Internet de las cosas para el campo

Apicultura a través de la nube

Un productor apícola instaló sensores que permiten monitorear la actividad productiva dentro de sus colmenas en tiempo real. En la zona rural de Colonia Belgrano, Internet de las Cosas debuta como una promesa de eficiencia, mientras hace realidad el anhelo de la conectividad rural.

missing image file

A campo. Esta semana instalaron los sensores en las colmenas. Fotos: Campolitoral

 

Federico Aguer/ Juan Manuel Fernández

[email protected]

En Argentina, el 80% de los apicultores posee menos de 200 colmenas. Cada una precisa de un cuidado y un monitoreo periódico. Entre ellos, el que el apicultor regularmente deba comprobar el estado de cada colonia para potenciar su producción. Con los costos del combustible, es una variable que se ha disparado, y que obliga a buscar alternativas de monitoreo remoto.

Con esa premisa, un grupo de jóvenes profesionales que ven que el campo es un horizonte sin límites para desarrollar tecnologías adaptadas a la producción, decidieron poner manos a la obra.

“El monitoreo de las colmenas permite potenciar el impacto que tiene la apicultura en la biodiversidad ambiental”, asegura Bruno Fernández de Aracil, fundador del emprendimiento que lleva por nombre “Bee Honey”, el que no sólo reduce las visitas a campo y optimiza la producción por colonia, sino que además le permite al apicultor actuar rápidamente ante cualquier eventualidad.

Y agrega que la apicultura registra una baja productividad por colmena, fruto de prácticas intuitivas. De hecho, “la gran mayoría de los apicultores basan su gestión utilizando su experiencia. Si bien es útil en sucesos puntuales, la falta de información y análisis provocan bajos rendimientos por colmena”. Por eso, este desarrollo permite tomar acciones fundadas mediante la recopilación del dato y posterior procesamiento, incrementando los kilos de miel producidos por colmena. “Sobre las abejas recae la responsabilidad de la polinización del 70% del planeta”, enfatiza.

De que se trata

“Arrancamos hace 2 años con la idea de ofrecer soluciones a las industrias. Formamos un equipo de 7 personas entre ingenieros y programadores. Investigamos una nueva tecnología llamada LoRa, que permite conectar dispositivos a grandes distancias de hasta 15 km. con un consumo de energía muy bajo, y que permite ofrecer soluciones donde antes no había cobertura”, destaca este joven Ingeniero Civil.

También le explica a Campolitoral que la idea fue desarrollar soluciones tecnológicas adaptadas a cada industria a través del control y la gestión. “Diseñamos dispositivos equipados con sensores y conectividad a internet que te permiten comprobar el estado de tus bienes de manera remota a través de plataformas web y mobile. Contamos con un sistema de alertas que te notifica ante cualquier cambio inusual en las variables, ayudando a detectar los problemas rápidamente y en muchos casos incluso a prevenirlos”.

Finalmente, los especialistas en Data Analytics y Machine Learning procesan los datos recolectados para brindar proyecciones, recomendaciones de gestión, diagnósticos, entre otras características para ayudar a tomar decisiones mejor fundadas.

 
missing image file

Equipo. Los desarrolladores se ilusionan con nuevas adaptaciones para el tambo y los silobolsa.

Un paso adelante

“Es hora de dar el paso hacia un mundo más inteligente”, insiste, y lo propone a través de herramientas concretas. Según Bruno, el monitoreo constante y remoto de las colmenas reduce los costos y aumenta la productividad. De hecho, Internet de las Cosas (Internet Of Things o IOT) tiene el potencial de cambiar nuestras vidas radicalmente. “Históricamente, las empresas debían realizar grandes inversiones de dinero y tiempo para modernizarse, pero esto ha cambiado. IOT permite que a través de un consumo energético óptimo podamos relevar variables de importancia para los productores de manera económica”.

El dispositivo “Bee Honey” se inserta debajo de la colmena para revelar datos como temperatura, humedad y peso, que permiten empezar a investigar el foco de enfermedades y a la vez mantener información de la producción. Uno de los problemas más comunes es el robo de las colmenas, y el equipo le advierte al productor cuando esto sucede.

Universo de datos

Bruno confiesa que también están desarrollando soluciones para el tambo, que permiten optimizar la cantidad de alimento que se le suministra a las vacas, y otro para los silo bolsas. “Lo que permite IOT es el hecho de poder llevar la tecnología a las manos de los productores, para que ellos que son los que saben el trabajo, tengan a disposición las variables de importancia y las problemáticas para brindarle las respuestas a sus necesidades”.

En ese sentido, destacó el valor de la información que permite generar soluciones a medida. “La tecnología ya no es un bien de lujo, hemos desarrollado pequeñas unidades de información para mostrarle al productor y le damos lo que necesita”.

Respecto de la falta de conectividad, Bruno remarcó que a veces donde uno ve debilidades otro ve fortalezas. “Esta antena permite una fuente abierta para ser aprovechada para que cada persona pueda conectar su propia antena: cuando uno quiere implementar está solución lo puede hacer porque está al alcance de la gente poder hacerlo”.

Evolución productiva

Su hermano Marco es economista, y enfatizó que desde los inicios vieron a la apicultura como una actividad muy especial. “Vimos que no ha tenido una gran evolución a lo largo de la historia”. Y opinó que el tema de controlar 300 colmenas en un radio de varios kilómetros y la caída de la productividad se pueden contrarrestar con una colmena inteligente que genera información útil para el productor.

“Llegamos a Colonia Belgrano a través de un contacto con el presidente de la Cámara Argentina de Internet. Nos queremos meter a tecnologizar la apicultura, y así llegamos a Eduardo, un apicultor con un perfil como el que necesitábamos, porque maneja la tecnología y entendió de entrada todo lo que podíamos crecer. La tecnología LoRa nos permite abrir las puertas al campo y en el interior del país hay muchas necesidades que podemos satisfacer con esta tecnología. Además, sobre la misma plataforma podemos ir tecnologizando distintos sectores, porque contactamos una industria a internet y podemos monitorear el negocio a través de una APP. Queremos ser el puente a la tecnología de estos sectores productivos que no pudieron entrar en la revolución de la información”.

missing image file

Dispositivo. Los sensores cuentan con una pantalla solar para generar energía. Se instalan debajo de cada colmena.

La pata productiva

Para el apicultor Eduardo Hodel, este es un desafío del que se va a aprender en forma conjunta a prueba y error. “Pertenezco a la Cooperativa COSAR, con la que trabajamos dentro de un protocolo de calidad interno e internacional. Manejamos unas 750 a 1.000 toneladas anuales de miel con un promedio de productor que no sobrepasa las 300 colmenas en la zona. Yo en particular tengo unas 500, pero todas están dentro del mismo sistema de calidad”.

Hodel reconoce que a la actividad la complicaron el avance de la soja y el cambio climático, por eso es fundamental poder diferenciarse en el mundo, “porque miel produce mucha gente y poder colocar la miel es un desafío. Hace años que exportamos a Japón, la Unión Europea, Alemania, Francia, Bélgica y EE.UU. Estos chicos me contactaron y me interesó enseguida la idea. Se trata de sensores para las colmenas que permiten medir y cruzar datos y ver las conclusiones reales. Hay escasas experiencias, y esto permite ir generando información y sacar datos concretos para usar de manera productiva".

Uno de las cuestiones más importantes dentro de los números es el combustible, y este equipo permite evitar visitas al campo, ya que con el sensor de peso uno sabe si necesita darle más espacio o no para que sigan produciendo miel.

Y se entusiasmó con lo que viene. “De ahora en más vamos a empezar a cruzar datos como la temperatura y humedad para ver las curvas de floración, y para seguir trabajando con INTA como lo venimos haciendo. Tenemos altas expectativas, hay que empezar a medir, y para ir viendo cuáles son los sensores que más nos sirven”.

¿Qué es el sistema LoRa?

missing image file

Bajo control. La idea es controlar las colmenas desde el celular y reducir las visitas a campo.

Es una tecnología inalámbrica al igual que WiFi, Bluetooth, LTE, SigFox o Zigbee. Utiliza un tipo de modulación en radiofrecuencia, como la AM o la FM, que se usa en comunicaciones militares y espaciales desde hace décadas. La gran ventaja es que puede lograr comunicaciones a largas distancias y tiene gran solidez frente a las interferencias. Tiene alta sensibilidad para recibir datos, bajo consumo (hasta 10 años con una batería), largo alcance (10 a 20 km), baja transferencia de datos (hasta 255 bytes). Todo esto hace que sea una tecnología ideal para conexiones a grandes distancias y para redes de IoT en las que se necesiten sensores que no dispongan de corriente eléctrica de red. Por ello, tiene grandes posibilidades de aplicación para lugares con poca cobertura celular como aplicaciones agrícolas o ganaderas en el campo.