Leonardo Pez
El 8 y 9 de septiembre se desarrolló en la ciudad la primera edición de HIT, evento autogestionado por historietistas e ilustradores de la región, que sirvió, entre otras cosas, para visibilizar la potencia de la disciplina en Santa Fe y zona.
Leonardo Pez
“El humor santafesino ¿existe?”, se preguntaba una nota publicada el 7 de agosto de 1987 en La Revista, suplemento que acompañaba a El Litoral. Más de treinta años después, con muchos exponentes del género a nivel provincial y regional, y con un acompañamiento del público -especial hincapié para niños, adolescentes y jóvenes- se llevó a cabo HIT: Historieta, Ilustración y ¡Todo! El Litoral dialogó con organizadores y participantes de la convención libre y gratuita realizada el 8 y 9 de septiembre en Demos Comunidad Cultural Emergente, en el marco de la convocatoria de Espacio Santafesino y con la idea de recuperar y aggiornar “el espíritu de los Salones del humor y la historieta, organizados por el plantel de dibujantes de El Litoral”.
Necesario
Para Maxi Sanguinetti, “es importantísimo y señero que haya un evento así en el litoral”. Gaz, de Big Bang, reconoce que “llevamos años esperando tener un evento que nos nuclee, nos represente y nos haga establecer vínculos con compañeres de otras provincias”. Fue fundamental el empuje de “editoriales y artistas reconocidos de Santa Fe, Córdoba, Corrientes, Paraná, Buenos Aires, Sunchales y Rosario”, detalla José Moscovich (Grünendör). “Esto permitió una feria de publicaciones de lo más variada, con material tanto en formato fanzine como libros de sellos editoriales con larga trayectoria”, precisa Facundo Belgradi (integrante del grupo organizador junto a Ignacio Yunis, Gastón Zuñiga, Sebastián Mercau, Rodrigo Cocco y Juan De Rossi).
Rodrigo Barba habla de un “evento necesario” para la región. “Nos debíamos un encuentro de historieta, ilustración y humor gráfico. Pero principalmente, sus organizadores lo merecían”. Agrega Moscovich: “Normalmente llegás a un evento de estas características y te instalás donde podés, en el lugar que no ocuparon los que llegaron primero: al lado del baño, al fondo de todo, en el rincón menos iluminado y el espacio para cada feriante apenas supera los 50 cm. Todo esto no ocurrió en HIT. Cada uno tenía un espacio asignado, amplio y cómodo, con un cartel indicando el nombre de la editorial. Y todas las mesas eran iguales. La de Grünendör, que somos unos pinches, era igual a la de Salvador Sanz, que es casi un dios. Eso me encantó”.
Cruces
Belgradi remarca como un gran logro la presencia de las familias. “Esto fue dado en gran medida a una iniciativa gestionada por Sebastián y Gastón, con colaboración de Osmar Petroli: un concurso de diseño de personajes del Litoral, dividido en dos categorías (de 8 a 15 años y de 15 años en adelante). Fue una manera de hacer participar al público, con producciones propias”. En este sentido, Gaz señala que “de alguna manera, la premisa de este tipo de encuentro es propiciar el cruce entre el autor y el público”.
Las dos jornadas que tuvo lugar HIT incluyeron talleres de Ilustración con acuarela (a cargo de Agustina Manso) y manga (coordinado por Leandro Caballero), charlas y feria editorial, además de la muestra “Concurso Creación de Personajes Fantásticos del Litoral”. Según relata Barba: “Tuve, en una tarde, dos experiencias inolvidables: haber presentado al fin mi libro en la ciudad donde nací, junto a Facu Belgradi, que lo hizo posible; y haber compartido una charla con el dream team del humor local: Maxi Sanguinetti, Jaimo, Lehmann, Rebo Pérez y Gastón Zúñiga”.
“Que todo haya salido tan bien y que todos los detalles hayan sido tan cuidados no ha de haber sido una cosa azarosa: los organizadores son también historietistas y editores independientes, y tienen cientos de eventos encima, como feriantes”, afirma Moscovich. Y agrega: “fue un buen lugar para conocernos personalmente con unos, reencontrarnos con otros, hacer contactos, intercambiar experiencias y aprender (además de mostrar y vender a los concurrentes las historietas que hacemos, claro)”.
Trabajadores del arte
“La idea de HIT es poder devolver a la comunidad lo dado, buscando hacer del evento un suceso regional donde tanto obreros de las artes gráficas como la población, salgan beneficiados. A partir de ahora no queda más que seguir creciendo, buscando hacer un evento cada vez más profesional con la mayor llegada al público posible”, sostiene Belgradi.
En la visión de Barba, es un espacio con muchas virtudes, entre ellas, “descubrir trabajadores del arte que desconocíamos, escuchar a gente muy talentosa expresar sus ideas y visiones sobre el oficio, caminar un fin de semana dentro de la esfera del dibujo y respirarlo. Pero principalmente, es un excelente espacio para (re)encontrarnos quienes amamos el lápiz y el papel”. Sanguinetti plantea que en uno de los paneles resurgió “la idea de armar un sindicato de dibujantes, que sería de vital importancia para unificar criterios, entre otros, acerca de cómo cobrar nuestros trabajos”.
Respecto a lo que se viene, Gaz se anima a proyectar: “No pudimos abarcar todos los campos, por una cuestión de infraestructura, pero queda planteado el desafío para el año siguiente”.