Es precandidato al Legislativo local por “Igualdad y Participación”

Azcurrain: la “bici” como punta de lanza en su carrera al Concejo

Asegura que la bicicleta es un elemento simbólico para el cambio de paradigmas porque iguala a las personas, las hace más saludables y amigables con el ambiente. Critica al FPCyS en su política fiscal, y en materia de seguridad. De acceder a una banca plantearía un sistema integral de movilidad urbana y pavimento articulado para todas las calles intransitables de la ciudad.

12_JOAQUIN AZCURRAIN.jpg

“La bicicleta es una actora central en lo que es la mejora en la transitabilidad dentro del ejido urbano”, dice el precandidato al Concejo.

Foto: Gentileza

 

Luciano Andreychuk

[email protected]

Twitter: @landreychuk

“Sí dale, charlemos. Estoy volanteando acá en una esquina de Fomento 9 de Julio, pero no importa”, convida al teléfono Joaquín Azcurrain (39), conocido en la ciudad por su fervorosa defensa de la bicicleta como medio alternativo de transporte. De hecho, el lanzamiento de su lista por “Igualdad y Participación” —espacio al que pertenece— fue con una gran pedaleada. Y su slogan de campaña en la carrera al Concejo es #LaBiciAlConcejo, así como se lee, con el hashtag que se utiliza en las redes sociales.

Azcurrain integra el espacio de Rubén Giustiniani (que encabeza la lista de diputados provinciales) y Claudia Catalín, que irá como candidata a senadora por La Capital. Es algo así como un “socialista disidente”: su sector político no forma parte del Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS) y tiene varias críticas para hacerle a la coalición que gobierna la provincia: el Pacto Fiscal firmado, la política de “tarifazos” y la seguridad.

Las diferencias entre el socialismo y el FPCyS surgieron en 2011. “Esas diferencias se profundizaron y nos llevó a conformar Igualdad y Participación. El Frente tomó decisiones desacertadas que nosotros no acompañamos, y que tampoco están encuadradas dentro de los principios del Partido Socialista y la Socialdemocracia”, dice el precandidato en diálogo con El Litoral.

Sus críticas: “la firma del Pacto Fiscal de Provincia con el Gobierno de (el presidente Mauricio) Macri, pacto que hoy tiene atado de pies y manos (a la administración de Miguel Lifschitz) respecto de las políticas salariales, por ejemplo; el esquema de ‘tarifazos’ provinciales, que no se diferencian demasiado de las medidas tomadas por Nación. Y la seguridad, que es una demanda de todos los santafesinos, y que en 12 años el FPCyS no ha logrado marcar un rumbo”, fustiga.

Violencia vial

—¿Por qué la bici como caballito de batalla de campaña?

—Es el slogan que es resume todas nuestras propuestas de cara a la ciudad. La bici como punta de lanza para debatir en serio el ordenamiento vial que claramente necesita Santa Fe. La bici es una actora central en lo que es la mejora en la transitabilidad dentro del ejido urbano. Hay áreas urbanas muy conflictivas, y el centro es una de ellas. También hay otros “nudos” de conflicto vial, como la Costanera o Aristóbulo del Valle y Galicia.

Con todo, se generan situaciones de violencia vial que hay que subsanar. Entonces, pensamos en un ordenamiento de las áreas de circulación integral, conectando las ciclovías, repensando todos los subsistemas, incluido el transporte por colectivos. Además, la bicicleta es democrática, es ecología y salud.

Tenemos en carpeta además la producción de huertas agroecológicas, y la promoción de ferias con productos artesanales. Venimos trabajando con productores y estamos armando un proyecto de ordenanza que plantea la posibilidad de hacer ferias barriales, donde se da la intermediación directa entre quien produce y quien consume.

“Otro punto que planteamos para llevar al Concejo es el espacio público”, plantea Azcurrain. “Es decir, reformular cómo generar nuevos parques y plazas, sobre todo en los barrios. Hay problemas en Parque del Sur y Garay, por ejemplo. Y de cuidar los espacios que ya tenemos, por supuesto. Con pequeñas reformulaciones en el diseño de las áreas verdes se puede mejorar la movilidad entre plazas y parques, y con esto la convivencia, volviéndolos atractivos para la gente. Hay que incluir bebederos, bicicleteros, baños, iluminación, hasta asadores”, explica Azcurrain.

Servicios

—Con respecto a dos de las principales preocupaciones de la ciudadanía santafesina sobre servicios esenciales, como en transporte por colectivos y la recolección de residuos, ¿cuáles serían sus propuestas superadoras?

—Respecto del primer punto, el sistema de concesiones precarias para las empresas evidentemente no ha resultado: hay problemas en el estado de los coches y faltan unidades, las frecuencias no son las suficientes, las trazas de recorrido hay que rever, principalmente en la conexión este-oeste de la ciudad.

La solución es llamar a licitación pública del transporte de pasajeros por colectivos, como ocurrió históricamente en Santa Fe, y dejar de mantener este nivel de precariedad. Porque esto sólo le conviene a los empresarios y a los funcionarios del área que corresponde del Municipio.

En este caso, queremos crear un nuevo marco normativo para el sistema de transporte público, incluyendo audiencias públicas donde la gente pueda opinar sobre el servicio en sí y, también el costo del boleto. A la gente la enoja ver que paga un boleto caro por un servicio que es malo.

“Y sobre la recolección de residuos, hay que rever todo el sistema”, enfatiza. “Vecinos de barrios periféricos nos comentan que los camiones recolectores no pasan, y esto tiene estrecha relación con el estado de la calles. En este punto, daremos a conocer una propuesta que busca armar una cooperativa (municipal) de pavimento articulado para pavimentar las calles intransitables. El pavimento articulado cuesta un tercio de lo que vale el pavimento común. En algunos sectores de la ciudad, llueve un poquito y no entran ni los colectivos, ni los camiones recolectores, ambulancias ni patrulleros.

Pros y contras

Sobre de las gestiones radicales en la ciudad, “creemos que éstas mejoraron el semblante de la ciudad. La gente que viene de afuera dice lo linda que está la ciudad, eso es cierto. El sistema de desagües es un punto a valorar también, y los 17 jardines municipales, otro punto a favor. Esa política en educación inicial es algo que cualquier político quisiera tener. Lo mismo con las Escuelas de Trabajo”, pondera Azcurrain.

Ahora bien, “hay sectores que siguen postergados, como el centro-norte y el oeste, donde hay barrios enteros que no tienen la misma urbanización ni una mínima llegada del Estado municipal, ni tampoco del provincial. Hablo de la falta de cloacas, iluminación, cordones cunetas”. Otro punto flaco es que “la gestión municipal haya priorizado las obras entre los cuatro bulevares; aunque son necesarias, llevaron a un descuido tremendo en el estado de las calles en los barrios. De llegar al Concejo, pensamos en generar un fondo específico de reparación del sistema vial”, cierra el precandidato.