De la Redacción de El Litoral
Cuando se rompe, los usuarios no tienen manera de saber si funciona. Los empleados del tren dijeron que debieron limpiar el parabrisas ya que fue graffiteado.
De la Redacción de El Litoral
Eran las 16.45 de ayer y un padre junto a sus hijos seguía esperando el tren urbano en la parada “Puente Negro”, ubicada en la intersección de la vía con calle Fray M. Esquiú. De acuerdo al cronograma de circulación, la formación ferroviaria debía haber pasado por allí a las 16.34 horas. Pero no pasó.
Entonces este vecino se comunicó a la línea de atención ciudadana de la Municipalidad 0800 777 5000 y consultó:
—¿Funciona el tren urbano?
—Sí, con normalidad —le respondió la empleada municipal al otro lado de la línea.
Luego el padre le pidió paciencia a sus hijos que aguardaban ansiosos el tren, mientras se asomaba por la vía para intentar ver una señal del paso de la formación. Pero nada.
Atención ciudadana
Unos minutos más tarde, llamó nuevamente al 0800 de la Municipalidad y reiteró la pregunta: “¿Funciona el tren urbano?”. Esta vez el empleado municipal que lo atendió se tomó el trabajo de preguntarle en qué parada se encontraban y cuál era su destino, al tiempo que le aseguró que el tren estaba en funcionamiento.
El vecino le contó que debía viajar hacia el sur y que durante la casi media hora que permaneció en el andén no vio ninguna señal que le de un indicio de funcionamiento del tren.
El empleado municipal le respondió entonces que iba a averiguar qué ocurría. Luego de unos minutos en los que sólo le pedía que “aguarde en línea, por favor”, finalmente le comunicó que por motivos que desconocían el tren no estaba en funcionamiento.
¿Reclamo?
El usuario preguntó entonces si existe alguna manera de informarse si el servicio funciona, para que la próxima vez pueda consultar antes ir a la parada y evitar así la pérdida de tiempo y que sus hijos se queden con la ilusión de viajar en el tren. El empleado le dijo que, si quería, podía formalizar un reclamo, pero que no tenía manera de saberlo.
Finalmente, la familia en cuestión caminó una cuadra y tomó una línea de colectivo urbano para llegar, tarde, a su destino.
Esta mañana, tampoco
Esta mañana, El Litoral concurrió a la parada principal del tren urbano, en El Molino (bulevar Gálvez y P. Víttori), a ver qué ocurría con el servicio. A las 9.58 horas (a dos minutos de la partida) el tren “ronroneaba” con los motores encendidos pero los choferes no estaban a bordo, sino sentados a la sombra unos metros más allá junto al paredón del edificio del ex molino.
Un empleado que, cuando el tren funciona, es quien entrega los boletos gratuitos que otorga la Municipalidad a los pasajeros se encontraba en la puerta del vagón.
—Buen día, ¿el tren funciona? — consultó El Litoral.
—Sí —fue la contundente respuesta.
—¿Entonces lo puedo tomar?
—No, el tren no va a salir porque pasó el Belgrano Cargas y estamos esperando que nos habiliten las vías para poder circular.
—Pero entonces, ¿funciona?
La respuesta llegó con una breve explicación. La persona encargada dijo que desde ayer por la mañana el tren no presta servicio debido a que “le cambiaron un repuesto”. Y agregó que ya está listo pero esta mañana, al menos hasta las 10 de la mañana, no había prestado servicio.
—¿Puedo subir? —interrumpió un ciudadano que se había acercado a la parada para viajar.
—No, no va a salir —le respondió el empleado.
Cómo saber si pasa el tren
El tren urbano se encuentra en un período de pruebas. Por ahora funciona de forma gratuita, con boletos que otorga la Municipalidad a los pasajeros que se acercan a cualquiera de las 8 paradas que hay en los 3,7 kilómetros de recorrido que recorre desde la estación El Molino hasta Don Bosco y viceversa. Hasta el momento funciona sólo con 20 viajes diarios, de 8 a 12.30 y de 16 a 20.30. Parte a cada hora exacta desde El Molino y a la media hora siguiente desde Don Bosco, para hacer su recorrido en unos 15 minutos.
Pero desde su puesta en funcionamiento hasta hoy se sucedieron una serie de inconvenientes que incomodaron a los usuarios. Primero se rompió y permaneció varios días parado. El día que volvió a prestar servicio tuvo un incidente de tránsito con un peatón atropellado. Luego quedó en medio de una fuerte discusión política en el Concejo, cuando el bloque justicialista cuestionó la concesión precaria del servicio, que no se conocía, a la empresa Autobuses Santa Fe y la falta de un estudio de costos, entre otros reclamos. Desde el municipio explicaron que el servicio está en fase experimental y que se consiguieron todas las autorizaciones para que funcione.
Por último, este nuevo desperfecto que lo dejó parado en la estación El Molino desde ayer, y la falta de información sobre el servicio a los ciudadanos. Ejemplo de ello es que tanto ayer como esta mañana los empleados municipales que atienden el 0800 de la línea de atención ciudadana no estaban al tanto de la falta de servicio, y los usuarios no tienen manera de saber si funciona el tren urbano, pese a que supuestamente también debería poder consultarlo desde el servicio de aplicación móvil “Cuándo pasa?”.
Graffiti
Los empleados del tren urbano dijeron esta mañana que debieron limpiar el parabrisas de la formación ferroviaria que anoche fue graffiteada.