Iapos cumple 40 años

El Litoral

El Instituto Autárquico Provincial de Obra Social (Iapos) cumple sus primeros 40 años desde que comenzó a funcionar el 1 de enero de 1979 con unos 15.000 afiliados activos que con su grupo familiar sumaban alrededor de 45.000 beneficiarios. Hoy cuatro décadas después, la obra social estatal, alcanza los 263.379 titulares para llegar a una población total de 573.332 afiliados, es decir, el 27,69% de la población total asegurada en la provincia.

La directora del Instituto, Soledad Rodríguez reflexiona, “40 años traen consigo una pequeña historia de vida, pequeña pero robusta. Esta historia está fundamentalmente escrita por cada trabajador que cotidianamente le da sentido a la institución, la construye y la llena de vida, ellos son el gran motor transformador del IAPOS, y junto a los directivos tenemos el desafío de no quedarnos quietos, estar en movimiento, escuchar y trabajar sobre estructuras pensadas para otros tiempos y adaptarlas a la actualidad”.

Rodríguez destacó que las obras sociales estatales están basadas en un un sistema solidario y refirió, “Lo interesante es que poseen un solo modelo prestacional, independiente del aporte del afiliado, lo que redunda en una fortaleza muy importante y por supuesto, en un gran desafío, porque todos nuestros avances están basados en la equidad, que es el espíritu del sistema solidario”.

La actual gestión del IAPOS inició en el año 2015 junto al mandato del gobernador Miguel Lifschitz quien designó a la Dra. Rodríguez para que lidere los procesos prestacionales.

Como balance de la actual gestión la directora aseguró que “han sido 3 años muy complejos en el contexto nacional, hemos tenido que sobrellevar situaciones que excedían a la provincia. Pero aún así no dudamos nunca, porque nuestro horizonte es la calidad de vida de nuestros afiliados.”

“En 2018 tuvimos un incremento en la cantidad de nuevos afiliados – aseguró la Rodríguez – y esto tiene que ver con que la obra social se presenta como una alternativa ante la crisis del sistema de salud privado sumado a el aumento de la desocupación. Así Iapos se hace cargo a través del sistema de afiliados voluntarios o por sistema abierto”.

El 2018 en cifras

En el último año, se registraron 46.968 nuevas afiliaciones de las cuales 3.961 fueron realizadas por sistema, es decir, no fueron a ningún lugar físico para adherirse. A su vez 37.981 afiliados compraron 1.347.579 bonos a través del sistema on line.

La demanda anual de órdenes de consulta en el último año alcanzó la cifra de 3.545.327 y las internaciones a 87.461. Por otra parte, en el último año obra social brindó acompañamiento a 1.395 mujeres del Programa de Fertilidad y para ellas se autorizaron 4.670 prácticas.

Dentro del programa de enfermedades mentales y severas, 4.029 afiliados recibieron 35.801 prácticas autorizadas. De los afiliados, 14.339 personas tienen otorgado certificado único de discapacidad de los cuales 515 afiliados concurren diariamente a centros terapéuticos, y cada mes autorizan 35.000 tratamientos de terapias en rehabilitación (kinesioterapia, psicoterapia, terapia ocupacional y otras) y se financian 328.882 km en recorrido de los afiliados hacia las terapias.

También se realizaron 5400 screening como parte del Programa de Prevención de Riesgos Cardiovasculares, una de la estrategias que se destaca por basarse en la prevención.

40 años de historia

Hasta el momento de su creación los empleados de la administración central de la provincia contaban con cobertura médica a través de la obra social sindical de los empleados públicos. Con el golpe militar de 1976 y la intervención del sindicato y la obra social del mismo, se rompe el acuerdo con los prestadores y se desatan serias dificultades económicas financieras, haciendo imposible administrar el déficit. Así, a pedido del Ministerio de Bienestar Social se realiza un proyecto para la creación del Instituto de Obra Social de la provincia de Santa Fe, ya que la mayoría de las provincias contaba con una obra social propia para sus trabajadores.

El 27 de diciembre de 1978 se rubrica el acta fundacional del Instituto Autárquico Provincial de Obra Social, cuya primer firma es la del Ministro de Bienestar Social, Francisco Pitaro, comenzando a funcionar el 1ro. de enero de 1979. En el acto de inauguración el Director Organizador, Dr. Osvaldo Sanchez, le entrega la Dirección Provincial a la primer autoridad política del instituto, el Vice Comodoro Miguel Angel Pent.

Para su funcionamiento, la provincia adquirió el ex hotel Alambra, a fines de 1978, y los casi 35 empleados existentes, mudaron a pie los pocos muebles y útiles con los que contaban, hasta el edificio donde hoy continúa funcionando la obra social provincial, Rivadavia 3452. En simultáneo a la puesta en funcionamiento del Instituto, se agregaron a los afiliados existentes de la administración pública central, los jubilados y pensionados de la provincia; los trabajadores de municipio y comunas, éstos como organismos adheridos y empleados del poder judicial. Así tomó el perfil definitivo de la masa de afiliados que llega hasta la actualidad.

En los 90 días posteriores a la puesta en funcionamiento de la obra social se concretaron casi la totalidad de las afiliaciones. El primer sistema informático que se implementó en la obra social, a los pocos días de su inauguración fue el Sistema de Afiliaciones, luego de la registración de todos los afiliados en tarjetas perforadas, en aquel entonces todos los procesos demandaban largas horas.

Por aquel entonces, los convenios se fueron concretando con las instituciones representativas de los profesionales (Federaciones de alcance provincial y entidades de Santa Fe y Rosario inicialmente) para tratar de nuclear la mayor cantidad de prestadores y cubrir todo el ámbito de la provincia. Las autorizaciones de prácticas y auditorias eran realizaban en la obra social por personal del IAPOS y los sistemas de facturación contemplados en los contratos eran por prestación, no existiendo el pago globalizado.

En el inicio, existía cierta incertidumbre acerca de la eficacia del nuevo sistema. Los afiliados se agolpaban frente a un escaso grupo de personal, demandando órdenes asistenciales. La obra social y el sector prestador dio adecuada respuesta a esa demanda.