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Un joven atacó hoy a otros estudiantes con un hacha en Rusia y dejó al menos seis heridos en una escuela de la ciudad de Ulan-Ude, en la región de Siberia, en un nuevo incidente de este tipo en una semana.
El adolescente entró en la clase de séptimo grado y atacó al maestro. Luego se lanzó sobre los alumnos. Además, lanzó un cóctel molotov en la clase, informaron las autoridades.
Este es el tercer incidente en una escuela en una semana. El lunes, dos jóvenes atacaron a alumnos de primaria con un cuchillo en la ciudad de Perm, en los Montes Urales. Quince personas resultaron heridas.
Dos días después, un joven de 16 años acuchilló a un compañero en una escuela de un pueblo en la región siberiana de Cheliabinsk.
Políticos siberianos no descartan una relación entre los ataques. ‘Estoy seguro de que las investigaciones arrojarán que hay un organizador‘, dijo el representante presidencial para Siberia, Sergei Menjailo, a la agencia Interfax. Oficialmente se afirma sin embargo que hasta ahora no hay pruebas de que haya un nexo entre los tres casos.
Por ahora se desconoce el trasfondo del ataque en Ulan-Ude. Los diarios rusos citaron fuentes según las cuales el menor de edad se quiso vengar del profesor por un examen que no aprobó. Además, al parecer anunció lo que iba a hacer a un conocido por Internet. El muchacho al parecer escribió que no fuera al colegio en ese día ‘porque se pondrá sangriento‘.
De acuerdo con los medios, el joven enmascarado atacó a varios alumnos en Ulan-Ude, en la frontera con Mongolia. Una chica habría perdido un dedo de un hachazo. Las imágenes difundidas en Internet muestran un salón de clases desolado y objetos rotos. El presunto autor fue detenido tras intentar quitarse la vida y llevado a un hospital.
Tras el ataque del lunes en Perm, los medios rusos se preguntaban si los alumnos podrían haberse inspirado en la matanza en una escuela de Columbine en Estados Unidos en 1999. El diario ‘Komsomolskaia Pravda‘ informó que los jóvenes intercambiaron mensajes sobre ello en redes sociales. En el conocido incidente, dos adolescentes mataron a 13 personas e hirieron a 24.
La primera medida de las autoridades fue, por ahora, cerrar varias páginas en las redes sociales rusas. Al parecer se trata de grupos que hablan de matanzas en escuelas y métodos suicidas. De esta forma, ‘se podrá proteger a la generación más joven del verdadero mal‘, afirmó el portavoz del Kremlin Dmitri Peskov.