Señal de alerta
Arroz: la menor producción de los últimos diez años
Dos distritos. En el departamento Garay la superficie cosechada fue de 10.500 ha y en el departamento San Javier 17.500 ha.
Foto: Archivo
Campolitoral
Finalizó el ciclo del cultivo de arroz campaña 2018/2019, con más de una dificultad que repercutió en los resultados: el rendimiento promedio fue inferior en 1.000 kg/ha y de 16.500 toneladas de producción menos, que la campaña anterior.
Por otra parte, tanto la producción total de arroz como la superficie cosechada alcanzaron su punto más bajo de los últimos diez años: 154.000 toneladas totales y 28.000 hectáreas respectivamente.
A los problemas por las copiosas lluvias entre noviembre y enero, se sumaron a nivel económico, el movimiento del dólar que provocó incertidumbre en el productor, teniendo en cuenta la cotización de los agroquímicos y la fuerte suba del gasoil. Además, como consecuencia de la situación climática, se produjo el corte de la ruta provincial Nº 1 aislando a los productores al norte de Colonia Teresa (localidad donde puntualmente se ocasionó el corte).
La prolongación de la cosecha -por las malas condiciones climáticas-, provocó la disminución de la calidad del grano y la cantidad de kg/ha, sumándose el daño y el perjuicio que día tras día generaron las aves - patos, bandurrias, entre otras.
Finalmente, la cosecha terminó a principios de mayo. En el departamento Garay la superficie cosechada fue de 10.500 ha y en el departamento San Javier 17.500 ha.
Los rendimientos finales de la campaña 2018/2019 fueron de 5.500 kg/ha arroz largo fino y 4.200 kg/ha arroz largo ancho.
En el terreno comercial, el informe señaló que los precios internacionales fueron bajos: U$ S 170/tn de arroz con cáscara, “más el impuesto distorsivo de $ 4/U$ S exportado” y una escasa a nula variación del precio a nivel local de $ 7,00/kg $ 7,50/kg.
Estos datos, evidencian un panorama muy pesimista en el sector por falta de rentabilidad. “De no producirse cambios sustanciales, a los productores que no estarían integrados a la industria, les resultaría muy difícil la subsistencia. Ante ello la tendencia a disminución de futuras áreas de siembra en la campaña venidera 2019/2020, sería una realidad”, concluyó el documento realizado por la Bolsa santafesina.
