Llegan cartas

Obstáculos para los transeúntes

CARLOS A. MUÉS

No quiero ser reiterativo con el problema que encontramos a diario quienes nos desplazamos a pié (método saludable y aconsejable) por nuestra ciudad. Veredas de rally, asfaltos en las bocacalles descarnados, heces perrunas por doquier, que son un jabón para quien las pisa, etc.

La peatonal tiene un excelente estado de limpieza y su piso brinda a los transeúntes un verdadero gozo al circular allí.

A pocos metros de ella, en calle Tucumán esquina San Jerónimo, la vereda que mira al noreste, es una verdadera muralla vetusta abandonada por traslado comercial, que obstaculiza la senda; un antiguo kiosco de diarios y revistas con misión cumplida y trasladado metros más adelante, cierra el paso, con un peligro para las sillas de ruedas o los bastones blancos o verdes de los invidentes. No creo que a ninguna autoridad que le competa no lo haya visto. ¿Es gravoso retirarlo y sacar ese estorbo visual y peligroso, liberando la senda a los que se desplazan por la misma?

Como siempre agradezco la gentil atención.