Hizo todo lo posible para no seguir

Julio Comesaña murió en Colón de “muerte natural”

Se peleó con los colaboradores —está lleno de alcahuetes dijo—, con los jugadores titulares (“tienen miedo”) y con los jugadores suplentes (“no tengo a Messi ni Maradona en el banco”). Y le faltó el respeto al club, a sus colores y a la gente.

Se le vino la noche. Le dejaron pasar una (“alcahuetes”), dos (“miedosos”) y hasta tres cuando dijo “no tengo a Messi ni Maradona”. Pero cuando se metió con el nombre del club, con los colores y con el sentimiento de la gente, se despidió solito de Colón. Un fracaso rotundo pocas veces visto, pero esta vez no por culpa de un resultado o del juego. Duró cinco fechas. En realidad, duró lo que intentó durar. ¿La realidad?: siempre declaró para irse.

Foto: Manuel Fabatía