Con esperanza de destrabar

Ivana Fux

Sesenta días de negociación sin resultados positivos. Mañana se cumplirán exactamente dos meses del inicio de la paritaria docente en la provincia, que hasta aquí no ha logrado cerrar un acuerdo salarial para garantizar el normal dictado de clases. Sesenta días de discusión y nueve de paro. Precisamente el lunes y ya sin medidas de fuerza en el horizonte, el gobierno provincial retomará el diálogo con los gremios para intentar destrabar el conflicto, que se ha convertido en el único frente que no se ha podido cerrar. Un conflicto que como ya se apuntó de manera recurrente, aparece de manera inédita atravesado por la puja que se mantiene con el gobierno nacional, reticente a convocar a paritarias, aun a pesar de un fallo judicial que así lo ordena.

Sustentado en esa doble fase del problema, el gobierno de Miguel Lifschtiz encaró la primera etapa de la discusión con una postura moderada e intentando inscribir la mayoría de las huelgas en un plan de lucha que, en realidad, tiene su epicentro en Capital Federal. Pero cuando los docentes por amplia mayoría rechazaron la oferta que sí habían aceptado los demás gremios estatales -25 por ciento, aunque el sector asegura que en la práctica son dos puntos menos-, el Poder Ejecutivo endureció su estrategia. Anunció que descontaría los días de paro, adelantó que extendería el ciclo lectivo y deslizó que el último paro había tenido bajo acatamiento; la ministra de Educación, Claudia Balagué, cuestionó la metodología de las asambleas -que el gremio interpretó como una “injerencia” en la vida sindical- y el gobernador advirtió que los maestros no tenían “otra chance” más que aceptar la oferta.

La docencia respondió con una masiva movilización y concentración en la plaza 25 de mayo, y una declaración netamente política de Sonia Alesso. La titular de Amsafe y Cetera sorprendió diciendo que “el gobierno de Lifschitz ha inaugurado una nueva forma de relacionamiento con los maestros en el sentido de la tensión con la que ha planteado los términos de la negociación. Eso es algo nuevo en la gestión del Frente; no lo habíamos vivido en las anteriores gestiones del Frente Progresista”. La dirigente sindical caló así en la interna socialista, comparando el perfil del actual mandatario con sus antecesores Hermes Binner y Antonio Bonfatti, todos referentes del Partido Socialista. Desde el Poder Ejecutivo, el ministro Pablo Farías -ante la consulta de El Litoral- le retrucó que “quienes endurecieron gravemente la situación fueron los docentes, porque ante una oferta importante y distintiva del resto del país, prefirieron seguir con las medidas de fuerza e interrumpir el diálogo cuando nosotros estábamos dispuestos a seguir conversando”.

En el contexto de confrontación descripto hasta aquí, es en el que mañana se retomará la negociación. Los funcionarios llevarán como carta un aumento de fondos equiparables con el Fonid que por decreto dispuso el gobierno de Mauricio Macri. Ésa podría ser la llave para encauzar la discusión, porque en lo que hace a recursos propios, la gestión provincial ratificó que mantiene la posición de no aumentar las partidas ni en un solo peso.