Europa se prepara para debatir sobre migración

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Bruselas, la capital burocrática y política de la Unión Europea, será sede este domingo de una cumbre informal entre 16 jefes de estado de los 28 miembros, previa a la que se realizará el próximo jueves y viernes, y donde la política migratoria y de asilo en el bloque serán el tema central.

Mientras tanto desde varios países se conocen pronunciamientos y se anticipan conflictos en una materia que tiene en vilo al Viejo Continente. Bulgaria, que ostenta la presidencia rotatoria de la Unión Europea (UE), propondrá mañana cerrar las fronteras exteriores del bloque y establecer centros de asilo fuera de territorio comunitario, informan medios búlgaros remitiéndose al gobierno.

En una conversación telefónica con su homólogo húngaro, Viktor Orban, conocido por sus posturas xenófobas y antimigratorias, el primer ministro búlgaro, Boko Borissov, defendió “medidas inmediatas para el cierre de las fronteras exteriores de la UE y controles estrictos en las fronteras interiores de la UE”.

Según la información, Borissov quiere también proponer la construcción de centros de refugiados fuera de territorio comunitario donde se decida qué migrantes pueden recibir protección como refugiados. Así, los migrantes que lleguen de forma ilegal a la UE y no sean aptos para recibir asilo, serían devueltos rápidamente a su país o al primer país seguro por el que hubieran viajado antes de entrar en territorio comunitario.

Al igual que Grecia, Italia y España, Bulgaria no está de acuerdo con que los migrantes que se encuentran ya en la UE sean devueltos al primer Estado europeo en el que fueron registrados. “Esto dificultaría la situación en esos países”, alertó Borissov.

En Alemania

Esta postura choca con la del ministro de Interior alemán, Horst Seehofer, que defiende la expulsión de los migrantes que lleguen a las fronteras alemanas al país en el que se han registrado previamente. “En la Cancillería se ha hecho una montaña de un grano de arena. Y es muy inusual amenazar al presidente del socio de coalición, la Unión Cristianosocial (CSU), con la competencia para establecer las líneas políticas generales del país”, declaró en un diario alemán sobre un poder que recae en manos exclusivamente del canciller y que obliga a los ministros a actuar dentro de esas líneas generales.

“Tampoco vamos a aguantarlo”, indicó Seehofer, líder de la CSU, partido bávaro hermanado con la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel, sobre una disputa que amenaza con romper el gobierno alemán apenas tres meses después de haber logrado formar una alianza con los socialdemócratas tras las elecciones de septiembre de 2017.

La CSU quiere rechazar a los solicitantes de asilo en la frontera alemana si ya han sido registrados en otro país de la Unión Europea (UE). Seehofer le ha dado a Merkel hasta la cumbre de la UE de los próximos 28 y 29 de junio para alcanzar una solución europea con acuerdos bilaterales con países afectados como Italia. Si no logra una medida europea que tenga el mismo efecto que su plan de asilo, el ministro del Interior anunció que ordenará un rechazo nacional unilateral en las fronteras contra la voluntad de Merkel, un paso que podría llevar a la ruptura de la alianza conservadora (Unión) y, por tanto, de la coalición de gobierno.

La decisión de Merkel de abrir las fronteras en plena crisis migratoria hizo que sólo en 2015 llegaran aproximadamente 900.000 solicitantes de asilo a Alemania, creando una situación sin precedentes en el país. Desde entonces, han llegado casi medio millón más y el gobierno alemán se afana por buscar una solución ante el descontento creciente de la población.

En Italia

Las ONG que rescatan migrantes en el mar pueden “olvidarse” de llevarlos a los puertos italianos, insistió el ministro de Interior y viceprimer ministro de Italia Matteo Salvini. La advertencia llega mientras el barco “Lifeline” de la organización humanitaria alemana Mission Lifeline sigue sin poder desembarcar a los más de 200 migrantes rescatados del mar en puertos italianos, como tampoco puede hacerlo otro barco de carga danés, el “Alexander Maersk”, con más de 100.

“(Quiero) reiterar que estos barcos pueden olvidarse de llegar a Italia: quiero cortar el negocio a los traficantes y mafiosos”, escribió en su perfil de Facebook. Sus palabras también valen para organizaciones como Proactiva Open Arms, SOS Méditerranée, Sea-Watch y Sea-Eye, cuyos barcos se encuentran en estos momentos en el mar o en puertos de Malta.

Salvini, líder de la ultraderechista Liga, de corte xenófobo, lleva mucho tiempo acusando a las ONG de beneficiarse de los rescates de migrantes y estar coordinadas con los traficantes de personas. Las acusaciones no están probadas y son firmemente rechazadas por las organizaciones.

A todo esto, el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, pidió a los Estados miembros de la UE que no sean egoístas en la política de refugiados. “Abordar la cuestión de la inmigración no debe llevar a la destrucción de la UE”, declaró a los periódicos regionales del grupo mediático alemán Funke. “Si cada Estado miembro actúa sólo en su propio interés, la Comunidad se desmoronará”, agregó.

Trump con víctimas de crímenes de inmigrantes

El presidente Donald Trump recibió este viernes en la Casa Blanca a una decena de personas a las que presentó como padres de hijos asesinados por inmigrantes que vivían ilegalmente en el país. El acto pareció funcionar como una contracara de la creciente polémica desatada por su política migratoria de tolerancia cero que separó a miles de niños inmigrantes de sus familias y los encerró solos. “Estos son los ciudadanos estadounidenses permanentemente separados de sus seres queridos, porque los mataron inmigrantes ilegales criminales”. “Dado que los medios de comunicación han ignorado sus historias, quiero que el pueblo estadounidense escuche directamente de la boca de esta gente el dolor que han sufrido”, agregó.