A punta de cuchillo
Violento asalto a comercio en Aristóbulo del Valle
A punta de cuchillo
Violento asalto a comercio en Aristóbulo del Valle
Ocurrió en el poli-rubro Mix House (A. del Valle 6400). Se llevaron gran cantidad de mercaderías
El negocio asaltado está ubicado en la esquina de A. del Valle y J. P. López.
Foto: Danilo Chiapello
Danilo Chiapello
Dos osados delincuentes concretaron la noche del miércoles un violento asalto contra un negocio en plena avenida Aristóbulo del Valle, donde robaron gran cantidad de mercaderías.
El episodio significó un drama singular para la encargada del comercio que hasta debió soportar la presión de una cuchilla en su estómago.
La secuencia se inició cerca de las 21.30 en momentos que Verónica se disponía a cerrar el polirubro Mix House, ubicado en la intersección de Aristóbulo del Valle y J. P. López.
Fue en dicha circunstancia que de repente aparecieron en escena dos sujetos, los que se conducían a bordo de una motocicleta.
* “Los tipos aparecieron de golpe y de un empujón me tiraron adentro del local. Yo me caí al suelo, entonces uno de ellos me apoyó una navaja en el abdomen. Me decían ‘dame toda la guita”, narró la mujer en diálogo con El Litoral
Una vez adentro del inmueble los desconocidos mostraron lo peor. Comenzaron a requisar todo mientras no cesaban con sus amenazas a la encargada.
Pasaron del otro lado el mostrador y fueron por la caja registradora. Sin embargo al no encontrar dinero pusieron en marcha su ‘plan b’. Decididos a no salir con la manos vacías arremetieron contra las mercaderías.
* “Agarraron las bolsas del negocio y se pusieron a cargar de todo. Desde pelotas de fútbol, juguetes, en fin... se llevaron de todo”, precisó la mujer.
Al cabo de algunos minutos, los malvivientes dieron por culminada su labor. Se subieron a la moto y escaparon a toda velocidad.
Desesperada la titular del comercio salió a la calle a pedir auxilio. Sin embargo se encontró con otra cruel realidad. A esa hora la vía pública lucía desierta, con poca luz y sin ningún policía cerca.
* “La verdad que fue aterrador. La mayoría de los comercios estaban cerrados. Sólo unos pocos autos que pasaban. Después cuando fui a hacer la denuncia le comenté esta situación al comisario. No puede ser que se corra tanto peligro al momento de cerrar el negocio. Alguien tiene que estar para protegernos”, explicó.
“A la noche esta zona queda desprotegida. Salí a pedir auxilio y no encontré a nadie”, dijo Verónica, la víctima
Foto: Danilo Chiapello