Mauro L. Muñoz / [email protected]
El director provincial de Educación Artística, Roberto Barbieri, explicó los motivos de los cambios en el ingreso a los establecimientos de modalidad artística.
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En la última semana se llevaron a cabo distintas reuniones con padres, docentes y directivos de las escuelas de modalidad artística de la provincia con representantes ministeriales. El espacio surgió como respuesta al reclamo por el cambio en la modalidad de ingreso en estas instituciones. A partir de 2019 se unificará el criterio establecido en el decreto 0181/09, en el que se indica que los bancos deben ser sorteados cuando haya más demanda que plazas disponibles.
Los planteos del grupo de padres aspirantes radican en la imposibilidad de elegir estudiar en una escuela cuya propuesta educativa esté de acuerdo a la vocación y el interés. Además, preocupa la escasez de vacantes. Según expresan los familiares interesados en la secundaria del Crei, sólo quedarían entre 15 y 20 plazas disponibles para el futuro sorteo.
Roberto Barbieri, director provincial de Educación Artística, explicó a El Litoral detalles de las reuniones. Manifestó entender a los padres en sus reclamos, reconoció la insuficiencia de vacantes y valoró la implementación de jornadas vivenciales para perfeccionar la elección en las distintas modalidades formativas. Por otro lado, recalcó la importancia de la normativa vigente como medio para garantizar la libertad de acceso.
“La idea es darle la palabra a todos, canalizar las inquietudes y ponerlas en contexto para dar las respuestas a lo que se pueda satisfacer, de acuerdo a las posibilidades que tenemos. Valoramos el compromiso de los padres interesados en la educación, tanto de sus hijos como de las instituciones, porque es la búsqueda de toda la educación pública”, sostuvo.
—¿Cuáles son las principales inquietudes que les transmitieron los familiares?
—En la reunión con los padres de estudiantes que hoy están en los ciclos vocacionales del Crei, que se empieza desde los seis años, nos manifestaron la expectativa que tienen de ingresar directamente al nivel secundario. Ellos encuentran con que les asiste un derecho de continuidad en el proceso de estudios de sus hijos, por medio de ingreso directo. Y otra de las inquietudes es sobre el cupo, que no es mucho, para el ingreso desde el primer año.
Lo que nosotros explicamos es que todo lo que es vocacional en el Crei, no es primaria obligatoria.
La normativa que existe marca que la modalidad de ingreso a la secundaria está normada por un decreto del año 2009 para las más de 600 secundarias de toda la provincia. Esta forma de ingreso establece que una escuela primaria debe estar en el mismo edificio y en trabajo articulado con el nivel secundario.
Esta situación no sucede con el Crei porque no articula con la escuela existente en el Complejo Sarmiento. Además porque los cursos no son obligatorios, sino que son una oferta contraturno que se le brinda a la comunidad.
Por otro lado, la normativa lo que manda es que, cuando la demanda supere la cantidad de cupos, debe realizarse un sorteo para que puedan asignarse de una manera transparente.
Además, pasan a tener privilegio de ingreso familiares de personal escolar, sean docentes o asistentes escolares, así como también hermanos de quienes ya asisten al establecimiento y los alumnos repitentes. En último término los aspirantes en general.
—¿Qué posibilidades de solución existen a estas inquietudes?
—Dialogamos mucho y entendemos los planteos. Lo que nosotros aclaramos es que continuará la posibilidad de asistir a los cursos vocacionales para las familias que quieran. Específicamente, en el Crei existe el ciclo de Formación Artística para la Industria Cultural que titula a los jóvenes en música y les ofrece la posibilidad de insertarse en el ámbito laboral propio de la música o bien de la docencia, porque les da competencia docente para trabajar en el mismo Crei y en la Escuela Orquesta de Niños que son lo que llamamos organismos oficiales musicales.
Entendemos que las familias creen en un proceso de formación de sus hijos en el ámbito musical, pero este no es el fin último de la escolaridad secundaria en educación artística. El fin último es, por un lado, ofrecer la escolaridad en una secundaria que es obligatoria por ley desde 2006; y, por otro, dar herramientas formativas desde el campo artístico a cualquier joven santafesino que quiera, a partir de una escuela especializada.
—¿Cómo siguen las actividades desde ahora?
—Nos parece que todas las escuelas deberían abrir las puertas a que se hagan jornadas vivenciales para que las familias conozcan la escuela que están eligiendo. Y que en el caso de las de arte son particulares en su oferta.
Por lo tanto, una vez que termine el proceso de ingreso, indicamos a las escuelas que vean la posibilidad de hacer este tipo de encuentros para que alumnos y docentes cuenten e informen a la comunidad.
A partir de allí, será decisión de los padres presentarse el día diez de diciembre al sorteo donde estarán las vacantes disponibles.
Problemas edilicios
En total, las secundarias de modalidad artística son cuatro en toda la provincia. Hay dos en la ciudad de Santa Fe, Crei y Mantovani, una en Venado Tuerto, la Escuela Provincial de Arte Nº 3, y una en Rosario, Nigelia Soria. Son escuelas que tienen características particulares: tienen jornada completa, con una carga horaria intensa y una especialidad. En la Nigelia Soria en danza, música y artes visuales; en el Crei en música; en Mantovani en artes visuales y audiovisuales; y en Venado Tuerto es también de artes visuales.
Respecto a la falta de vacantes, Barbieri reconoció la necesidad de ampliar el espacio disponible para brindar mayores posibilidades. Aunque puntualizó en las particularidades de cada establecimiento.
—¿Cómo afecta la cuestión edilicia en el reclamo?
—Entendemos el reclamo de los cupos. La cuestión edilicia es una demanda clara. Pero también lo es la libertad de acceso.
El tema de educación artística en el secundario es joven porque nace en 2012. Fuimos creciendo y dando posibilidades. Trabajando en las mejoras edilicias que son necesarias.
Por ejemplo, ahora la Mantovani tiene en construcción mil metros cuadrados nuevos. En su finalización, que estimamos que será en el tercer trimestre del año que viene, dará mayor cupo.
—¿Y en el Crei?
—Desde nuestra parte existe el compromiso de analizar las posibilidades de aumentar el cupo, pero de una manera responsable. Hoy el edificio en el que funciona el Crei no admite una división más, porque también funciona un jardín de infantes, un primario, la parte vocacional y el secundario.
Nosotros debemos poder generar propuestas de ampliación, pero que nos permitan crear un año para luego poder crear toda la cohorte.
Esto se debe hacer en espacios pensados de antemano, en función de la especificidad de una secundaria. Porque, además de las materias comunes, hay materias propias que requieren de espacios amplios y esto hace que los cupos sean menores.
Asumimos el compromiso junto a los equipos directivos de hacer una mesa de diálogo y trabajo para analizar los aspectos normativos.