Antonio Bonfatti

“Cuando pensamos en Contigiani, no estaba en agenda el aborto”

El presidente de la Cámara de Diputados defendió la postulación y dijo que no fue suya la decisión, sino “de los cuerpos orgánicos, y por unanimidad”. Habló de candidaturas y advirtió que “en política, todo vale”. Negó haberle “soltado la mano” a Hugo Tognoli, y discrepó con la Ley de Narcomenudeo. “Jamás transaría con las bancas narcos”, afirmó.

Ivana Fux

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Antonio Bonfatti defendió la decisión del socialismo de haber elegido oportunamente a Luis Contigiani como candidato a diputado nacional. La posición personal del legislador en contra de la despenalización del aborto derivó en una reacción de Alicia Ciciliani que llegó a pedirle la renuncia a la banca. “Fue la mejor decisión en ese momento”, dijo Bonfatti a El Litoral, aunque admitió que no imaginaban que la ley votada este jueves pudiera aparecer en la agenda.

—¿Fue un error aquella candidatura?

—Es como si yo le diría después de mirar el partido que el arquero se tiró para el otro lado. En su momento fue la persona que nos representó como Frente Progresista, en el sentido de que era quien mejor llevaba adelante todas nuestras propuestas. Y bueno, no se consideró obviamente el tema del aborto.

—¿No se pensó que ese tema podía llegar a debatirse?

—No, no estaba como tema de nadie, de nadie.

—¿Y si se hubiese sabido?¿Contigiani no hubiese sido el candidato?

—No se puede mirar para atrás cuando hacemos análisis de este tipo.

—¿Defiende aquella postulación, entonces?

—Fue la mejor decisión que tomamos en su momento.

—¿Lamenta el desenlace?

—Luis es un diputado del Frente Progresista, propuesto por el Partido Socialista. Claro que uno hubiera preferido seguir los lineamientos históricos del partido; Alicia Moreau de Justo planteó en 1924 la necesidad de la despenalización, pero es una situación que no pudimos evitar.

—¿Fue intolerante Alicia Ciciliani cuando dijo que Contigiani debía renunciar?

—No me gusta hacer consideraciones sobre dimes y diretes.

—Fue la declaración de una ministra; no un ‘dime y direte’...

—Un ‘dime y direte’. Los cuerpos orgánicos son los que toman las decisiones y hay que respetarlas. Para eso existe la democracia interna.

—Ciciliani le atribuyó la responsabilidad de haberlo elegido como candidato. ¿Se hace cargo de eso?

—Soy presidente del Partido Socialista a nivel nacional; y cada distrito del cual también soy parte, proponía a sus candidatos. (Contigiani) fue aceptado por unanimidad.

—¿Fue un desacierto llamar Partido Socialista al bloque de Contigiani?

—Fue aprovechar la circunstancia de que estaba la histórica oficina del bloque Socialista y, obviamente, nos dignificaba su postura frente a tantos temas. Nos parecía bueno que hubiera una voz que expresara lo que sostenía nuestro partido.

—A la luz de las tensiones generadas ¿se arrepiente de haber promovido esa candidatura?

—Fue el mejor candidato elegido. No se puede volver para atrás la rueda de la historia; hay que seguir construyendo. Las tensiones como todas las cosas, se diluyen; las heridas se restañan. Hay que ceder de las dos partes, y tener respeto de las diferentes posiciones. Dentro del Frente hay quienes están en contra de la despenalización del aborto y hay que respetar eso.

Candidaturas

—En una entrevista anterior y respecto de una candidatura suya a gobernador, había dicho que acataría la decisión de su partido. ¿Lo será si el partido se lo pide?

—Son decisiones que tomará el partido en su oportunidad y me atengo a eso.

—Por eso, ¿si se lo pide?

— Me atengo a lo que el partido decida.

—¿Empieza en breve a caminar la provincia?

—Estoy siempre caminando la provincia. Soy presidente de la Cámara de Diputados y visito distritos por esa condición. Lo seguirá haciendo.

—Se habló hasta de un compañero de fórmula: Emilio Jatón. ¿Qué es eso?

—Un disparate de algún afiebrado.

—¿Imagina un esquema donde Bonfatti sea candidato a gobernador y Miguel Lifschitz primer diputado provincial?

—No me imagino nada porque las candidaturas no están definidas aún. Son mentes alocadas y afiebradas las que hablan de eso. No me voy anteponer a hechos que aún no están discutidos.

—¿Sería válido que Lifschitz repitiese su mismo esquema, cuando dejó de ser gobernador y fue candidato a diputado?

—En política todo vale. Siempre uno se puede presentar a cualquier candidatura. Yo fui gobernador y después me presenté como candidato a diputado; alguien me dijo ‘cómo de obispo se puede pasar a ser cura’... Bueno, puedo ser monaguillo también. No tengo ningún problema. También puedo irme a mi casa.

—No se va a ir....

—¿Por qué no?. En algún momento.... Ya me fui muchas veces a mi casa a trabajar de médico..

Reforma

—¿Se enfrió el proceso de reforma de la Constitución?

—Han pateado la pelota para cuatro sesiones hacia adelante, lo cual demuestra la poca intención que tienen algunos integrantes de la oposición de sacar esto adelante.

—¿Cierra 2018 sin ley aprobada?

—No sé. Vamos a seguir insistiendo. Esperemos seguir avanzando. La necesidad de la reforma es algo que tenemos que seguir empujando todos porque Santa Fe merece otra Constitución.

—¿Si no sale es responsabilidad de la oposición o dentro del oficialismo hay todavía resistencia?

—No es fácil obtener los dos tercios de cada cámara. Pero lo seguiremos intentando..

Narcomenudeo

—¿Está de acuerdo con la Ley de Narcomenudeo?

—Hay que abordarlo en la complejidad del tema. Si ponemos parches, volvemos a creer que con eso solucionamos las cosas. Creo en lo que está haciendo Portugal, por ejemplo, que es la despenalización para el consumo pero a su vez, la persecución del traficante; y abordar al que consume desde la salud pública. Lo otro es seguir engañándonos pensando que hay una medida que va a solucionar el tema. Mientras haya consumo seguirá habiendo droga y mientras haya droga, seguirá habiendo tráfico. Lo que hay que eliminar es al narcotraficante.

—¿Que no se elimina con una Ley de Narcomenudeo?

—No, porque lo que tenemos que hacer más es tratar de coordinar esfuerzos entre provincias, municipios y Nación. Y hoy existe una mesa de diálogo y articulación que está permitiendo avanzar. Hay que ir al tema de fondo.

—Hoy el gobernador promueve esta ley y en su momento la votó en contra ¿Es coherente?

—Uno puede cambiar de opinión en la medida que busca alternativas... No sé si es coherente o incoherente; digo que abordemos el tema desde la complejidad que tiene.

Caso Tognoli

—¿Qué sensación le quedó después de la liberación de Hugo Tognoli?

—Nunca opinamos antes de que se expidiese la Justicia. En este país se condena, se hace mucha alharaca en torno de eso, y después se juzga. Fuimos prudentes cuando apareció aquella denuncia de un medio periodístico. Pasaron muchas cosas: la intervención de los fiscales y Gils Carbó, las denuncias por la venta de bebés, el atentado a mi casa, la computadora de Luis Medina y el mote de narcosocialistas. Fue una campaña orquestada para denostarnos. Y de esto no nos olvidamos.

—Tognoli dijo que el poder político le soltó la mano ¿Qué tiene para decir?

—No, soltar la mano, no. Que rinda cuentas en la Justicia. Y lamentablemente la Justicia tuvo preso cinco años a alguien cuando a los dos años, si no tenían pruebas, debían dejarlo en libertad. No es soltar la mano, porque yo no soy juez. Cómo voy a dar un respaldo yo si no sé si los hechos son verídicos o no. Para eso está la Justicia.

—¿En algún momento las bandas narco de la ciudad de Rosario obligaron al Partido Socialista a “negociar” para ver cómo se seguía?

—Jamás vamos a transar con ninguna organización criminal. En muchos lugares se hace, y a veces se logra con eso más calma. Pero la droga se sigue consumiendo. Jamás vamos a negociar con organizaciones criminales.

—Jamás negociaría ¿pero alguna vez alguna banda intentó hacerlo con ustedes?

—De ninguna manera. Y no sigamos denostando a Rosario como si fuera diferente al resto del país. Es exactamente igual, con la misma forma de venta de narcomenudeo como las hay en la Argentina y en todos los países del mundo.

“Lo de Tognoli fue una campaña orquestada para denostarnos. Y de esto no nos olvidamos”. Foto: Flavio Raina