Claudio Corvalán, el que eligió Leo para reemplazar a Bottinelli...

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Mar del Plata)

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Domingo nublado, inestable, de regeneración y descanso para Unión. Quedó atrás el segundo amistoso. Aldosivi fue la medida y se ganó. Pero como decíamos luego del empate con Santamarina, el resultado es lo de menos. Sirve ver el funcionamiento, saber qué se tiene y qué es lo que está faltando. El diagnóstico de Madelón está claro: la escasez de profundidad, el poco poderío ofensivo es lo que ocupa al entrenador. Quizás ahora un poco más tranquilo porque tiene a dos jugadores como Cuadra y Mazzola, que le lavarán la cara eso se espera- al equipo de mitad de cancha hacia arriba. O mejor dicho, en los últimos metros, donde la salida de Gamba primero y el declive posterior de Soldano, hicieron que se convierta en el sector de la cancha que arriaba las principales preocupaciones del entrenador.

Pero se le ganó a Aldosivi. Y ganar ayuda, levanta el ánimo y es la consecuencia de algo que se hizo mejor que el rival. Y el gol lo hizo Claudio Corvalán, a quien Madelón le dio una misión: ocupar el lugar que momentáneamente está dejando libre Bottinelli por su molestia. Pero más allá de contar con alternativas en el plantel, como Blasi (al que está ocupando como lateral más que como central), Madelón prefiere apostar a una receta tradicional y elige un zurdo para jugar de “6”. Y confía en que Corvalán al que trajo de lateral para que compita con Bruno Pittón- le pueda dar soluciones. Y lo hizo en estos dos partidos, contando con chances de jugar ante Boca si es que no se recupera Bottinelli.

—¿Cómo ves al equipo, Claudio?

—Ganar siempre es bueno, a pesar de que no es lo más importante en un amistoso. En mi caso, tengo que aprovechar la oportunidad que me da Leo, entrenar al máximo y serle útil. El objetivo nuestro es River. Eso lo tenemos claro.

—¿Y en tu caso?

—Yo estoy para ayudar, el equipo ya estaba armado cuando llegué y soy consciente de que tengo que sumar. Si Leo me pide que juegue de segundo marcador central jugaré y si no, lo haré de lateral. Yo quiero ganarme un puesto en el equipo. Es lo que busco. Veníamos de varios partidos sin poder ganar, así que está bueno que lo hagamos en un amistoso. ¿El gol?, es lo que menos importa, fui yo como podría haber sido otro, lo importante es que alguien lo convierta.

—El miércoles hay que jugar con Boca, que no es un rival más. ¿Se apunta a River entonces?

—Seguro. Boca es muy importante pero nosotros estamos enfocados en remontar puestos en la Superliga y pasar de fase en la Sudamericana.

—Madelón les pedía que jugaran más corto y elástico. ¿Qué quiere decir?

—Que tenemos que volver a ese Unión histórico que dio tan buenos resultados. Yo llegué hace poco, apenas seis meses. Lo que buscamos es recuperar el ADN que identificó a este plantel en los mejores tiempos. Y lo que buscamos es solidificarnos atrás, porque arriba seguramente alguien la va a meter. Veo a Leo muy bien, contento, él quiere que nosotros crezcamos y hay que aprovechar.

—¿Qué le dijiste a Franco Soldano cuando se fue?

—Cuando yo llegué estaba casi vendido y es bueno para él que se haya ido y también para el club. Para mí fue una buena venta. Ahora hay que aprovechar a los muchachos que quedaron y a los que vienen para reemplazarlo, porque son ellos los que harán que su ausencia no se note.

—¿Es imposible pelearle a los grandes en el fútbol argentino?

—Para mí, no. El caso es Defensa y Justicia, que tiene varios partidos menos y en condiciones de alcanzar a Racing o superar a Boca o a River. Los grandes tienen la posibilidad de llevar a los jugadores de jerarquía, pero eso se puede reemplazar con trabajo colectivo. Cualquiera le puede ganar a cualquiera en este país. Fijáte que en la Copa Argentina, Gimnasia le ganó a Boca y a River.

—En la cancha son 11 contra 11. ¿Hablan en la intimidad del grupo que la jerarquía se va a los clubes poderosos y que se debe contrarrestar de alguna manera?

—Seguro. Pero esto no es propiedad de Argentina, sino que en todos los países del mundo, los mejores jugadores se van a los grandes clubes. Por eso los buenos de acá se van a Europa, porque quieren crecer.

—¿Sudamericana por encima de la Superliga, al revés o los dos a la vez?

—La Sudamericana es histórico para el club, por eso no podemos ir a Ecuador a pasear. Tenemos que ir a ganar, a pasar de fase y a que el club se pueda mostrar. A nosotros también nos servirá mucho la Sudamericana, pero también somos conscientes de que tenemos que remontar en la Superliga. Por eso, el primer gran objetivo para nosotros se llama River y ese partido del 23. Iremos paso a paso, primero poniendo atención en la Superliga y luego, cuando llegue el momento, haciendo un buen papel en la Copa.