El papá de Serena le pidió al tribunal "que haga su trabajo"

Juliano Salierno

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El próximo miércoles 29 de marzo tendrá lugar la audiencia de apelación de sentencia del caso Serena, por el cual fueron condenados a 20 años de prisión Luis Antonio “Pici” Cabrera (32), Lucas Maximiliano “Cepillín” Fernández (21) y Carlos Roberto Vega (24). Mientras la defensa va en busca de revertir un fallo ejemplar, la querella junto con la familia de la víctima le pidieron al tribunal “que haga su trabajo”.

“Que hagan su trabajo como lo tienen que hacer, porque si ya está todo dicho y todo probado, simplemente tienen que hacer su trabajo”, dijo Facundo Martínez, el papá de la nena de 7 años que recibió un disparo mortal en su cabeza, mientras participaba de la fiesta de fin de año del jardín en el Club Regatas. El episodio fatal ocurrió el 29 de noviembre de 2013 y fue producto de un feroz enfrentamiento armado, protagonizado por bandas antagónicas al otro lado de la laguna Setúbal.

“Si es necesario voy a estar”, aseguró Facundo, sobre su presencia en la audiencia prevista para el próximo miércoles a las 8.45, en la Sala 6 de Tribunales. El acto estará a cargo de los camaristas Alejandro Tizón -quien presidirá el acto-, Fernando Gentile y Fabio Mudry, los cuales enfrentan por primera vez un caso de semejante trascendencia pública, puesto que asumieron el cargo a fines del año pasado.

“Por nuestro angelito”

Para Facundo, volver a Tribunales “es removerlo todo”, “es duro, nos cayó muy mal la noticia, a mí, a Vero, a la familia, porque hace ya tres años estuvimos pendientes de todo esto y ahora de nuevo. Estamos en la última etapa y vamos a seguir teniendo fuerza para que se haga justicia por nuestro angelito; pero estamos con bronca, porque todo esto se tiene que cerrar de una vez por todas”.

Por el homicidio, en octubre pasado se realizó el juicio oral y público en el que los jueces Orlando Pascua, Jorge Pegassano y Darío Sánchez condenaron a Cabrera, Fernández y Vega como “coautores de los delitos de tentativa de homicidio agravado por el uso de armas de fuego, reiterado en dos oportunidades, en concurso real con homicidio agravado por el uso de armas de fuego”.

Dicha resolución condenatoria fue apelada por los abogados Horacio Paulazzo y José Ignacio Mohamad quienes plantearon la revocatoria, cuestionando la interpretación que hizo el tribunal de la prueba del debate. En tal sentido tildaron la sentencia de “parcial” y se mostraron contrariados por la calificación legal empleada. “Los jueces que intervinieron tomaron una resolución para la tribuna y no una respaldada en la prueba”, criticó Mohamad en una entrevista publicada días pasados por El Litoral.

Un juicio largo y doloroso

Las otras dos partes del proceso -fiscalía y querella- aceptaron la decisión del tribunal. De hecho la abogada querellante, Carolina Walker, recordó que “nosotros habíamos pedido cadena perpetua y dos calificantes más que no se tuvieron en cuenta a la hora de dictar sentencia, sin embargo hicimos un balance y consideramos que había sido un juicio muy largo y doloroso para la familia, por lo cual seguir ventilando algunas cuestiones nos parecía excesivo. Además nos pareció una sentencia justa, por lo cual decidimos no apelar”.

“Hoy la defensa apeló y está en todo su derecho de hacerlo”, sostuvo la Dra. Walker, “pero plantea cuestiones que nosotros consideramos que ya están resueltas y fueron contempladas en la sentencia y otras cuestiones que nunca solicitaron. Ellos atacan fundamentalmente una prueba que pidieron, que fue la reconstrucción del hecho, y esto hay que aclararlo”, insistió la abogada: “La reconstrucción del hecho no la pidió la fiscalía ni la querella, la pidió la defensa y fue la prueba fundamental para convencer al tribunal de que los tiempos coincidían con lo que la querella y la fiscalía siempre dijeron. Nos llama la atención, pero entendemos la postura de la defensa de representar los intereses de sus clientes”.

Valoración de la prueba

Además de defender la reconstrucción del hecho, la Dra. Walker se refirió a las “otras dos cuestiones” apeladas por la defensa, referidas a “la calificación legal” y “el monto de la pena”. “Atacan la figura del dolo eventual y plantean un homicidio en riña, lo cual nos parece absolutamente fuera de lugar, porque nunca lo han planteado durante la primera instancia”, dijo. Luego se refirió a “la cantidad de años recibidos por los agresores y respondió las críticas lanzadas contra el tribunal sobre una supuesta presión popular-mediática.

“Ellos dicen que los 20 años fueron producto del clamor popular y no de lo que ocurrió; pero lo que tuvo en cuenta el tribunal en ese momento fue el gran peligro que ocasionaron ese día, en donde había más de 100 personas en el lugar, había un cumpleaños en el medio, la fiesta de Regatas, gente saliendo de trabajar y yéndose a tomar el colectivo. Todo eso se tuvo en cuenta para darles los 20 años. Descargaron prácticamente tres cargadores”, recordó la querellante.

Por eso “lo que esperamos de este tribunal de apelaciones es que analice críticamente la sentencia y en función de las pruebas que se produjeron, que lo haga con la diligencia necesaria y que pueda ver que realmente las pruebas se hicieron en forma legal, que los testigos declararon voluntariamente, que no existe contradicciones entre ellos, que nunca se negó ninguna prueba a la defensa, sino todo lo contrario. Entonces no se le ha vulnerado ningún derecho a nadie y se ha llegado a probar que la postura de esta querella y de la fiscalía era la correcta y fue la que se apoyó con las pruebas”.

>>> El enfrentamiento

La abogada Carolina Walker aclaró que “no fue una bala perdida” la que mató a Serena, sino una feroz balacera que puso en riesgo a decenas de personas a uno y otro lado de la laguna Setúbal, la tarde del 29 de noviembre de 2013. “Hubo dos momentos: el primero a las 6 de la tarde y quedó fuera del juicio; pero hubo otro casi 40 minutos más tarde y fue en el que resultó muerta Serena. En este segundo acto, los que habían sido emboscados en el primer enfrentamiento vuelven a Alto Verde, buscan armas y comienzan a tirotear a dos personas desarmadas que se esconden en el borde de la laguna y una de esas balas cruza la Setúbal. En ese segundo tiroteo se secuestraron 17 vainas servidas, esto hay que aclararlo porque no fue una bala perdida. Fue un tiro, pero salió de un enfrentamiento en el que se encontraron 17 tiros, pero los testigos hablan de más de 30 disparos”.

>>> Jiménez no va

Consultada sobre la participación o no de la fiscal Mariela Jiménez de la audiencia de apelación, la querellante confirmó que “está afectada al nuevo sistema (al MPA) por lo cual no podría estar presente”. En su lugar “va a estar el fiscal de Cámara Miguel Ángel Molinari, “que va a defender la sentencia como lo hizo la Dra. Jiménez, que trabajó muy diligentemente”. “Ella nos ha manifestado todo su apoyo y se puso a disposición para ayudarnos, pero no puede estar en la audiencia. Es una cuestión de procedimiento que entendemos”, cerró Walker.