programa de uso eficiente sea exitoso, debe contar con participación ciudadana, así como con el establecimiento de acciones de comunicación.

Sobre “fugas” y tarifas

Las acciones de comunicación podrían incluir avisos en los recibos de pago; campañas publicitarias en prensa, radio y televisión; anuncios en la vía pública y el sistema de transporte local. Paralelamente, en relación con la educación formal, podrían fortalecerse distintas iniciativas del nivel primario y el secundario, para enseñar cuestiones básicas, como el ciclo hidrológico. Además, podrían realizarse actividades prácticas para niños y jóvenes, que tengan que ver, por ejemplo, con el uso adecuado del agua en jardines, inodoros, duchas y lavaderos, entre otros.

En cuanto a las llamadas “fugas de agua de la red”, insisten en que hay que tener en cuenta que la mayoría de los dispositivos analizados, exteriores o interiores, aumentan su descarga en relación directa con la presión. Por ende, en aquellos lugares donde ésta sea alta se recomienda utilizar válvulas reductoras de presión, logrando disminuciones en el consumo de agua de hasta un 10%. Por eso, medir es la clave en cualquier acción de uso eficiente del agua. Así se puede conocer la realidad y ello lleva a establecer modelos para predecir y planear mejor el futuro, mediante una visión integral (el agua “no contabilizada” constituye uno de los principales problemas, porque una parte importante del líquido elemento se pierde).

A raíz de la llegada del Acueducto Desvío Arijón (el reemplazo del agua actual por la del acueducto todavía no tiene fecha de concreción), el municipio santotomesino ha planificado la colocación de nuevos medidores en los hogares (la red existente será aprovechada en su totalidad), para contribuir a un control más efectivo del consumo. Las tarifas son una parte fundamental en los programas de utilización eficiente del agua potable, porque ayudan a ahorrar dicho recurso, especialmente si en su estructura reflejan el costo real.

Estrategia a largo plazo

En su proyecto, Mónica Zocco y Martín Giménez recuerdan que sólo el 0,003% del volumen total del planeta es agua dulce disponible para el hombre y que existe legislación a nivel mundial tendiente a reglamentar su utilización para conservarla. En consecuencia, describen lo que podría ser una posible reglamentación para el uso eficiente del agua en la ciudad, de acuerdo con los lineamientos que imperan en el mundo, donde ha ganado espacio como estrategia a largo plazo, que implica acciones en diferentes niveles.

En términos generales, toda legislación para el uso eficiente del agua contiene estos aspectos: la responsabilidad institucional para la conservación del recurso hídrico; la regulación del uso del agua propiamente dicha; los estándares de calidad en plomería; las guías de planificación para el desarrollo de nueva infraestructura. A su vez, contempla lo relacionado a gestión sostenible de las concesiones de agua y herramientas para realizar balances hídricos, así como las normas que reglamenten el tratamiento de agua potable y aguas residuales.

El agua, aclaran los ediles, tanto en cantidad como en calidad, es un elemento fundamental en el mantenimiento del equilibrio de los diferentes ecosistemas. Es preciso considerar estas relaciones al proyectar y desarrollar gran parte de las actividades humanas, con el fin de conservar el ambiente y hacer un uso sostenible de estos recursos.

Pedido del municipio

La Municipalidad de Santo Tomé está solicitando la colaboración de los vecinos para racionalizar el consumo de agua corriente en los domicilios. El pedido responde al aumento en la demanda del servicio debido a las altas temperaturas y los cortes de energía eléctrica que afectaron el normal funcionamiento del sistema. Al respecto, la secretaria municipal de Obras Públicas, Mariana Albornoz, recordó que “la ciudad sufrió cortes de energía eléctrica que provocaron una serie de inconvenientes en el funcionamiento de nuestros tanques”. “Esto hizo que, por momentos, los mismos no contaran con la cantidad de agua necesaria para prestar el servicio con la presión adecuada”, añadió.

La funcionaria también resaltó la rotura de un caño del sistema de distribución, a la altura de las calles Corrientes y Colón, que también afectó la normal presión del suministro hasta tanto fue solucionado. En virtud de las situaciones descriptas, Albornoz hizo un pedido “para que los ciudadanos nos ayuden en el control del consumo, haciendo un uso racional del agua”. En este sentido, instó a “evitar tareas innecesarias como el riego de las calles y veredas y el lavado de vehículos utilizando manguera, como así también a conservar con productos químicos el agua de las piletas, a los efectos de prolongar su utilización”.