Tribuna de opinión

La igualdad ficticia

Por Pía Lombardo (*)

Nos hicieron creer que garantizaban nuestros derechos, nos hicieron creer que sostenían la bandera de la igualdad de género, la respetaban y la protegían.

Nos hicieron creer que ellos creían que los hombres son iguales a las mujeres, pero no.

Aun sancionadas leyes nacionales allá a principios de los 90, donde se intentaba acercar a las mujeres a ese sector de privilegios de los hombres, al ámbito de lo público, a los espacios de toma de decisiones, a poder participar en mejores condiciones de la integración de las listas, para garantizar el acceso a las bancas a disputarse, resultó ser todo una farsa con forma de ley.

Luego del resultado de las elecciones generales en la provincia de Santa Fe, la Alianza Cambiemos obtuvo una cantidad de votos suficientes para alcanzar 5 escaños dentro de la categoría de diputados provinciales. De acuerdo al armado de la lista, solamente 1 de estos 5 diputados electos es mujer. Representando el 20% de la totalidad de los diputados entrantes por la alianza Cambiemos, en evidente desventaja con el 80% de hombres.

Ahora bien: si tenemos una ley nacional que impone el 30% de “cupo femenino” para integrar las listas, y luego una ley y dos decretos provinciales, uno de ellos que literalmente dice: “con posibilidades de resultar electas” y que se apoyan en las metas declaradas como objetivo en el Plan de Acción aprobado por la 24ta. Asamblea de Delegadas de octubre de 1988 (Organización de Estados Americanos / Comisión Interamericana de Mujeres: Resolución CIM Nº 123/88) que dispuso: “Establecer mecanismos que aseguren la presencia de las mujeres en los parlamentos”; hemos solicitado sean respetadas estas normas, pero fue rechazada mediante una resolución que no soporta la crítica, utilizando un laberinto de tecnicismos que no logran fundamentar por qué a Cesira Arcando no le corresponde ser diputada electa. Si no se encuentra respetado el mínimo establecido por ley; ¿dónde está el Estado de Derecho? ¿el que dijo ser garante de los derechos humanos?

Es preocupante que durante la campaña todos y todas hablen de la igualdad de género, las luchas feministas, la necesidad de respetar los derechos de las mujeres como también otros grupos minoritarios vulnerables, pero cuando debe realmente alzarse en voces y pedidos de aplicación justa de las leyes, hay un silencio ensordecedor.

La media sanción de igualdad de género en la Cámara perdió estado parlamentario por falta de compromisos, por ser tibios al momento de decidir, por no querer que las mujeres tengamos los mismos derechos que ellos. Por miedo.

Hoy, año 2019, vivimos en muchos aspectos como en 1819. Hace días se festejó la Independencia de nuestro gran país; ¿cuándo vamos a festejar la independencia de las mujeres? ¿Cuándo vamos todos a luchar por la igualdad real y dejar de decir que ésta es la era de las mujeres? Si hubiera igualdad ni siquiera debería estar escribiendo esta nota de opinión.

(*) Ex candidata a concejal por Cambiemos