Se subsana la falta de referencia cardinal en nuevas urbanizaciones

La palabra Bis y un “DNI” para pasajes sin nombre de la ciudad

Aquellos que tengan sentido de circulación este-oeste o viceversa, llevarán el mismo nombre de la calle que se encuentra inmediatamente al sur, junto con la expresión Bis. Y los pasajes con sentido norte-sur o viceversa, se denominarán con el nombre de la arteria que esté al este, más Bis.

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Ahora los pasajes y las calles sin nombre tendrán su denominación. Se incrementó el número de estas arterias innominadas con la explosión demográfica y las nuevas urbanizaciones en el ejido urbano.

Foto: Archivo El Litoral / Flavio Raina

 

Redacción El Litoral

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Se estima que en la ciudad hay al menos unos 40 pasajes y calles sin nombre. Y una callecita sin su “DNI” es una línea anónima dentro de una cuadrícula de 268 kilómetros cuadrados de superficie que tiene la capital: algo así como tres puntos suspensivos en un enorme territorio urbano. A cada lado de esos pasajes innombrados viven familias, y la localización para repartir correspondencia o boletas de servicios —por ejemplo— se hace muy difícil.

Para subsanar esta situación, el Concejo sancionó una ordenanza aplicando una solución para esas arterias cortas y “huérfanas” de nombre: establece que a aquellos pasajes innominados que tengan sentido de circulación este-oeste o viceversa, se les otorgará el mismo nombre de la calle que se encuentra inmediatamente al sur, y agregándose la palabra “Bis”, y para los que tengan sentido de circulación norte-sur o viceversa, se les otorgará el mismo nombre de la calle que se encuentre inmediatamente al este, también con la palabra “Bis”.

Un ejemplo: en barrio San Agustín, la calle Chaco “choca” con otra sin nombre, que tiene sentido norte-sur. Como la calle que está inmediatamente al este se llama Los Teros, esa callecita sin nombre ahora se denominará “Los Teros Bis”. Y así será con todos los pasajes innominados de la ciudad. Además, el Ejecutivo deberá reemplazar la señalética respectiva y notificar a cada frentista de la nueva denominación, dice la ordenanza, que se aprobó por unanimidad en el Concejo local.

Nuevas urbanizaciones

“En Santa Fe ocurrió que en estos últimos años, por razones de mejor utilización del suelo, todas las nuevas urbanizaciones creadas ya no tienen manzanas de 100 metros de largo por 100 de ancho, sino que tienen 100 metros de un lado y 50 del otro. Esto es porque se quiere hacer más efectiva la construcción, sobre todo con viviendas residenciales de baja altura”, declaró en el recinto Carlos Pereira (UCR-Cambiemos), que impulsó la iniciativa. Barrio Jesuitas es nuevo, y hay algunos pasajes que deben nominarse. Nueva Esperanza es otro caso.

La situación de las nuevas urbanizaciones generó, sobre todo en el norte, una gran cantidad de pasajes “sin DNI”. “Creemos que esta solución es bastante simple”, añadió Pereira, y aseguró que la ordenanza da una ventaja de localización: “Beneficia al conjunto de los vecinos de la ciudad para ubicar a una persona (o a su domicilio), que vive en algún barrio alejado y en un pasaje sin nombre; y también, para los carteros, en el trabajo de distribución de correspondencia, de las boletas con los servicios o notificaciones de cualquier tipo”.

Para Pereira, la ordenanza sancionada no obsta a que en un futuro, por pedido de los propios vecinos, esos pasajes y calles tengan un nombre propio. “De momento, ésta es una solución que busca lograr una mejor ubicación. Una ciudad con pasajes sin nombre dificulta la vida de la gente”, agregó el edil oficialista. Y recordó que el año pasado, el Concejo autorizó la puesta de nombres de pasajes y plazas en el barrio Favaloro, con nombres que hacían mención a hechos trascendentes de la Guerra de Malvinas.

  • De momento, ésta es una solución que busca lograr una mejor ubicación. Una ciudad con pasajes sin nombre dificulta la vida de la gente”.

Carlos Pereira

Concejal (UCR-Cambiemos)