El Litoral | [email protected]
“Siempre fue potable”, aclaró el gerente de Relaciones Institucionales de Assa. Se trabajó para mejorar el sabor, el olor y la apariencia visual.
El Litoral | [email protected]
Hace 15 días, Assa inauguró una nueva planta de agua potable en el noroeste de la ciudad, con la advertencia de que los primeros días podría registrarse algún episodio de turbiedad. Los vecinos no sólo evidenciaron eso, sino que también reclamaron por su “mal sabor”.
En los últimos días, la empresa estuvo trabajando para mejorar el servicio, ajustando todos los parámetros, según comentó Guillermo Lanfranco, el gerente de Relaciones Institucionales de Assa, quien resaltó que “el agua nunca dejó de ser potable”.
Por eso se abocaron a optimizar las características organolépticas del agua, es decir, lo que tiene que ver con la percepción: el sabor, el olor y la apariencia visual. En ese sentido, “hemos bajado el cloro al mínimo necesario para que el agua sea potable, porque sin cloro no hay agua potable ya que no se eliminan los elementos bacteriológicos y orgánicos”.
Además, contó que se redujo la salinidad al mínimo posible: “Los niveles están por debajo de algunas otras poblaciones que abastecemos en el interior de la provincia -tenemos más de 200 perforaciones en servicio en las 15 ciudades que no están en la ribera del río Paraná-. Y la turbiedad también se ha reducido porque se ha hecho limpieza de cañerías y purgado. Se ha trabajado en una red que estuvo mucho tiempo con baja presión y eso se nota en la acumulación de sedimento y al aumentar la presión se produce un movimiento de esos sedimentos”, explicó.
Con estas tareas, la empresa considera “estabilizado” el servicio, con las características propias de un proceso de este tipo. La potabilización del agua de pozo se realiza a través de un tratamiento biológico de remoción del hierro y manganeso por medio de bacterias naturalmente presentes en agua subterránea, que aceleran la oxidación y precipitación de estos minerales para eliminarlos. Durante dos décadas, este barrio ubicado en el extremo norte de la ciudad recibió agua de red desde la planta central, pero como la presión que recibían los vecinos era muy baja, se optó por esta nueva modalidad.
Lanfranco recordó a los vecinos el número de la empresa para acercar reclamos: “Si algún vecino nota turbiedad en su conexión, la limpiamos y si tiene alguna otra duda nos llaman al 0810-7772000 y vemos en cada caso que está pasando, pero tienen que estar tranquilos porque el agua es absolutamente potable”, finalizó.
Las tres claves
Turbiedad: “Ha desaparecido, desde el fin de semana no tenemos registro de casos”.
Cloro: “Está en el piso que puede tener el agua para tener la condición de potable”.
Sabor: “Lo hemos estabilizado porque bajamos el nivel de salinidad prácticamente a la mitad de los primeros días”. (Guillermo Lanfranco, Assa)